Intelectualizar a Dios – Kryon
Saludos, queridos, Yo Soy Kryon del Servicio Magnético.
Se admite que lo que ven aquí, al observar, al escuchar, – algunos de ustedes – está más allá de lo que esperarían en la realidad que viven cuando no están en este salón. El hecho mismo de haber venido aquí colectivamente a presenciar esto, a sentir la energía, dice que no necesariamente es algo que ven en cualquier ocasión. O tal vez esperan algo diferente, se concentran en las palabras para descubrir algo especial.
Las canalizaciones son distintas al terminar estos días de talleres, porque hablamos de quienes están en el salón. A veces, el salón es de aquellos que escuchan más tarde – para ustedes – y ahora, para mí. Es más bien un mensaje personal que una información en la que listaríamos cosas como hicimos antes.
De modo que vamos a nuestro asunto. ¿Qué sucede cuando se van? Cuando termina la canalización, si están escuchando más tarde, y se levantan de su silla y van a donde sea que vayan, ¿qué sucede? Ahora mismo en este salón hay un entorno del que ya hablamos antes. Los invitamos a discernir que sí lo hay. Los invitamos a discernir que este mensaje no es de mi socio hablando. Los invitamos a discernir el amor de Dios, del Espíritu, como deseen llamarlo. Esta es la energía que se enseña a través de los Maestros del planeta, una y otra vez; en culturas importantes y en otras menores, a través de los antiguos y de los indígenas. A través de la energía de Gaia, y más. Eso es lo que se enseña en este momento.
Entonces, ¿qué sucede cuando se retiran? La linealidad de sus mentes, y eso que llaman la vida real, provoca una disminución de la energía cuando no están en grupo. El entorno está aquí y es precioso, y los invitamos a sentir la energía de este entorno, como grupo.
Hoy hay algunos frente a mí, que crean colectivamente una cierta consciencia, un atributo de lo que sucede cuando se entrecruzan las merkabas. Cada uno se sienta en la energía de otro, y crean una energía más grande. Y luego se van a casa. Algunos se van con otros con quienes vinieron, muchos vuelven a casa solos. En casa puede haber familia, pero en realidad se vuelven solos a casa. Y cuando llegan, ¿qué hacen? ¿Cuánto de real es esto, más tarde?
No importa qué hagamos ahora, no importa de qué hablaremos o discutiremos, durante años he dicho esto: esta es la parte en que ustedes se sientan y yo me siento y existe un intercambio de amor, porque algunos pueden realmente sentir a la Fuente Creadora y saben que están bien. Algunos son sanados en estas reuniones, porque hay un atributo colectivo de unidad que crea una energía que permite la sanación. ¿Realmente tienen que venir a una reunión para conseguirla?
Quiero decir algo: Bienvenidos a la nueva Tierra, donde cualquiera de ustedes puede ir a casa y crear el entorno, cualquiera de ustedes. Quiero decirles: los recontra desafío – (se ríe) son palabras de mi socio – a convertirse en los maestros que son. Los Maestros que caminaron por el planeta no iban en grupo (se ríe). Caminaban solos; ¡y lo que llevaban era todo! Solos.
Y si ustedes quisieran saber qué pasaba por sus mentes, como seres humanos, había dudas, había conmoción y a veces sorpresa ante lo que sucedía a su alrededor, y ante las reacciones de los demás, pero ellos eran autosuficientes en su amor. Sabían quiénes eran, y eso bastaba para crear el entorno. Iban de un lugar a otro, y las personas que los veían pasar decían: «¡Esto es diferente!» Tal vez han oído decir que incluso los animales sabían que eran diferentes.
Y hacia allí se dirigen ustedes. Existe una eventualidad, un potencial; rueda la bola de nieve del potencial de que cada alma antigua singular, cada ser humano que despierta a su propio poder incrementado, empezará a cambiar químicamente; el ADN empezará a cambiarse físicamente, habrá más consciencia en su interior, y van a vivir más tiempo. Tendrán por sí mismos revelaciones sobre quiénes son.
Y las cuestiones más importantes serán cosas como la propia responsabilidad, la toma de conciencia de las situaciones en que están y no necesariamente debieran estar – no para permitirse crecer; algunos saben de qué estoy hablando. Y el crecimiento también crea algunos momentos incómodos, pero los Maestros también los tenían.
