Cambiemos el dinero, cambiemos el mundo
Una sencilla reforma del modo en que se crea el dinero pondría fin a la crisis de deuda, reduciría la pobreza y fortalecería la economía, según los promotores de la campaña desarrollada por Positive Money en el Reino Unido.
Positive Money, una asociación sin ánimo de lucro dedicada a la investigación y el activismo, cree haber identificado el problema principal de la actual crisis económica, así como su resolución. La cuestión, dice el grupo, es la forma en que se crea el dinero.
La ley británica de regulación de la banca de 1844 prohíbe a cualquier persona que no sea el Banco de Inglaterra imprimir y emitir billetes en Inglaterra y Gales. Sin embargo, tras las sucesivas liberalizaciones del mercado, el avance de las tecnologías informáticas y la obsolecencia de esta ley, se ha hecho posible que los bancos puedan crear dinero digital – esto es, meras cifras que aparecen en una cuenta – en forma de préstamos, descubiertos y otras modalidades de crédito.
Según Positive Money, al crear un préstamo digital, el banco está creando al mismo tiempo un depósito en la cuenta de quien recibe el dinero, lo cual quiere decir que se está creando dinero que antes no existía.
Josh Ryan-Collins, investigador jefe de la New Economics Foundation (NEF), afirma que es un verdadero mito que los bancos sean meros intermediarios: “En el Reino Unido no hay ninguna ratio obligatoria que los bancos tengan que cumplir entre los depósitos que guardan para otros y sus reservas de dinero”, de manera que los bancos no necesitan el dinero de los ahorradores para poder prestárselo a quienes lo necesitan.
Según Positive Money, de todo el dinero que existe en el Reino Unido, el 97% es digital, y sólo el 3% existe en metálico.
Fundada en 2010, la asociación Positive Money está abogando por que el derecho a “imprimir” dinero digital esté exclusivamente en manos del Banco de Inglaterra. Para ello, Positive Money ha redactado un proyecto de ley que, en su opinión, “es irrebatible y está sólidamente fundamentado” y que, si se pone en práctica, garantizaría que el sistema bancario redundara en beneficio de la sociedad.
Según este proyecto de ley, existiría un organismo independiente y transparente como el Comité de Política Monetaria que decidiría cuánto dinero nuevo se crea, mientras que el parlamento sería quien decidiera cómo se gasta.
En la conferencia organizada por Positive Money y celebrada el pasado 29 de octubre en Londres, el fundador de esta agrupación, Ben Dyson, sugirió que dos de las formas a las que podría destinarse la creación del dinero nuevo serían la eliminación del IVA y el aumento del umbral del impuesto sobre la renta – medidas que él cree que beneficiarían a las empresas y las personas con menores ingresos. “Se trata de estimular la economía desde abajo”, dijo.
Asimismo, Positive Money indica que los bancos deben separar las cuentas corrientes, en las que los depósitos estarían a salvo, de las cuentas de inversión, en las que los clientes deben entender que hay un riesgo. Además, los bancos también deben decirle a la gente cómo van a utilizar su dinero, afirma Positive Money.
Durante dicha conferencia en Londres, el público asistente pudo escuchar a un buen número de economistas, antiguos corredores de bolsa, parlamentarios, activistas y empresarios que analizaron las distintas propuestas.
Uno de los ponentes en dicha conferencia fue Steve Baker, miembro del Parlamento Británico, quien indicó que los bancos controlan el dinero “creándo el crédito de la nada”, y añadió que es necesario “un cambio de paradigma en la economía”. Asimismo, elogió las propuestas de Positive Money, indicando que trascienden a las preferencias políticas que cada uno pueda tener. “Soy optimista y creo que las cosas van en esa dirección”, dijo.
Por su parte, Ben Dyson indicó que, en su opinión, el señor Baker es uno de los pocos parlamentarios del Reino Unido que entiende cómo se crea realmente el dinero. “Las autoridades, los parlamentarios, los periodistas, el público en general y los contribuyentes no entienden este proceso”, dijo. “Pero la realidad es que tenemos un sistema monetario totalmente privatizado”.
Dyson afirmó además que lo que él considera los “préstamos productivos” – esto es, dinero prestado a empresas que producen bienes, prestan servicios y crean puestos de trabajo – sólo representan el ocho por ciento de los préstamos concedidos por los bancos, mientras que el restante 92% se destina a la especulación financiera e inmobiliaria.
Al dirigir este dinero nuevo a la economía real y productiva, en lugar de a los bancos que lo prestan en forma de deuda, se reducirían los niveles de pobreza, afirmó Dyson, al tiempo que también se reduciría el endeudamiento, redundando en una mayor igualdad dado que los más pobres no tendrían que pagar tanto dinero a los más ricos en forma de intereses.
Otro de los parlamentarios británicos que fueron ponentes de la conferencia, Michael Meacher, afirmó que “el control de la oferta de dinero debería volver a estar en manos exclusivamente de las instituciones públicas” y añadió que este será “el tema más importante a tener en cuenta en las próximas elecciones.”
El señor Meacher, que es miembro del Parlamento británico por el Partido Laborista, se mostró totalmente de acuerdo con Steve Baker, también parlamentario pero del Partido Conservador, a la hora de expresar su optimismo por la labor de Positive Money a la hora de “dar a conocer algo de enorme importancia para este país”.
Después de la extensa labor de investigación realizada, Positive Money se está concentrando en su labor de sensibilización y para ello ofrece en su web una amplia gama de videos breves y fáciles de entender en los que detalla cómo funciona el sistema bancario, al tiempo que explica las reformas que recomienda implantar. La organización tiene cada vez un mayor número de seguidores online al tiempo que está llevando a cabo reuniones informales por todo el país, de las cuales ya ha celebrado más de 30 hasta la fecha.
Ver el artículo en inglés:
Traducción: Javier Gil
Foto © Positive Money – Algunos de los integrantes de Positive Money Ben Dyson, Andrew Jackon y Mira Tekelova