Terror y Ansiedad: Desconfianza en Sí y la Vida.

Roberto García

Terror y Ansiedad: Desconfianza en Sí y la Vida.

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Ansiedad: Un Loop de Mapas Neuronales

La ansiedad es un loop de circuitos y mapas neuronales que la persona ha fortalecido poderosamente al activar secuencias biopsiconarrativas concomitantemente, memorizado la activación de este/estos mapa(s) neuronal(es) y automatizado por repetición sistemática frente a cada estímulo, externo o interno, que gatille cualquier tipo asociación con dicho mapa, activando una sensación tácita emocional y contenidos mentales asociados a esta sensación, aumentando su poder con cada activación exponencialmente, y todas sus consecuencias. En quién ya se encuentra inmerso en pánico, ansiedad, o ataques de angustia constantes, este mapa es automático hoy, pero implicó un arduo entrenamiento voluntario en serie por parte del ser que exterioriza hoy su aparición en su vida de modo sintomático: No tiene  síntomas, los hizo y ahora ellos lo hacen a él. 

Miedo: Sensación de angustia provocada por la presencia de un peligro real o imaginario y de desconfianza que impulsa a creer que ocurrirá un hecho negativo, contrario a lo que se desea.

Miedo: Sensación de angustia provocada por la presencia de un peligro real o imaginario y de desconfianza que impulsa a creer que ocurrirá un hecho negativo, contrario a lo que se desea.

La ansiedad y el miedo, consisten un loop de procesos integrales intrincados (emocionales, biológicos, conductuales, espirituales, lingüísticos) que el ser realiza una y otra vez produciendo el malestar llamado ansiedad, cual se amplifica gradualmente hasta ser cada vez más desmodulado acorde a la realidad contextual en sí.

En definitiva este proceso de repeticiones, es un modo de torturarse adscribiendo valencias emocionales y connotaciones narrativas exageradas a elementos sencillos (de sí y el mundo) una y otra vez. Elucubró exageraciones para sostener la trama de víctima hasta crear frente a la mera aparición de elementos asociados a ciertos fenómenos memorizados como terribles fantasiosa-mente, un arousal emocional altamente poderoso asociado a imágenes, palabras, ideas, conceptos y escenarios caóticos y catastróficos, así también a una experiencia virtual de horror, descontrol, miedo, pánico y una ansiedad frente a la reexperimentación potencial de los síntomas. Generando gradualmente una sensación y significados asociados cada vez más y más cercanos a la idea de «mundo peligroso» y de un sí-mismo como un «personaje ineficaz» para vivirlo y gestionarlo con ingenio, gracia, valentía, ahínco y dicha infinita.

Trama Narrativa: Un hackeo Eficaz

Por otro lado, el narrarse un mundo con estas características, conlleva a «hackear» a su propio cerebro para reaccionar como si esto fuera así de hecho, como si el horror fuese real, es un modo de añadir características pusilánimes de víctima al personaje que encarna frente al mundo. De vivir en su mente reptiliana, reactivo, visceral, fuera de sus centros elevados de consciencia. No puede amar, realizarse, ni SER.

El sujeto en pánico recidivante y continuo es un ser que autosuprime su responsabilidad personal en un mundo fantaseado como peligroso/horroroso que «mágicamente» anula su empoderamiento personal, le permite la procastinación de su propio proceso evolutivo, para volverse una «víctima pasiva del medio». Cambia insistentemente su significar al mundo y al unísono también su sensación tácita, visceral, mental, subjetiva de este vivir en este escenario creado por sí mismo. «Si el mundo es amenazante y cruel, yo he de ser una víctima y tener mucho miedo.»

Sin importar la temática que le despierte ansiedad, puede obedecer a asuntos del árbol familiar y las tendencias predominantes desde cómo se vive/etiqueta la vida en él, o bien a vivencias emocionalmente fuertes, procesadas precariamente en su momento, que le dejaron al ser esencialmente «desconfiado» respecto del proceso de la vida, de sí mismo y por consiguiente de su capacidad de gestionar los escenarios, conocidos o fortuitos en paz y gracia, sin necesidad de elucubraciones mentales excesivas que lo volvieron paranoide. 

Cada ser en este estado debe preguntarse con honestidad cuál es el uso en sí y su entorno, es decir la utilidad de toda esta tortura mental, y procesos mentales invasivos que le alejan cada vez más de su balance y equilibrio.

Este modo de pánico, terror y ansiedad, alejan al ser de su conexión con el presente, por ende anulan su capacidad de amar, pues se termina viviendo dentro de la caja mental hasta que el entorno es reducido a una serie de parámetros mentales tóxicos que dominan el precepto del mundo. El cerebro no tiene como saber que esto es una simulación y un loop tóxico, lo vive y simula virtualmente como algo real, tanto que se entra en pánico fácilmente frente a los delirios de elección de cada ser.

Todo es un Decir

Al existir un «exceso» de mente sobre los procesos, implícitamente le decimos a nuestro interior que no se confía en uno ni en la vida suficientemente como para aceptar, agradecer, y disfrutar de ese cierto grado de variabilidad natural en ella, y de nuestro poder para gestionar «In Situ» las situaciones que se puedan suscitar.