¿Qué van a hacer cuando lleguen a casa? Déjenme preguntarles algo: ¿Esta reunión hace de muleta para ustedes? ¿Han venido a una reunión como esta para sentir la euforia del amor de Dios? ¿O pueden salir de este lugar caminando erguidos y decir: «Esto lo puedo crear dentro de un armario.»?
Ahora bien, esta es la siguiente pregunta. Estás con otros y no piensan como tú. ¿Puedes crearlo en esa circunstancia? Puedes caminar con esta euforia, con el Espíritu dándote directamente desde tu interior lo que podrías sentir ahora, y estar con otros que no están de acuerdo y te dan un mal rato? ¿Qué pasará cuando te retires de aquí?
Hoy hubo preguntas, y se intentó responderlas. Casi uniformemente, en todo el planeta, las preguntas a los que canalizan, a los que enseñan, al mismo Espíritu, son todas las mismas. Y esas preguntas tienen que ver con qué, dónde, cómo, cuándo y por qué. Es casi como si cada uno necesitara entender la mecánica de todo lo esotérico para poder dar el próximo paso. Esa es la naturaleza humana. Y voy a decir esto, repitiéndolo: ¿Por qué hacen eso? ¿Es necesario realmente, verdaderamente?
Queridos, otra vez les doy el ejemplo. Tienen una máquina llamada cuerpo humano; es una máquina química. Los lleva de A a B, del nacimiento a la muerte, y trabaja sola, sin que ustedes piensen mucho en eso. Está diseñada de esa manera; ustedes trabajan con esta máquina toda su vida, y a medida que crecen aprenden sobre ella. Algunos consiguen controlarla por medio de la salud que le aportan, por el alimento y las otras cosas que le aportan. Y hasta allí llegan; eso es casi todo.
Según han descubierto, su consciencia puede alterarlo, hacer que dure más tiempo, pero funciona por sí mismo. ¿Realmente tienen que ser médicos y estudiar cada parte y cada pieza para ir de A hasta B? Y la respuesta es no. Suben a su coche y los lleva de A hasta B y nunca se les ocurre «Tengo que entender el funcionamiento del motor de combustión interna para llegar de A hasta B.» (se ríe) ¡Nunca, jamás! Porque sencillamente funciona. Ahora les diré de nuevo: el proceso de despertar espiritual del ser humano, lleno de propósito en esta era, tiene mecánicas automáticas que funcionan dentro de ustedes. En tanto se dan cuenta del cambio y la transformación, el Espíritu trabaja con ustedes. ¿Cuántos se dan cuenta de lo que sucede cuando se despiertan a las 3 de la madrugada? Les pasa a muchos de ustedes. Y se despiertan y se impacientan, y dicen «¿Qué quieres?» (se ríe) ¿O tienen el equilibrio como para levantar la mano y decir: «Gracias, Espíritu, por mantenerme despierto, reconozco que estás trabajando sobre mí, que hay cosas que necesitan salud y reparación, hay cosas que necesitan mejorar. ¡No necesito saber qué! ¡Gracias!» ?
Verán: es un sistema diseñado para funcionar por sí mismo en el alma antigua; si abren la puerta, la luz entra, y no necesitan analizar qué forma de onda tiene. ¡No necesitan medir la puerta! (se ríe) No necesitan saber por qué, realmente no. En cambio, querido ser humano, quiero que lo sientas. O bien es apropiado o bien no lo es. De eso se trata el libre albedrío. ¿Da miedo? ¿Se siente bien o no? El discernimiento no tiene que ver con los detalles de cómo esto funciona, de cuánto tiempo requerirá, de adónde va. El alma antigua empieza a despertar a un propósito más alto y a la idea de que estas cosas llegan cuando corresponde, y cuanto más tranquilos estén al respecto, mejor van a funcionar. Pero se van a detener si ustedes empiezan a analizar el qué, por qué, quién, cuándo; se va a detener, queridos, porque esas respuestas no están disponibles en estado lineal. Todos ustedes se han enamorado, todos, ya sea de otro ser humano, de un Maestro, de un animal; es sabroso, es hermoso, cambia su química; se miran a los ojos, y están enamorados. Y yo dije esto antes: ¿Entonces paran y lo analizan? Dicen, «¿Qué está pasando? ¡No me puedo enamorar a menos que conozca bien los detalles!» Por supuesto que no hacen eso; claro que no; caen uno en brazos del otro y lo disfrutan. ¡Lo disfrutan! Y no hay nada que se le parezca, ¡nada!
