Despertar cuántico ~ Cambios
Septiembre 2014
Yo me muevo y cambio a medida que soplan los vientos a través de mí y hacia mí. Me muevo con cada nacimiento. Me muevo con cada muerte. Cambio cuando los Cielos expresan una emoción y se designan a sí mismos.
Mi temperatura cambia con mis emociones, mi latido del corazón cambia con cada pensamiento. Yo soy el cambio de temporada de Dios. A medida que las moléculas a nivel cuántico reescriben las reglas, la vida crece alas donde antes no había ninguna a fin de volar a nuevas alturas.
Los objetos aparecen y desaparecen del amanecer al anochecer, confundiendo el plano de la mente. El confort en lo que era familiar ya no encaja ni alivia al ser. El fluir libre sin forma o destinación es un maravilloso aspecto de volverse un Dios enropado.
El caer libremente a cualquier y toda posibilidad no es para los débiles de mente. Las posibilidades se rearreglan a sí mismas en nanosegundos a la vez, cambiando bases y resultados simultáneamente. Lo que pasa a través del agujero espacio-temporal personal está todavía por verse, pero es muy esperado.
Perdiendo el pasado y desconectándose del ahora ofrece oportunidades que necesitan ser abrazadas a fin de que se emita un decreto. La nueva era, la vieja era, todas las eras se vuelven innecesarias a medida que la humanidad hace un giro en U/ se retracta para reconectarse. Las líneas entre los humanos se sienten frágiles y tirantes como un cordón umbilical que necesita ser cortado tarde en el parto. El verse a sí mismos en otros se ha vuelto doloroso y la mayoría evita verse a los ojos para no ver. Mientras la humanidad sopla y resuella derrumbando la ilusión, la unidad aparenta ser minúscula.
El tiempo y el clima se reescriben a sí mismos de conformidad con estas nuevas leyes de creación. Cada puerta los lleva por otra carretera del yo. Las partes fracturadas de la evolución humana buscan ahora unirse con sus contrapartes. Ustedes están tan ocupados recogiendo partes de su yo que no ven lo que le está sucediendo a todos los que viven en su calle o su planeta.
La humanidad ha pedido más a todo nivel y así será. Cada persona es escoltada a todas las faces de su crepúsculo y su átomo. El patrón original tiene ahora un encaje rosado de posibilidades. ¿Quién soy yo? es el canto del ser a medida que cantamos un nuevo tono. Es necesario flotar libremente fuera del planeta para volverse su verdadera Presencia, si desean andar por las estrellas. Las realidades se ven retadas haciendo un combate de cuerpo a cuerpo, dejando un rastro de papel y guerra. El tiempo pasa apresuradamente sin siquiera una ola, mientras se personalizan las opciones y se acorta el status quo.
Traducido Gloria Mühlebach