Mensaje de Jesús: Todos ustedes tienen egos, y en forma humana los necesitan.

Canalizado por John Smallman, 10 de agosto de 2018

Sananda – Jesús

Cuando la humanidad despierte, como inevitablemente lo hará, habrá una enorme efusión de AMOR por todo el mundo.  Ustedes, colectivamente, han estado trabajando en este evento durante mucho tiempo, y ya están listos.  El caos, la confusión y el conflicto en todo el mundo, en este momento de evolución espiritual, es el resultado de la elección colectiva de despertar.

Están surgiendo muchos recuerdos agonizantes de conflicto, dolor y sufrimiento para que los liberen. Cuando los retienen y los habitan, se mantienen en un estado de amargura, odio y resentimiento.  Mientras que cuando los liberan, se permiten abrir sus corazones al Amor que siempre está presente y que sólo desea envolverlos y abrazarlos, como lo hará cuando dejen ir la necesidad de culpar, juzgar o buscar venganza o restitución por las heridas del pasado, y en su lugar acepten y traten amorosamente lo que surja.  El amor es tu naturaleza, y todo ser humano, sin excepción, sólo desea amar y ser amado.

El Amor es abierto, acepta, abraza, pero no puede entrar allí donde la amargura, el odio o el resentimiento están presentes porque esos sentimientos, esas intenciones, son opciones que hay que cerrar al Amor.  Y el Amor nunca forzará a nadie porque eso va completamente en contra de Su naturaleza.

Para muchos el amar les parece invitar a la traición porque a menudo, como humanos, han visto traicionada su confianza.  Sin embargo, la traición sólo es efectiva cuando el Amor se busca fuera del yo.  Cuando reconocen y aceptan que son Amor, y lo saben, la traición ya no es un problema porque -amándose a ustedes mismos y aceptándose- comprenden que el que traiciona está en intenso dolor y angustia, y, en verdad, sólo está pidiendo Amor, y así son capaces de responder amorosamente.

Todos ustedes saben, en lo más profundo de su ser, que son seres de Amor. Pero a lo largo de los eones, como niños, han sido criados en situaciones que, en mayor o menor medida, han explotado su inocencia y abusado de su confianza.  Lo más frecuente es que aquellos que hicieron esto no eran conscientes del daño que estaban causando, y creían que los estaban preparando lo mejor que podían para vivir y sobrevivir en un mundo peligroso y hostil.

El amor está dentro de todos ustedes, es la fuerza de la vida, el campo de energía que provee el poder necesario para que el cuerpo humano funcione suave y eficientemente.  Cuando encierran al Amor y se aferran a la amargura, el resentimiento, el odio o el deseo de venganza, el cuerpo se angustia y trata de atraer la atención a través del dolor, el accidente o la enfermedad – al principio con suavidad – pero si no responden, entonces con creciente intensidad.  Incluso entonces muchos se niegan -sí se niegan- a ver o a responder, y así el cuerpo, al negársele el pleno uso de la fuerza vital que necesita y a la que tiene derecho como compañero de la forma humana, se pudre y muere.

Si ustedes pudieran verdaderamente dejar ir todo lo que está dentro de ustedes que no está en completa alineación con el Amor, sus cuerpos permanecerían fuertes y saludables, y serían capaces de vivir y saborear vidas mucho más largas.  Y, por supuesto, bajo esas condiciones estarían viviendo en alegría en vez de en ansiedad, depresión y enfermedad, o en amargura y resentimiento por las situaciones aparentemente injustas de la vida.

Cuando ustedes permiten que el Amor llene sus corazones, su energía fluye a través de ustedes libre y abundantemente y hacia el mundo, interactuando y afectando a todos aquellos con los que están en contacto de cualquier manera, difundiendo y compartiendo así la alegría.

El amor es su naturaleza, y cuando lo aceptan de todo corazón, en vez de bloquearlo o negarlo, sus vidas fluyen mucho más suave y fácilmente, permitiéndoles lidiar más satisfactoriamente con cualquier asunto que pueda surgir.

Necesitan confiar en el Amor.  Para hacer eso tienen que amarse a ustedes mismos tal como son, aceptando que como humanos son obviamente menos que perfectos, que tienen lecciones que aprender, y es por eso que están encarnados en este momento en la evolución espiritual de la humanidad que está en curso.