Dios está enamorado de ti, y no hay nada que se le parezca. Quiero invitarte a caer en los brazos de lo que ya está dentro de ti, que llamas el Yo Superior, que tiene la energía creadora del amor de Dios; te enamoras y dejas de preguntar por qué, cuándo, o cómo.
Hay respuestas, respuestas básicas, respecto al cambio del planeta, a dónde se dirigen, qué está pasando verdaderamente. Se trata de una raza humana ascendida. Un humano tras otro, un caso tras otro, pensando distinto, en un sendero que está en una vibración más elevada. El resultado: vida más larga, paz en la Tierra; ya lo dijimos antes. Pero queridos, esto es un principio esotérico metafísico: están yendo de A hacia B; es demasiado complejo para que lo pongan en una caja, especialmente una caja de tres dimensiones.
Y habrá quienes se retiren de aquí y cuando salgan por la puerta, todo lo que estaba aquí se quedará aquí, porque simplemente no lo captaron. Todo lo que aquí se enseña es de ustedes; no proviene del que está en el escenario; está disponible dentro de ustedes.
Esta noche antes de ir a dormir, los invito a retirarse a una habitación que sea privada, y quiero que piensen en estas cosas. Incluso podrían levantar el brazo y decir: «Querido Espíritu, si estás allí, ¡muéstrame!» Y tendrán escalofríos. Sentirán, incluso con los ojos cerrados, que una luz brillante irradia desde arriba de su cabeza, y su Yo Superior va a decir: «¡Ya era hora de que preguntaras!» Y pueden llevar esa luz por donde quiera que vayan, por sí mismos, solos. Si tienen la fortuna de tener un compañero o familiares o asociados que sienten lo mismo que ustedes, ya son un grupo. Llevan aún más poder, porque cuando son dos o más, es exponencial. Pero queridos, empieza por ustedes.
¿Se atreven a hacer la pregunta: «Querido Espíritu, qué es lo que necesito saber«? No recibirán una voz; no habrá una escritura en el muro; recibirán guía, intuición y amor. Ese es el nuevo ser humano, que acepta algo tan complejo, ¡que afecta su vida, su emoción, todo! Y no lo entiende, y no necesita entenderlo. Porque el designio, queridos, es que van a ir de A hacia B sin saber por qué. ¿Pueden hacer eso? Discernirlo con su corazón emocional. Si necesitan analizarlo, analícenlo desde el punto de vista de lo correcto del sentimiento. No lo analicen desde lo que les han enseñado que tendría que ser, o de lo que sucede normalmente, o de lo que creen que sucede. No hay ni uno de ustedes que realmente sepa lo que sucede, ni siquiera el que está en la silla.
Todo lo que les hemos dado es sumamente simple, porque allí es donde están ahora mismo. Están en un lugar simple, con conceptos sencillos, resolviendo un rompecabezas sencillo que es enormemente complejo, como el motor de su auto. Los va a llevar allá, si se lo permiten. No teman al amor de la Fuente Creadora en su vida. Tal vez era hora de que oyeran eso.
Cuando se vayan de este lugar, se van a casa, ¿qué sucede? Los que están escuchando esto: se levantan de la silla y van a otra habitación, y ya terminaron de escuchar un mensaje de Kryon. ¿Van a llevarse eso consigo, o lo van a apagar? Mi socio lo llama «dar vuelta la perilla». Viven una vida, van a un edificio, rinden culto, se visten para ello, vuelven a casa, viven su vida. De A hacia B. Y ya es hora de detener eso.
Quiero que se vayan de este lugar distintos de como vinieron. El entorno está haciendo mucho ruido en este momento; ustedes no pueden realmente oírlos con sus oídos, pero pueden sentirlos con su corazón. Ustedes son conocidos por Dios; los conoce por sus nombres! Es hora de que se vayan sabiéndolo; se meten en un armario y son conocidos por Dios, por su nombre, con una luz que brilla sobre sus cabezas.
Ese es el mensaje para hoy. Será el mensaje en tanto yo esté aquí. (se ríe).
Y así es.
Kryon
AUTOR: Lee Carroll
DESGRABACIÓN Y TRADUCCIÓN: M. Cristina Cáffaro
