Protección: en vos confío mi corazón sagrado

Protección es una palabra que contrastamos  con la palabra riesgo, similar al uso que hacemos en la planeación estratégica de las  fortalezas-debilidades, oportunidades-amenazas. Al protegernos, estamos rechazando todos los ataques y todos los asaltos y así estamos procurando nuestra salvación.  La integración más completa y minuciosa de los distintos factores de riesgo de la maldad ha sido la planteada por el modelo ecológico cuyas principales propuestas son:

La maldad es múltiplemente determinada por fuerzas que actúan en el individuo, en la familia, en la sociedad y en la cultura en la que el individuo y la familia están inmersos. Estos determinantes múltiples están ecológicamente anidados uno dentro de otro y consecuentemente, gran parte de los conflictos que han caracterizado el estudio de la maldad son más aparentes que reales.

Son cuatro los niveles de análisis, los factores y procesos explicativos que se han considerado contribuyen al origen de la maldad: lo endógeno, lo microcósmico, lo exógeno y lo macrocósmico.

Lo endógeno, como glándulas endocrinas, conserva la herencia que los padres que maltratan a sus hijos traen consigo a la situación familiar y al rol parental. El microcosmos representa el contexto inmediato donde tiene lugar el maltrato, es decir, la familia. Lo exógeno representa las estructuras sociales que rodean y afectan el contexto inmediato en el que se encuentra la persona. Finalmente, el macrosistema representa los valores culturales y sistemas de creencias que permiten y fomentan el maltrato infantil a través de la influencia que ejercen en los otros tres niveles: el individuo, la familia y la sociedad.

Las creencias existenciales, como la fe en Dios o en otro orden natural del Universo son creencias generales que ayudan a las personas a conservar la esperanza y a buscar el significado de la vida, a pesar de sus experiencias dolorosas.  La religión de esta manera se torna un censor de los asuntos mortales, una forma de fideicomiso moral glorificado y confianza en la realidad, las realidades enaltecidas del tiempo y las realidades más duraderas de la eternidad. La religión creó para la mente humana una conciencia espiritualizada de la realidad divina basada en conceptos antecedentes de valores morales y derivada por la fe de estos conceptos y coordinada con conceptos sobrepuestos de valores espirituales.

La fe se vuelve la conexión entre la conciencia moral y el concepto espiritual de la realidad duradera. La razón se vuelve la avenida de escape del hombre de las limitaciones materiales del mundo temporal y natural mediante la técnica de la salvación, la transformación virtual progresiva.

“Mira la esencia y no las apariencias. El cuerpo es sólo un estuche y sus ojos la ventana…”

El Ajustador es el custodio eterno de la identidad ascendente, es la identidad de ese ser universal inmortal.

Los Ajustadores están dedicados a mejorar, modificar, adaptar y coordinar los procesos de pensamiento. El tipo de ajustador tiene mucho que ver con el potencial para la expresión de la personalidad humana.

Como divina presencia, su misión consiste en elevar la mente inmortal y en trasladar el alma inmortal de los seres humanos a las alturas divinas y a los niveles espirituales de la perfección.

Cual Monitor de video, los Ajustadores pasan por las etapas que ha pasado la tecnología analógica, digital y la alta definición.

Monitores Misteriosos, quienes se han ofrecido como voluntarios para servir en esta esfera irregular. Sea cual fuere la crisis, ellos jamás fallan. Son leales al fideicomiso, Permanecen divinamente fieles. Ayudan a ajustar los errores y a compensar las limitaciones de todos los que laboran en este confuso planeta. Se les reconoce por su exquisito altruismo, su ministerio comprensivo, y su devoción imparcial. Merecen el nombre de servidores semejantes a Dios de los habitantes mortales de este mundo destrozado por las luchas, afligido por el sufrimiento y afectado por las enfermedades. ¡Yo os honro! Casi os adoro!

Pero los Ajustadores del Pensamiento no están sujetos al examen cuando sus sujetos fracasan en la supervivencia.

La Política: lo legislativo.

En un Universo Local la ley se origina en las asambleas legisladoras de las constelaciones. Estos cuerpos deliberantes codifican y promulgan formalmente las leyes básicas de su universo, leyes proyectadas para permitir la coordinación máxima de una entera constelación, de acuerdo con la política fija de no intrusión, con el libre albedrío moral de las criaturas personales.

La soberanía original del planeta Tierra estaba en manos del soberano del Sistema de mundos quien delegó a una comisión conjunta de Melquisedek y Portadores de Vida, que funcionó hasta la llegada del Príncipe del Planeta, pero durante la rebelión de Lucifer el planeta perdió sus nexos con el universo local hasta que Miguel fue proclamado Príncipe.

