¿Qué son las ofrendas externas, internas y secretas?

Este es un tema muy importante en oriente pues en éste descansa la base de la práctica espiritual.

La ofrenda significa dar u ofrecer y esto es precisamente lo que la hace más importante sobre todo en estos tiempos en los que estamos más acostumbrados ó enfocados solamente a recibir y exigir.

La Ofrenda es una práctica que nos permite acumular una gran cantidad de mérito positivo, esto la hace de vital importancia para todos aquellos que no saben qué actividades realizar en el sendero del crecimiento espiritual sobre todo si están apuntando al fin último de la iluminación y la liberación del sufrimiento.

Para llegar a la iluminación o liberación de acuerdo a la tradición de oriente, se requiere de actualizar las dos acumulaciones, esto es, la de mérito y la de sabiduría.

En lo que se refiere a las ofrendas estas son de varios tipos o niveles: las externas, las internas y las secretas.

La ofrenda externa es la más común y consiste en desprendernos de algo material que sea de valor para nosotros (no de algo que no nos sirva) para obsequiarlo a otro que lo necesite o a aquél al que le pueda ser de utilidad.

En las ofrendas externas encontramos al donar alimento, vestido y hospedaje. En otro nivel  más importante se encuentra el regalar el Dharma o enseñanza espiritual.

Obsequiar la enseñanza espiritual es de gran importancia pues no funciona como el resto de las cosas que comúnmente damos que se consumen y listo, en este caso se trata de una instrucción que puede ayudar a otro u otros a ser mejores, a erradicar el sufrimiento de sus vidas,  así que ¿ qué existe más valioso o importante que todo aquello que nos ayude a dejar de sufrir y a obtener la felicidad genuina?…..

De igual manera el dharma puede florecer o dar resultado en cualquier momento cuando más se le necesita y ahí es dónde radica su gran valor.

Es importante notar que el dar ofrendas externas beneficia sobre todo a los que nos rodean, y aún más a  los que las realizamos pues en el fondo estamos trabajando con cualidades que propician nuestro desarrollo interno como son la generosidad, la atención plena, el esfuerzo gozoso y la sabiduría sobre todo cuando no esperamos obtener ninguna retribución adicional a cambio de  lo que damos.

En el caso de las ofrendas internas no se trata de ofrecer algo material, en realidad es ofrecer todo lo edificante  en nuestras vidas en forma de mérito a todos los seres que nos rodean  para que alcancen la meta última de la iluminación.

Las más elevadas de las ofrendas porque son las que impactan de forma  profunda nuestro crecimiento espiritual  es la secreta y la ulterior que tienen que ver con el comprender a la realidad como vacía de percepciones erróneas, con el surgimiento dependiente y la interdependencia que tienen que  ver con entender a todo lo que nos acontece tal cual es y no a través de nuestras proyecciones mentales egocentradas y materialistas.

De igual manera lo más importante independientemente del tipo de ofrenda que decidamos hacer ó lo que debe ser el punto central  es la acción de  dar por la simple razón de hacerlo, porque es lo más conveniente para nuestro crecimiento personal y el de los demás.

La recomendación como siempre es no dejar de programar en nuestra práctica diaria alguna ofrenda de cuerpo o física, de palabra dando enseñanza y de mente ofreciendo todo lo que hacemos, decimos y pensamos para el bienestar de todos aquellos que nos rodean…..que nuestra actividad sea algo que se convierta en un continuo ofrecimiento de amor y generosidad en todas sus dimensiones solo porque así es…..

AUTOR: Pilar Vázquez, colaborador de la gran familia de la Hermandad Blanca