Creación Benevolente – Introducción – Kryon
Saludos, queridos, Yo Soy Kryon del Servicio Magnético.
Y saludos para quienes vienen por primera vez, porque tienen ante ustedes un enigma. El hombre de la silla les ha hablado por más de una hora. Se sienta allí, y es su voz otra vez; todo lo que ustedes han aprendido en su vida sobre la realidad de qué es qué y de cómo funciona, les dice que es el mismo sujeto en una silla y es él hablando otra vez. Tantas veces hemos hablado de esto; es lo mismo para todos.
Existe un puente de creencia que ustedes cruzan cuando se sientan en un lugar espiritual para un culto. En este momento estamos en un centro espiritual; yo sé quién soy, sé quién está aquí, sé quién está escuchando, porque estoy en un lugar dimensional que tiene una realidad que promueve eso. Es muy, muy diferente de la de ustedes en este momento. Entonces, lo que hemos hecho en el pasado es pedirles que salgan de esta caja, una caja en la que dicen estar porque lo necesitan. Necesitan estar en ella por su supervivencia mental, no pueden permitirse entrar en otro territorio de creencia, y algunos dicen que es porque allí hay demasiadas cosas. Les pregunto: ¿Acaso eso les impide meditar o hablar a Dios de alguna manera? Sea lo que sea que Dios significa para ustedes, cuando hablan a Dios ¿tienen que trazar una raya de lógica, sentarse y jadear un rato y cambiar energías? La respuesta es no. Porque está en el interior y es intuitivo, allí mismo, con su mano extendida, pidiéndoles que sean parte de todo. Quiero que crucen esa barrera y se acostumbren porque, eventualmente, querido ser humano, eventualmente, la naturaleza humana lo requerirá.
Comenzarán a vivir de una manera distinta, lo que llamarían «en otra dimensión», que es incorrecto; es sencillamente vivir en más dimensiones que las que tienen. Tenemos otro nombre para eso: crecer. La consciencia humana se correlaciona exactamente con la percepción dimensional. De niño sólo estabas consciente de tu supervivencia; cuando estabas con otros niños, ya sea en el patio de juegos, en la escuela o en la calle, actuabas como niño, te protegías, te centrabas en ti, sabías que había matones, todas esas cosas; eso era sobrevivir en el nivel más básico. Cuando creciste, ¡saliste de todo eso! Los otros niños también, ya jóvenes adultos. Lo hemos dicho tantas veces: actuabas diferente, incluso con los mismos individuos. Ahora se puede decir que ya has crecido.
Incluso como joven adolescente, empezaste a darte cuenta de que tirar piedras, insultar, no te llevaba a donde necesitabas. La presión de los pares, todas esas cosas, las viviste y las superaste hasta ser adulto; ahora se miran unos a otros de forma totalmente diferente; disfrutan de la compañía del otro, la invitan, salen juntos, disfrutan juntos de las cosas, hay camaradería; esto es otra dimensión de creencia entre el niño y el adulto. Eso es lo que pasa con la humanidad. Demasiado sencillo, ya sé.
¿Cuántas veces debo decirles que lo que ven en las noticias y lo que pasa en el planeta se lo dije ya en 2011? Se lo recordé en 2012, y en 2013 les dije: ¡Aquí viene! Lo que hay es algunos todavía en el patio de juegos, nunca madurarán, siempre insultarán y tirarán piedras porque con eso conseguían lo que querían; todo lo que existió en la historia antes de 2012. Y está cambiando.
Cambiará lentamente a medida que la civilización crece, como lo hiciste cuando eras niño. Sabes de qué hablo: cada año volvías a la escuela preguntándote si el matón habría cambiado. Pronto te dabas cuenta de que no. Y tú ibas por tu camino y él por el suyo. Después de 25 años descubres que, con lo que hace, sigue siendo un matón. Su elección es ir en la dirección que le daba lo que necesitaba, y todavía está en eso.