El Magisterio.

Magisterio es el conjunto de maestros que se han especializado en las normas de la enseñanza. La enseñanza es un proceso de transferencia de energía del maestro a su discípulo. La enseñanza ha de ser dividida en grados ya que el corazón exige cuidado, coordinación e integración, de otra manera se producirá la ignición del tejido fosfórico. El tejido fosfórico procede del centro base y arde cuando se enciende por la irritabilidad o el choque. La irritabilidad representa la respuesta vibratoria y las reacciones de la personalidad al medio ambiente, individualidad, etc. El choque es producido en la personalidad por el contacto con el alma o con las circunstancias y los acontecimientos.

Los Maestros utilizan el lenguaje metafórico para poder impregnar al corazón humano del mundo de significados, la tarea del aprendiz consiste en diseñar estrategias de conceptualización, luego desenredar la trama del mundo de significados, cuando lo logra se convierte en un discípulo de su maestro. Después de penetrar en la trama de la vida ha de encender la chispa en el corazón lo que implica el dominio de la electricidad y la electrónica. Estas tres fases del proceso de aprendizaje es necesario hacerlas de manera gradual ya que implican el manejo de la energía y por lo tanto el dominio de su graduación.

“Cristo te ama en espíritu y verdad, búscalo y verás que al fin la paz encontrarás”.

El Espíritu de la Verdad es la presencia del Hijo.

Es en el corazón donde se realiza la alquímica tarea de convertir los pensamientos en sentimientos y las corrientes emocionales en energía mental. Al desarrollar las doce virtudes del corazón, se elevan las energías de los siete rayos hacia la cabeza.

Los Maestros son los agentes divinos de esos siete rayos, que transfieren su conciencia a la mente del discípulo mediante su triple energía, ya que voluntad, amor e inteligencia son aspectos del Propósito de la Divinidad en tiempo y espacio.

La conciencia crística conserva la memoria de las experiencias en la vida en sus distintas encarnaciones y su paso por el planeta Tierra.

El Hijo Eterno es el fideicomisario personal, el custodio divino, del plan universal del Padre para la ascensión de las criaturas. Habiendo promulgado el mandato universal, “Sed perfectos, así como yo soy perfecto”, el Padre confió la ejecución de esta formidable empresa al Hijo Eterno; y el Hijo Eterno comparte la realización de esta empresa excelsa con su coordinado divino, el Espíritu Infinito.

Los Melquisedek constituyen la esperanza de todo grupo del universo que aspire al autogobierno; son el modelo original y los maestros del autogobierno para las siete esferas del Universo local. Los Espíritus Supremos como representantes diversificados del Actor Conjunto se constituyen en fideicomisarios de la soberanía de espíritu-mente-poder del Ser Supremo que él aún no ejerce personalmente. Los Maestros Ascendidos enseñan a elevar la materia en el tiempo-espacio-realidad.

La Economía: lo Ejecutivo.

Una Nación se desarrolla cuando aumenta su capacidad e interés por satisfacer las necesidades y deseos de quienes dependen de ella, esto es, los ciudadanos afectados. En una democracia participativa todos los ciudadanos contribuyen con la economía del país al ser productivos y efectivos en sus acciones. Un ser humano que destaca en empuje, liderazgo y emprendimiento ha de estar avezado en las funciones intelectuales de la administración: establecimiento de políticas, resolución de problemas y toma de decisiones.

En una economía de mercado interno todas las unidades operan como centros de ganancias, no se espera que todos ellos sean rentables, pero su rentabilidad se toma en consideración para evaluar su desempeño.

Los Ministerios

Un ministerio es cada una de las partes en las que se puede dividir el Gobierno de un país, aquí es oportuna la diferencia entre regir, gobernar y controlar, ya que en una democracia se cuenta con Presidente, gobernadores y alcaldes, de acuerdo al nivel de jurisdicción territorial. Se rige desde la ley, se gobierna desde las políticas y los procesos, y se administran los recursos. En el caso de un sistema presidencial los ministros dependen del presidente del Gobierno, que es el encargado de nombrarlos, administrarlos, y presidir las reuniones del Consejo de Ministros. Cada ministerio le está prestando un servicio a la nación en una de las líneas de rayo, estando en la capacidad de satisfacer las necesidades de los usuarios.

