Terapias Alternativas: combatiendo el estrés crónico
Hoy día, existen personas que sufren de una variedad de enfermedades, tanto mentales como físicas. Una de estas enfermedades, que se ha destacado en la modernidad, es el estrés crónico. Los tiempos han cambiado y con ello los paradigmas de la salud, por esto, la sociedad ha empezado a descubrir y a aplicar las llamadas terapias alternativas, de las que hablaremos a continuación, para combatir esta enfermedad de moda.
¿Que es el estrés crónico?
Antes que nada, es necesario definir estrés crónico. El estrés crónico se puede explicar como una molestia que surge a raíz de situaciones que nos perturban, en un espacio de tiempo. Este malestar genera efectos y alteraciones de carácter psicológico y físico, que se relacionan con las emociones propias y la vida misma.
Todo lo anterior, está influenciado indudablemente, con nuestro bienestar, pues el estrés amenaza nuestra resistencia a condiciones o adversidades a las que nos exponemos. No solo los adultos son los afectados, sino los niños y adolescentes también están siendo expuestos a esta enfermedad, debido a lo que exige la vida cotidiana actualmente.
La solucion al estrés
Con relación a esto, surgen progresivamente las terapias alternativas que son precisamente terapias aplicadas para combatir esas molestias físicas y psicológicas, o síntomas causados por enfermedades. Algunos síntomas de estas enfermedades pueden ser: dolores de cabeza constantes, contracturas musculares, fatiga, cansancio excesivo, desgaste, debilidad física, o hasta depresión; siendo esta última el efecto máximo del estrés crónico. Dichas terapias alternativas se han desarrollado en muchos países de todo el mundo, y se relacionan con varios conceptos tales como el espiritualismo y la sanación, que a su vez son conceptos que mueven culturas enteras.
En esta ocasión conoceremos un grupo de terapias alternativas, que existen dentro de una gran variedad y que se aplican en todo el mundo.
Acupuntura
La primera terapia alternativa es una tradición china que se conoce como la acupuntura. Esta consiste en insertar agujas especiales en puntos clave de la piel de la persona, con el fin de curar el desequilibrio energético del organismo. De esta manera se estimula el cuerpo y los dolores van desapareciendo.
Aromaterapia
Otra de las terapias es la aromaterapia, cuyo uso viene de siglos atrás, cuando diferentes culturas manipulaban hierbas para fines curativos u otros. Lo anterior es debido a que existe una conexión entre nuestro estado de ánimo y lo que podemos oler. Esta consiste precisamente en la extracción, aplicación y/o inhalación de aceites esenciales de plantas, que contienen en el interior de sus tallos, flores, hojas, frutos y raíces; químicos que estimulan nuestro organismo. Así como la acupuntura, la aromaterapia ayuda a combatir el estrés y lo que este contrae. Es decir, síntomas como el insomnio, el dolor, la ansiedad y la inflamación. Esta terapia influye bastante en las defensas corporales y en la rehabilitación de un paciente enfermo.
Bioenergética
La tercera terapia de la que hablamos hoy es la bioenergética, un concepto que se fundamenta en la mente y el cuerpo, puesto lo que sucede en la mente se refleja en nuestro cuerpo. Es por esto que la bioenergética consiste en liberar la tensión muscular por medio de diferentes ejercicios. De esta manera se recupera la energía vital que ha sido bloqueada por un estrés crónico, causado a su vez por algún problema en nuestras vidas. Al fluir la energía de nuestro cuerpo, nos conectamos directamente con la conciencia y el corazón, permitiendo que entendamos y aceptemos lo que nos aflige y nos enferma. Un paciente que acude a la bioenergética logra perdonar sentimientos reprimidos que han ido moldeando su cuerpo y su perspectiva, y resultado en estrés. Con esta terapia alternativa, está comprobado que se alivia el dolor, la depresión y se regenera nuestra confianza y amor propio, entre nuestro cuerpo y nuestra mente.
Musicoterapia
Por último tenemos la musicoterapia. Teniendo en cuenta que, así como en la aromaterapia el olfato es clave, esta vez, lo que podemos oír es fundamental para conectarse y estimular nuestro estado de ánimo. La musicoterapia es un medio curativo que consiste en aplicar música que manipula nuestros sentidos y alivia la tensión. De esta forma se logra la liberación del estrés acumulado, y le brinda armonía a nuestra mente y cuerpo.
La musicoterapia se aplica de dos maneras. La primera es la activa, que consiste en cantar, tocar un instrumento, entre otros. La segunda forma de emplearla es de manera receptiva, es decir, relajándose a través de la música y los sonidos presentes.
Desde hace siglos atrás, se ha visto que la música se ha destacado y considerado positiva para la memoria, la imaginación, la coordinación, el equilibrio y la forma de expresarnos. Esta última habilidad es fundamental para liberar aquellos sentimientos y conflictos que nos causan el estrés crónico.
Es importante aclarar, que estas son solo algunas terapias alternativas que existen en el mundo. Hay una cantidad enorme de técnicas aplicadas por el ser humano hoy, que están siendo cada vez más aprobadas por los médicos tradicionales de hospitales. Métodos como la reflexología, el reiki, la homeopatía, la meditación, la visualización, el yoga, entre muchos más; van en pro del bienestar de los seres humanos.
Debemos abrir nuestra mente a todo lo que nos ofrece la vida, la naturaleza y la ciencia; con el fin de cuidar nuestro cuerpo, que al fin y al cabo es lo que protege y carga nuestra alma. Es necesario defenderlo de las enfermedades modernas como el estrés crónico, que preocupa y afecta hasta a los más jóvenes; para lograr así una mente sana y una vida rica en armonía y equilibrio con nuestro cuerpo.
AUTORA: Daniela Navarro, redactora de la gran familia de hermandadblanca.org