Palabras del amado Maestro Jesús en Navidad
Mis amados
Les hablo ahora en la magnífica oportunidad de compartir nuevamente este pan de vida, simbolizado en la grandeza de sus seres, buscando el alimento espiritual para nutrir sus almas, no solamente en estas fechas en las cuales recuerdan Mi nacimiento en esta Tierra, sino en el diario hacer de sus diarias jornadas.
Es Mi gran privilegio poder estar ante ustedes, gracias a la radiación de la Luz, la cual permite descargar desde los éteres de octavas Ascendidas estas Mis palabras, revestidas con el absoluto récor de Mi Victoriosa Ascensión, las que llevan Todas las Mayores Bendiciones a quienes las lean, a quienes las escuchen.
No puedo más que compartir aquellas sublimes instancias en las cuales la Propia Bendición del Amado señor Mireya, se descargaba ante las gentes necesitadas y aún en los presentes tiempos la exaltada fuerza magnética de Su Radiante Luz Solar, atrayendo Su Impronta para “CRISTIFICAR EL ALMA DEL MUNDO ¡Sí, mis Amados, es esta una época sagrada! En cuanto a las más grandes potencialidades Divinas, las cuales tienen al alcance de sus manos, por haber una enorme concentración de energías decididamente encauzadas a establecer el Orden Divino, la UNIDAD global y el AMOR Crístico en esta Tierra y así realizar el edicto de todos los tiempos.
Maestro ascendido Jesús
¡EL CUMPLIMIENTO DEL PLAN DIVINO PARA ESTA TIERRA Y TODA VIDA QUE EVOLUCIONA EN ELLA!
Todos ustedes comprenderán la gran tarea y responsabilidad que les cabe cumplir tanto individualmente como en forma colectiva, más aun aquellos que despiertos en la conciencia de la Luz, de alguna manera “entrevén” hacia dónde conducen los tiempos de cambios profundos en este presente, acelerándose por una parte todo, absolutamente todo, el errado uso de la energía del Padre-Madre Creador, para ser resucitada y redimida y por otro lado el no dejar pasar, en el descuido del ajetreo diario, la manera de cooperar con el Servicio hacia todos.
Nada deben temer, contemplen lo que contemplen, sólo Bendecir el Bien, vivirlo y exaltarlo a cada paso ¡Caminen resueltamente, como si fueran subiendo una gran escalera hacia los confines Ascendidos, las octavas inmortales de Luz, amor y perfección.
Nosotros, la Jerarquía de la Gran Hermandad Blanca de los planos adyacentes, Sus hermanos Mayores, acompañamos, vigilamos y tutelamos cada acierto, cada fracaso, cada alegría, cada dolor, que sortean en sus vidas diarias, como una manera de resguardarles y permitir ¡QUÉ SE CUMPLA EL DIVINO SERVICIO DE LLEVAR LUZ HACIA EL MUNDO! ¡Y ESA ES LA PRIORIDAD A ESTABLECER EN LAS CONCIENCIAS Y CORAZONES DEL MUNDO!
Mis Amados, alta les dejo esta tarea, recordándoles a la vez que cada vez que se eleven, se inspiren, se superen, obtengan todo tipo de triunfos y bendiciones. Esa energía se difunde por el mundo, como también lo contario, recordándoles que no es simbólico sino tan real, como la Luz solar dándoles vida cada día.
¡ES VERDAD, ES VERDAD, LO QUE LE HACES A LOS DEMÁS, A TI MISMO, A TODOS SE LO HACES!
¡LA ENERGÍA NO CONOCE OTRO CAUCE QUE INMANTAR A TODOS POR IGUAL!
¡EL PADRE-MADRE NO CONCEDE MÁS PRIVILEGOS, SINO AL QUE SE ESFUERZA POR ALCANZARLOS!
¡TODA VIDA ESTÁ ENLAZADA POR EL MISMO CORAZÓN DEL CREADOR¡
¡TODO RETORNARÁ EN PLENITUD A SU DIVINA FUENTE!
Cumpla, pues, cada Uno lo mejor que pueda hacer, dejando atrás todo lo que les pese y entorpezca su andar.
¡CON EL AMOR, LA BENDICIÓN DEL CRISTO VIVO Y LA SANTIFICACIÓN DE MI SER ENTERO CONSAGRADO HACIA TODOS USTEDES!
LES AMA,
