En busca de la PAZ ¿Cuánto has caminado o peregrino buscándola?

Carlos Flores

En busca de la PAZ

                                                          Mi paz os dejo, mi paz os doy, no como el mundo la da yo os la doy. Jesús

                           Mi paz os dejo, mi paz os doy, no como el mundo la da yo os la doy. Jesús
No hay camino hacia la Paz, la Paz es el camino. Mahatma Gandy

No hay camino hacia la Paz, la Paz es el camino. Mahatma Gandhi


El fruto de la oración es la fe, el fruto del Amor es el servicio, el fruto del servicio es la Paz.  Yogananda

El fruto de la oración es la fe, el fruto del Amor es el servicio, el fruto del servicio es la Paz. Yogananda


 

Para llevarte al propósito de este pequeño escrito te contare una pequeña historia.

Su caminar o mejor dicho sus grandes zancadas, su correr era, con paso firme, sus gruesas piernas como troncos muy parecidos a aquellos frondosos árboles por los que su carrera parecía interminable, el sudor manaba de todo su cuerpo, su rostro se mostraba serio, pero su mirada estaba clavada en aquellos pequeños caminos que recorría a toda prisa, esquivaba cuanto podía, piedras, pequeñas ramas, en fin todo aquello que podría encontrarse en aquella tupida selva que recorría, su pensamiento era solamente uno, seguir corriendo, a pesar de que ya había recorrido mucha distancia, aún su fuerte musculatura y su constante caminar y correr por aquellos parajes le permitía continuar con paso firme.

Por momentos sentía un leve desfallecimiento, sentía como algo o alguien pronto le daría alcance, pero eso no lo inmutaba, en su mente tenía claro su objetivo, y seguía corriendo, su paso continuaba firme, aunque a veces un pequeño montículo, un arbusto o una roca, lo sacaban de balance, pero con majestuosa destreza sorteaba aquellos insignificantes obstáculos, por su negra cabellera y llegando a su rostro, grandes gotas de sudor emanaban, a veces tenía que limpiarlas rápidamente para no perder el punto central de su vista, aquella pequeña vereda, que a veces prácticamente desaparecía, ante el paso firme y constante de la naturaleza, que lo invadía todo. Aquel precioso trinar de pájaros, el ruido de los monos aulladores, aunque estaban allí, no eran perceptibles, el solamente deseaba correr y correr, el cansancio no sería un obstáculo, tenía clara su meta, había transcurrido ya algunas horas de cuando había iniciado aquella carrera que lo llevaría a una gran distancia, por fin al recodo de una hondonada un pequeño riachuelo con agua muy fresca cristalina, apenas una leve parada, enjuagar su rostro, beber unos cuantos sorbos, refrescar rápidamente su musculoso cuerpo, un salto y nuevamente a paso firme y constante inició su presurosa carrera, tenía bien claro en su mente que debía hacer. Estaba ya atardeciendo y después de muchas horas de aquella desesperada carrera, en medio de un claro de la montaña, diviso la primera choza, esta evidenciaba que su meta estaba cerca, pero no tan cerca, entre aquellas majestuosas montañas boscosas, aún era un buen recorrido, al cabo de un par de horas, logro llegar a la aldea que era su objetivo, a penas los primeros habitantes lo divisaron, dieron voces de aviso, rápidamente prácticamente todos los habitantes, en realidad no eran muchos ya se había reunido, esperando la llegada presurosa de aquel mensajero. Jadeante llega ante ellos, y la noticia que ya algunos esperaban, salió de su tremulante vos, finalmente fuimos atacados por la tribu invasora, al punto de mi partida, prácticamente más de la mitad de nosotros habíamos caído indermes ante aquel ataque repentino y atroz, inmediatamente que recibí la orden de venir a darles el aviso, salte todo obstáculo y emprendí esta carrera, solamente podía oír los gritos de hombres, mujeres niños y ancianos, que aún quedaban vivos, no voltio a ver pero como me fui alejando, esos gritos fueron disminuyente. Creo que toda la aldea fue arrasada, habíamos estado con mucho miedo durante mucho tiempo, sabiendo que tarde o temprano el ataque sería inminente, no hubo día, ni noche en que la zozobra no estuviera presente, ningún rostro evidenciaba tranquilidad, solo angustia e impotencia.

