Nuevas enseñanzas- Maestro Saint Germain

Rosa (Editora)

maestro sant germain hermandadblancaorg

16 de abril

 

            Vamos a hablar un poco de la Nueva Era y de las enseñanzas de la Nueva Era.

            Como te dije ayer, el hombre en su mayoría ya es capaz de aceptar que todo está en él y ser responsable de sí mismo. Ya no es el niño que necesita que le enseñen, sino que es el hombre maduro que debe empezar a aprender de sí mismo.

            En esta era ya no vamos a hablar del sacrificio, del dolor, de la represión, de la renuncia. Ahora vamos a hablar del Amor, de la Luz, del Poder.

            Debéis comprender que todo está en vosotros pero que sois vosotros mismos quienes debéis desencadenar el proceso de creación interna.

            Es imposible querer crear externamente, sea lo que fuere que deseéis crear: salud, paz, dinero, etcétera. sin antes haber conseguido la creación interna. O sea, el proceso creador empieza en el interior del ser.

            Siendo consciente del Poder de Dios, el hombre debe poner en marcha ese poder creador en sí mismo. Debe crear en él paz, armonía, sosiego, gozo…Debe potenciar, a través de su amor, la Luz de Dios que está en él y recibir el conocimiento de la verdad desde su propio ser.

            Cuando el hombre haya sido capaz de crear en él la paz, la armonía, el gozo, sin importar qué circunstancias externas o internas imperen, cuando potencie conscientemente la Luz que está en su propio ser físico, y a través de ella llegue a poder recibir y entregar Amor Divino a todo lo creado, estará en condiciones de reconocer y aceptar plenamente a su Presencia Yo Soy, unirse a ella y, reconociéndola en sí mismo, podrá empezar a crear en lo externo.

            Éste es el proceso que debe seguir, y no el inverso.

            Gracias, por aceptar el servicio libremente.

            Os envuelvo a todos en mi paz y en la certeza divina que Yo Soy.

 

17 de abril

 

            Llénate de la paz que tú misma eres y del sosiego que está en ti, y escucha.

            La verdad de Dios es la verdad que cada hijo reconoce y acepta en él. La Energía de la Vida, Dios, es pura, perfecta, incolora. Posee en sí todas las infinitas posibilidades del Ser. Es creadora en sí misma y al crearse se expresa, y a través de su creación se realiza.

            Se expresa y se realiza como aquello que su creación, libremente, desea. Si un hijo de Dios escoge expresarlo como Luz, como Amor, como Poder, la Energía de la vida se expresará como Luz, como Amor, como Poder.

            Si por el contrario, el hijo de Dios desea expresarlo como odio, como dolor, como sombra, como limitación, así se expresará esta divina Energía como él. ¿Comprendes mis palabras? Permite que mi verdad penetre en ti, si lo deseas.

            Todo se realiza como el hijo de Dios desea, porque él es cocreador con el Padre y en él está la posibilidad de todo y en ese todo se halla la creación de su propia verdad.

            Escoge para ti, si lo deseas, la paz y el gozo. Y la paz y el gozo estará en ti, porque esa habrá sido tu voluntad.

            La responsabilidad del hijo de Dios es total. Acéptala en ti, aunque la rehúyas está en ti y sigues siendo responsable de ti misma. Ponte en manos de tu Presencia y acéptala en ti.

            “Abre tu corazón y tu mente a la Luz y al Amor que Yo Soy en ti y exprésame en la creación como tú desees.

            Desde el Amor y el Poder que Yo Soy, irradio el Amor y la Luz del Padre sobre todos sus hijos.”

 

 

23 de abril

 

El que emprende el camino de Dios entra en él a través de la paz y se mantiene en ella. Porque el camino está jalonado de paz y sólo a través de la paz, voluntariamente generada, puede el hombre avanzar por él.