Al aceptarse incondicionalmente, y al abstenerse de compararse con otros que, en su opinión, son más afortunados o más bienaventurados, encontrarán la paz, y entonces comprenderán y aprenderán mucho más fácilmente las lecciones que se les presentan.  Lecciones que planearon antes de encarnar.

Todos ustedes tienen egos, y para vivir en forma humana, los necesitan.  Sin embargo, el ego es el aspecto de ustedes mismos que reacciona con miedo e ira a situaciones que le parecen amenazantes.

Los egos son como niños pequeños que aún no han aprendido a comprender que necesitan respetarse y honrarse unos a otros, y que siguen operando desde el modo de ser «yo, yo, yo, yo».  Cuando son infantes es necesario porque debe poder llamar rápidamente la atención de aquellos que están a su cuidado y que son responsables de su bienestar.

Desafortunadamente, sucede con frecuencia que los cuidadores son lentos para responder, o simplemente no responden en absoluto, y esto aterroriza a los pequeños.  Entonces, a medida que crecen, ese estado de necesidad no se resuelve ni se libera, y en el momento en que llegan a la edad adulta físicamente ese comportamiento «yo, yo, yo» se ha arraigado profundamente como una habilidad de supervivencia necesaria.  Desafortunadamente, es muy dañino porque les impide tomar conciencia de que son seres de Amor, la mayor lección que todo ser humano debe aprender.

Despertar implica tomar conciencia de este sentido de insuficiencia, que es todo lo que es, reconocer su invalidez, y luego optar por dejarla ir.  El ego es un aspecto de ustedes mismos que necesita ser visto por lo que es, a saber, su niño interior herido y asustado, y entonces necesitan consolarlo y mostrarle que está completamente a salvo porque ustedes mismos se otorgan todo el amor que necesitan.  Cuando hacen esto, entiende que está totalmente a salvo, seguro y que es aceptado incondicionalmente por ti.

Esto resulta más fácilmente amándose y aceptándose a sí mismos tal como son, y luego trabajando suave y amorosamente con ustedes mismos para disolver el miedo subyacente amando ese intenso sentido de insuficiencia.

Cuando eso suceda, como sucederá si eligen amarse y aceptarse a sí mismos completamente, sus egos se integrarán plenamente en las formas humanas que son, en lugar de permanecer aparentemente separados, y, en ese estado, de sentirse inadecuados, indignos, no lo suficientemente buenos, y por lo tanto temerosos y enojados.

Todos ustedes saben, muy dentro, que son Uno con la Fuente.  Sin embargo, como humanos en forma, ese conocimiento les está oculto para que puedan aprender las lecciones que se les presentan, avanzando así en su camino de evolución espiritual.  Y todos ustedes quieren evolucionar espiritualmente.

A menudo les parece que evolucionar espiritualmente está completamente más allá de sus capacidades como humanos.  Y como un humano separado ciertamente lo estaría, ¡pero ustedes no están separados!  Nunca lo han estado y nunca estarán.  Están conectados segura y eternamente con la Fuente, y cada uno de ustedes tiene todo un equipo de guías, mentores, ángeles y seres queridos que los vigilan amorosamente y esperan que los llamen para pedirles ayuda en esa evolución.

Sus egos, en su miedo y ansiedad, a menudo ahogados ruidosamente por su «yo, yo, yo», demandan la respuesta a la llamada de ayuda que han realizado y que aquellos en los reinos espirituales les ofrecen instantáneamente.

Por eso, como se les recuerda tan a menudo, es absolutamente esencial que vayan diariamente a ese santuario interior sagrado que cada uno de ustedes posee, y descansen allí tranquilamente, amándose y aceptándose a sí mismos. 

Y en esa auto-aceptación sus egos se sentirán seguros y se integrarán.

Merecen amarse a sí mismos porque ustedes son todos los hijos divinos y amados de Dios creados en y desde el Amor, que es Todo Lo Que Existe.

Tu hermano amoroso, Jesús.

TRADUCTORA: Carolina, traductora de la gran familia de la Hermandad Blanca.

FUENTE: John Smallman, 8 de agosto de 2018. You all have egos, and to live as humans in form you do need them. URL: https://wp.me/p1B8dY-tH