El alma emplea tres grandes principios fundamentales por medio de los cuales aprecia la cualidad, el motivo y el valor final: amor, sabiduría y servicio. Amor es la respuesta al contacto, lo que significa comprensión, inclusividad e identificación. Sabiduría significa habilidad en la acción como resultado de un amor desarrollado y de la luz de la comprensión. Servicio es una manera científica de demostrar amor-sabiduría.

Ángel de la guarda, mi dulce compañía, no me desampares ni de noche ni de día.

El guardián serafín es el fideicomiso de custodia de los valores de sobrevivencia del alma durmiente de la criatura mortal.

Los serafines son estimuladores de la mente; intentan continuamente promover en la mente humana las decisiones que cumplen los círculos. El Servidor angélico tienen el don de combinar el amor del Padre y la misericordia del Hijo en su ministerio a la criatura mortal.

A través del lapso de vida de los sobrevivientes durmientes, los valores espirituales y las realidades eternas de sus almas recién desarrolladas e inmortales se mantienen en fideicomiso sagrado en las manos del serafín guardián personal o del serafín guardián de grupo. Si se cuenta con un guardián personal del destino y se fracasa en el logro de la supervivencia, ese ángel guardián debe ser adjudicado para reivindicar su ejecución fiel del fideicomiso.

Con cada serafín asignado a la repersonalización de un mortal durmiente actúa el Ajustador que ha regresado, el mismo inmortal fragmento del Padre que viviera en él durante los días de la carne, y así se restaura la identidad y resurge la personalidad.

El serafín de asignación es el que mantiene la identidad sobreviviente —el alma inmortal— hasta donde haya evolucionado. Y cuando el Ajustador y el Custodio, reúnen sus fideicomisos de personalidad, el nuevo individuo constituye la resurrección de la antigua personalidad, la supervivencia de la identidad evolutiva morontial del alma. Diferenciar sobrevivir y supervivir.

Dicha reasociación de alma y Ajustador se denomina en forma totalmente apropiada, una resurrección, un reensamblaje de los factores de la personalidad; pero aún esto no explica enteramente la reaparición de la personalidad sobreviviente.

La Sociedad: lo Judicial.

La justicia humana consiste en reivindicar los derechos, la base intelectual de la justicia es la ley. Cada vez es mayor el número de personalidades que encuentran intolerable el efecto de la creciente delincuencia sobre la calidad de vida. Como consecuencia, “la ley y el orden” se han convertido en temas políticos importantes.

El interactivo piensa que la justicia debería preocuparse más por proteger al individuo de la sociedad que por proteger a la sociedad del delincuente. Considera que la función principal del sistema de justicia penal es la corrección de la sociedad, castigar al transgresor o a la sociedad es irrelevante.

Los Magistrados.

La supervivencia de la democracia implica la transición de un gobierno representativo a uno participativo, lo cual está condicionado a la práctica de elección popular de aquellos que demuestren cierto grado de Maestría, y que para los cargos públicos sólo aspiren aquellos que son técnicamente capaces, intelectualmente competentes, moralmente aptos y socialmente leales, lo que va tomando el nombre de meritocracia. En una democracia representativa, el gobierno es determinado por el carácter y la capacidad de los que lo componen, en una participativa la planeación se realiza de manera estratégica y colaborativa.

Magistrado es aquel que se desempeña en las altas cortes y por lo tanto está ligado a la justicia. Una corte socioeconómica sería la encargada de mantener la equidad y satisfacer de manera óptima las necesidades de los ciudadanos.

El fideicomiso es un contrato en virtud del cual una o más personas transmiten bienes, cantidades de dinero o derechos, presentes o futuros, de su propiedad a otra persona, para que esta administre o invierta los bienes en beneficio propio o en beneficio de un tercero, llamado beneficiario, y se transmita su propiedad, al cumplimiento de un plazo o condición al fideicomisario, que puede ser el fiduciante, el beneficiario u otra persona.

Al momento de la creación del fideicomiso, ninguna de las partes es propietaria del bien objeto del fideicomiso. Las partes son.

Fiduciante: el que transmite la propiedad de los bienes. Fiduciario: el propietario de los bienes fideicomitidos luego del vencimiento del plazo del contrato.

Los bienes afectados al fideicomiso no corren el riesgo comercial del fiduciante ni del fiduciado, puesto que el patrimonio que es objeto del fideicomiso no puede ser perseguido por los acreedores de ninguno de ellos, ni afectado por la quiebra de ambos o de alguno de ellos.

Aunque los fideicomisos a menudo se asocian con transferencias de riqueza intrafamiliares, se han vuelto muy importantes en los mercados de capital, particularmente a través de los fondos de pensiones y los fondos mutuos.