El camino que conduce a la verdad del propio ser está sembrado con los dones de Dios. Está sembrado con el gozo, con el Amor, está iluminado con la Luz de Dios que todo lo clarifica, que ilumina y erradica todas las sombras y permite que el caminante vea claramente y reconozca su propia verdad.

El camino que conduce a Dios no está sembrado con el dolor, ni con el sacrificio, ni con la renuncia, porque conduce a la verdad y la verdad es que Dios es todo y está en todo lo creado, y el ser que libremente busca la verdad, reconoce la posibilidad de todo y escoge lo que desea.

Pero para llegar a esta realidad en la que puede ser dueño de su propia vida debe olvidar el temor, el miedo, la duda y aceptar que la Luz de la verdad de su propio ser le guía.

No hay más verdad que la propia verdad del hombre, la que él acepta y reconoce y, a través de esta aceptación y reconocimiento, realiza.

Llénate del gozo de esta verdad y reconoce en ti aquello que deseas y con la certeza de tu propio ser, realízalo.

Empieza a conocer en tu camino los dones del Padre, su Amor, su gozo, su Luz, su Poder. Acéptalos en ti, si ésa es tu voluntad, porque si es tu voluntad, es también su voluntad.

Acepta mi rayo de Amor, de fuerza y de Poder y a través de él recibe la energía que te enviamos para que la certeza de la verdad se genere en ti.

 

 

24 de abril

 

Llénate de paz y escucha, si lo deseas, mis palabras.

¿Te has preguntado alguna vez qué es la vida? Me respondes que la vida es Dios. Y yo te pregunto ¿y qué es Dios? Dios es la Energía de la vida, me respondes.

Bien, has cerrado un círculo, pero no has aclarado nada. No has penetrado en la esencia de la vida, ni en la esencia de Dios. Penetremos un poco más.

La vida es Energía y a esa Energía la llamamos Dios. Pero ¿qué es su propia esencia? No me refiero aquí a la comprobación científica de la energía, ni en su valoración cuántica; me refiero a su esencia íntima e indestructible. La Energía, que es la vida, que es Dios, está conformada en su esencia íntima por Luz, Amor y Poder.

La Luz, como sabemos, es conocimiento, sabiduría total e infinita.

El Amor es la capacidad de unión, la compenetración de todo, convirtiéndolo en uno.

El Poder es la posibilidad de todo, la posibilidad creadora e infinita de todo.

La esencia de la vida, la Energía, al individualizarse posee estos mismos atributos esenciales: Amor, Luz y Poder.

El Amor y la Luz los conocéis y los trabajáis. Pero ¿conocéis bien el Poder?

Normalmente reconocéis el Poder como ajeno a vosotros, como un atributo de Dios que no os atañe. Pues bien, a través de ese Poder, que no creéis que os atañe, estáis creando continuamente. Creáis en vuestra vida y en vuestro entorno, creáis en el planeta, creáis en el universo.

Tenéis que reconocer y aceptar que la esencia de la vida, la Energía vital, Dios, es vuestro propio ser y que sus atributos son vuestros atributos. Por eso su Poder es vuestro Poder. Creáis, sin saberlo, a través de vuestros pensamientos, de vuestros sentimientos, de vuestras palabras.

En su esencia íntima, la Energía es Luz, Amor y Poder, por eso sus hijos pueden, ya sea por ignorancia o por rebeldía, transformar, mediante el Poder, la Luz en sombra y el Amor en dolor.

Reconoce, si lo deseas, este Poder y empieza a crear en ti lo que anheles, a través de tu conciencia divina, la unión total con tu Presencia Yo Soy, Dios en ti, tú misma.

A través de mi Poder te envuelvo en mi Amor y en mi Luz.

Os bendigo a todos.

 

 

 

Del libro NUEVAS ENSEÑANZAS, Ed. ElSiguientepaso

 

Merry Human Life Society

 

 

 

1 comentario

  1. notificarme todo lo relacionado con el maestro saint germain, pues soy muy seguidor de sus enseñanzas
    muchas gracias por atender mi peticion
    mi mas respetuoso saludo

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