Es necesario que dejen todo, tomen solo lo indispensable y salgamos inmediatamente, aquella pequeña aldea también había estado viviendo en el miedo y la angustia, sabiendo que en algún momento recibirían esta noticia. Rápidamente todos tomaron solamente necesario, hombres, mujeres, niños, ancianos, tomaron aquel sendero que los llevaría a algún lugar desconocido, no sabían que les deparaban los días por venir.

un lugar para vivir en paz…

Lo único que deseaban en aquel momento era encontrar un nuevo lugar, una nueva tierra, donde poder vivir, trabajar la tierra y cosechar sus frutos, lo único que deseaban era un lugar para vivir en Paz.

Si esta pequeña historia te ha parecido muy familiar, tienes toda la razón, se ha repetido una y mil veces, claro, los escenarios han cambiado, las personas también, pero la historia se repite, desde que tengo memoria, han trascurrido guerra tras guerra, hasta se ha hecho guerra para llevar la paz, pero donde está, esta paz, ¿la hemos encontrado en alguien? en algún lugar, se puede ver tan claramente por doquier esta paz que hemos estado buscando. Más aún, en este momento ¿estás en paz? No estoy con esto diciendo que no tengamos momentos de paz, no, tampoco estoy diciendo que no hayan hombres o mujeres que sean portadores de Paz. Mi pregunta es. ¿Estás tú en paz?

A estas alturas del espacio tiempo, por utilizar esta expresión, creo que todos sabemos de alguna manera o lo sentimos o lo intuimos que Dios es Amor, todos los cursos para el despertar están basados en el Amor, UCDM, nos dice que si Dios es Amor, también es Felicidad, por ende donde hay Amor y Felicidad también hay Paz, la  pregunta aquí sería entonces porque en el mundo la paz no es realmente evidente, incluso nos puede pasar, por lo menos a mí me ha sucedido, que siento que estoy en Paz, pongo mi mente en oración, o elevo pensamientos Amorosos, pero que sucede, de pronto algo sale de ese entorno, una palabra, un suceso, no importa y por instantes siento que pierdo la Paz, sabes hermano, la Paz, es un estado permanente de Felicidad y Alegría, si aún hay instantes en que eso no es cierto, lo que sucede es que aún no hemos recordado plenamente quienes somos y ese estado aún no es permanente, si te sucede esto, no te preocupes, sábete ya en el camino de lograrlo, una vez que pusiste tu dosis de buena voluntad dice UCDM, ya no hay marcha atrás, el éxito está asegurado. Cristo está floreciendo en tu mente.

Que debo hacer si aún sigo buscando la paz, la Paz, no está en ninguna parte, la Paz que buscas  no está en Alguien, La Paz que buscas está dentro de Ti, Pero como la Busco, Sigue un Curso, no importa cuál sea, pero sigue uno, si no lo tienes sigue UCDM, aquí en la tercera dimensión todo se alcanza a base de procesos, pero una vez que suceda el primer milagro del que te has hecho consiente, vendrán más y más, bueno realmente solo es un milagro el que debe suceder, este es Saberte. Entonces sentirás en medio de la irreal tormenta la Paz, aunque sea por un instante, este será suficiente, ya no podrás sentirte separado, ya no podrás sentir un vacío en tu corazón o en tu mente.

Un CDM, nos insta a sentir el Amor de Dios dentro de nosotros mismos, una vez que los haces, nada del mundo te parecerá fuera del Amor, todo estará en Paz, porque tu estas en Paz.

Que maravilloso, este es nuestro momento, si muchos empezamos a concebir el mundo como en realidad ES. Pronto, el despertar Global sería inminente, únete a este pequeño gran esfuerzo.

 

Autor. Carlos   EFR, redactor de la gran familia de www.hermandadblanca.org

Basado en: UN CURSO DE MILAGROS.

Canalizado por: Helen Schucman

 

 

 

 

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