Si captas la metáfora, ves que no hay nada malo en lo que sucede en este planeta en este momento, porque la luz empieza a sacar afuera la oscuridad, si entiendes lo que digo. Y a través de todo esto, la invitación para la humanidad es a crecer. Ahora bien; los primeros en crecer son las almas antiguas, porque son los que más experiencia tienen en el planeta. Te pregunto otra vez: ¿Qué estás haciendo aquí? Es un domingo hermoso, una tarde de buen clima, podrías estar haciendo tantas otras cosas; en cambio, decidiste sentarte en un salón a oscuras a escuchar a una cabeza parlante en una silla (se ríe). ¿Qué estás haciendo? Te diré qué haces. Algo en tu interior está golpeando la puerta y diciendo: «Es por esto que estás vivo.» Es el tiempo de tu vida, querido, no es un accidente, alma antigua. El género que tienes no es un accidente; los cambios que ocurren en tu vida, incluso mientras yo estoy en la silla, no son accidentes.
Toda la historia resonó con tus vidas, y aquí estás hoy, en un mundo lo bastante tranquilo para que salgas del modo de supervivencia y puedas empezar a marcar las diferencias. Tienes los instrumentos y la experiencia. Puedes generar compasión fácilmente porque sabes qué es. Puedes mirar a quienes no comprenden y tener compasión, y ellos verán en ti una madurez atractiva. Van a querer estar contigo, porque tienes respuestas para la vida. Dios interior; benevolencia y belleza.
Este planeta no es un accidente. Esta noche te daré algunas cosas en qué pensar con respecto al planeta Tierra. Lo llamaré: la Benevolencia del Universo para Ti. También puedo llamarlo de acuerdo a donde estoy: la Gran Apuesta (se ríe).
Queridos, es una energía apropiada que ustedes estén aquí. He estado hablando unos pocos minutos, amo el hecho de poder estar con ustedes. El Merkabah de cada uno es una energía multidimensional que no pueden ver, pero saben que está, es su antena de sensibilidad. Es la culminación de un campo multidimensional alrededor de su ADN, que contiene su registro akáshico y mucho más, el verdadero núcleo del Dios interior. Lo percibo, lo siento, veo el amor y la compasión, la dedicación; veo la frustración, veo quiénes son. Escucha, querido: ¿quieres la sanación que viniste a buscar? ¿Es por eso que estás en esa silla? Yo sé quién eres. ¿Crees que tal vez si vienes y te sientas aquí tienen más posibilidad de ser sanado? ¿Eso pensaste, y por eso pasaste por la puerta? Bien, déjame decirte algo: ¡Tenías razón! (se ríe) ¡Estabas en lo correcto!
Pero con sólo sentarte allí y escuchar la energía, no vas a cambiar. Tendrás que pasar por esta puerta de creer y saber que todo lo que quieres ya está allí, dentro de ti, esperando a que tú lo afirmes para hacerse; tú sabes que eres tú, ¡tú lo mereces! Pero te conozco: sigues esperando que suceda de afuera para adentro; no va a funcionar así; es de adentro para afuera. ¿Cuánta luz llevas? Me dirás: «No mucha.» Y diré: ése es el problema. No sabes lo que yo veo. ¡Quítate las restricciones; sal de la caja y brilla; sal de este lugar sanado, querido!
¿Para qué viniste? Antes de cerrar quiero darles información. La información es que cada uno de ustedes, incluso los que vinieron como acompañantes, es un alma antigua. ¡Si no, no hubieran venido! Algunos incluso ahora se están preguntando si esto es real o sólo el hombre en la silla, y les digo: no habrá prueba, a menos que se vuelvan un poquito multidimensionales. Si lo hacen, tal vez verán la verdad, sentirán a su Innato en su interior y sabrán que esto es asunto real. Y en este asunto real encontrarán sólo amor, compasión, aprecio, porque eso es Dios dentro de ustedes. Nunca un juicio, nunca frustración ni drama ni enojo. Siempre una energía amorosa que los mira diciendo: «¡Buen trabajo! Ahora hagamos algo más, incluso más grande!» (se ríe)
Y así es.
Kryon
Desgrabación y traducción: M. Cristina Cáffaro
Fuente: www.traduccionesparaelcamino.blogspot.com.ar
Canalización de Kryon por Lee Carrroll