Elevar el Pensamiento
Ayer por la noche, la luz brillante de una luna llena inmensa se colaba por cada rincón y rendija de casa. Me mantuvo despierta durante un buen rato a pesar de la oscuridad de la habitación. Jamás en mi vida había experimentado con tal intensidad el poder y la atracción que ejerce la luna hasta que vinimos a vivir a esta parte del planeta. Aquí la energía telúrica te sacude y te atraviesa sin miramientos.
Aquí a nadie le sorprende la influencia de la luna en el sueño
Muchos adultos y muchísimos niños la sienten. Es un insomnio que, lejos de ser molesto, te mantiene alerta y receptivo. Y no es de extrañar, estando tan al norte, las estrellas y la luna están al alcance de la mano. Se viven, casi se tocan, se sienten cercanas y muy presentes.
¡Hoy ha amanecido un día glorioso! El cielo azul, las pocas nubes blancas y el sol tímido, aún bajo en esta época del año, son un gozo tras semanas de frío intenso, temporal y nieve.
Me siento a escribir respirando el silencio que me rodea sólo roto por el trino y los silbidos de los pájaros anticipando la primavera. Son días de gran actividad. Se están organizando para repartir el territorio y empezar a construir sus nuevos nidos. Los que dejaron las golondrinas en los bordes del tejado de casa son respetados. De momento siguen desocupados, pero las golondrinas pronto volverán a sorprendernos con su llegada. Repararán los desperfectos que el viento y las heladas hayan causado en sus nidos, los acondicionarán por dentro con briznas de lana recogidas de los campos vecinos donde pacen las ovejas. En sus nidos alimentarán y cuidarán a sus crías hasta que estén preparadas para su primer vuelo.
En la naturaleza todo es actividad, trabajo y cuidado dirigidos a la propia conservación.
Tras los meses de invierno, este fin de semana ha sido el primero de trabajo en el huerto y en el jardín. Una actividad que tiene un gran poder estimulante, revitalizante y que es además, un gran aprendizaje aplicable a la vida cotidiana. Cada actividad encierra una hermosa metáfora aplicable al cultivo y el cuidado de nuestra mente y de nuestro espíritu.
Siento que es mucho lo que me gustaría transmitiros y que un sólo escrito no bastará para abarcarlo todo. Tal vez, por ahora, un primer pensamiento:
Consciencia y responsabilidad. Cuanto más atención prestamos a las leyes que rigen la naturaleza y el universo, cuanto más conscientes somos de que todo y todos estamos interrelacionados, que todo lo que va, vuelve.. por la ley de causa y efecto. Cuanto más conscientes somos de la ley del amor, más responsables somos.
Ser más conscientes no nos hace mejores, pero sí más responsables. Parte de nuestra responsabilidad se traduce en que la consciencia vaya seguida de intención. Intención y atención al pensamiento dirigido a los demás.
La energía sigue al pensamiento. Como argumenta el físico Jean-Pierre Garnier Malet: “No pienses en hacer a los demás lo que no quisieras que los demás pensaran en hacerte a ti”. O formulado en positivo, que tus pensamientos hacia los demás sean siempre bondadosos. Toda acción, toda materialización tiene como base un pensamiento previo (consciente o inconsciente) y la energía que lo sustenta. Es decir, todo pensamiento tiene consecuencias en los demás y en nosotros. Consciencia y Responsabilidad.
Es necesario Re-Cor-Dar que “los demás” incluye a aquellas personas, aquellas relaciones que nos resultan más difíciles, más complejas y a veces, más dolorosas. Ese es el terreno donde aplicar la consciencia, la responsabilidad y por ende, donde florece y da fruto nuestro crecimiento espiritual.
Que nuestro pensamiento incluya también a los seres queridos fallecidos. Es fundamental elevar el pensamiento hacia ellos. Todo pensamiento amoroso, luminoso, bondadoso es una energía poderosa que lo inunda y lo traspasa todo y a todos. Cuanto más nos abrimos a esa experiencia, más les ayudamos y los acompañamos. Ya sabemos que la muerte no existe, que no hay límites, ni fronteras. Todo es consciencia.
La energía sigue al pensamiento entre todos los Seres Espirituales, encarnados y desencarnados.
En lugar de pensar más, aprendamos a pensar mejor, a vivir mejor.
Abrazos,
Elena Lorente Guerrero
Fuente: https://detotselscolors.wordpress.com/2021/03/01/elevar-el-pensamiento/
Gracias gracias gracias .