La vida comienza en dónde termina el miedo. Osho

La vida comienza en dónde termina el miedo» Osho

El plantearse escenarios catastróficos una y otra vez, de autoengañarse respecto de que la vida es un riesgo, así sometiendo al yo interior a experimentar este «cine del terror» cada día, lo único que hacemos es amargarnos y memorizar un loop de circuitos cerebrales que causan alto malestar, cual gradualmente se volverá peor y peor, tanto que amargará al barrio y los seres queridos alrededor.

La pregunta es siempre la misma para comenzar a sanar: «¿para qué me sirve, en mi vida, en mi cuento que creo que soy este síntoma que hago?”…. Tal vez para reforzar mi teoría egóica de mí (víctima, verdugo, juez, superior, inferior, etc.) y para controlar el juego de mis seres cercanos, pues alguien que vive presa de este dolor auto infligido, aun cuando se plantee así como un enfermo a quién cuidar, secretamente se toma pequeñas dosis de cicuta para mostrar síntomas que producen conductas y ofrendas familiares que satisfacen sus infantiles caprichos mediante la preocupación de todos.

Busca el control a toda costa quién no cree en sí ni en la vida, por eso manipula secretamente para obtener lo que ilusoria-mente cree que le falta. No es coincidencia que frente a este auto sabotaje, están todos alrededor del actor principal, desviviéndose por palear su sintomatología, cuál terminan creyendo que es mágica, pero en realidad es una situación de laboratorio que ha producido el mismo actor, consciente o inconscientemente.

La paz de SER quién se ES

Quién confía en sí, es alguien que se ha cultivado, conoce su capacidad de gestionar su rol en la vida, conoce su norte, por ende se conoce a sí, lo cual implica un proceso de sanación interior, se ama… ama la vida, acepta la grandeza sinfónica de cada evento de ella, por esto abraza cada momento por momento con gracia y paz.

"Habrá cosas que atrapen tus sentidos, pero sigue las que atrapen tu corazón". Proverbio Hopi

«Habrá cosas que atrapen tus sentidos, pero sigue las que atrapen tu corazón». Proverbio Hopi

El valiente ama la variabilidad y no teme a lo nuevo, por esto la vida le muestra naturalmente el orden oculto detrás de ella cuando es necesario, y cuando no, baila la música para encontrar otros secretos del valle del vivir. No controla, ni necesita controlar a sus seres por medio infligirse daño y auto-tortura, porque se ama, y sí se ama es capaz de ver al otro como legítimo, para así recién poderle amar como es.

El ser en paz, jamás produce cambios anti naturales en el entorno, aun cuando la vida le da el poder para ejercer cambios enormes, porque renunció a la vanidad egóica del cambio manipulativo. Este ser siempre respira profundo y ama el sonido de su alma en cada escenario, sabe a ciencia cierta que cada uno le ofrece un nuevo espejo para seguir creciendo, por esto agradece las diferencias, no cambia con chantajes de auto-daño ni lo pretende, sino que invita al cambio con la conquista irresistible del Amor Ágape. Se ama, ama, vive y juega con la alquimia del cosmos como un niño que pinta sin importar que pinta, sólo ama la conjunción de colores, la disfruta en cada trazo, tanto como en sí mismo, sabe que la obra por sí misma dice todo sobre sí.

Está bien tener miedo, pero no que este te tenga a ti.

Está bien tener miedo, pero no que este te tenga a ti.

Ser Agua: Reinvención Constante

Quién ha encontrado su balance danza con gracia entre cada muro para sopesar sus dificultades, hasta superarse a sí mismo. La vida no lo ataca como un Tsunami, sino que abre escenarios y secretos ante él para nadar graciosamente en ella. Sabe que cada ser es su propia obra, no necesita definirse a sí mismo en palabras, pues su puesta en escena está hecha de todo lo que es. Está en paz, confía en sí y la vida, juega con los elementos, la vida le revela secretos que para otros son incomprensibles, porque no osa perfección, osa purificación de quién es realmente momento por momento, paso a paso.

No sólo es el arquero obsesionado con la precisión, sino que se convierte en la flecha misma en sí que va dónde va siempre y llega donde debe llegar. Es la flecha que no viaja sin acariciar el viento, no vuela sin sentir la brisa silbando en sus plumas. Es un viajero en paz sin miedo al cambio, no se aferra a pensamientos forma, ni a hitos de perfección, vive en sí y en todo. Confía, se prepara disfrutando cada momento, por eso viaja sereno, dichoso, en balance. No hay miedo, ansiedad ni pánico, sabe que ha sido consecuente con su voz interior, siempre.

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Infinito Amar,

Roberto García Fuentealba

2 comentarios

  1. Gracias por su exposición. He caído, sin saberlo, en la teoría egoica de victima, verdugo, Juez. Amargado y Amargando. Tratare de Ser Agua para reinventarme. Paz y Amor.

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