Los daños que el enojo puede causar a tu corazón.
Si eres una persona que se enoja con facilidad, tu corazón puede jugarte una mala pasada, según lo revelan investigaciones recientes.¿Cómo el enojo daña tu corazón? Tener mal carácter no solo daña tu popularidad. También puede hacer estragos en tu salud. Un grupo de científicos confirma que el mal genio aumenta el riesgo de sufrir un ataque cardíaco.De acuerdo con un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Harvard (Estados Unidos), el hecho de perder los estribos aumenta este riesgo.
Es recomendable mantener la tranquilidad.Aunque ya sabíamos que las personas agresivas y enojonas tienen altas probabilidades de sufrir un infarto, esta nueva investigación es pionera en demostrar que existe un efecto instantáneo debido a una explosión de cólera.Según el estudio, dos horas después de que el enojo ha pasado, el riesgo de sufrir un ataque al corazón aumenta cinco veces, mientras que la posibilidad de un derrame cerebral aumenta tres veces.
También ha quedado demostrado que aquellos que se enojan con frecuencia están en mayor peligro, además de las personas que tienen una enfermedad cardíaca preexistente.
El grupo de científicos llegó a estas conclusiones tras realizar nueve investigaciones efectuadas entre junio de 1966 y junio del 2013, en las que se observaron seis mil casos de ataques al corazón y otros problemas cardíacos, relacionándolos con las emociones extremas del paciente.
Es aconsejable intentar llevar una actitud alegre para llenarnos de buenos momentos.
En palabras de la doctora Elizabeth Mostofsky, de la Facultad de Salud Pública de la Universidad de Harvard, “a pesar de que el riesgo de experimentar un evento cardiovascular agudo con un episodio único de ira es relativamente bajo, el riesgo se acumula para la gente con episodios frecuentes».
Es claro que la importancia de esta investigación radica en que ayudará a guiar médicamente a pacientes que tiene un alto riesgo de sufrir un ataque cardíaco. Así que, la próxima vez que explotes, piénsalo bien, cuenta hasta 10 y respira profundamente… por el bien de tu corazón.