Rayo azul, llama sagrada actualizada con Aurelia L. Jones
Hola de nuevo, hoy empieza una nueva edición y versión revisada y actualizada de los rayos metafísicos o las llamas sagradas o las luces celestiales, como prefiera llamarles porque el nombre solo es una definición humana a unas conciencias lumínicas intensas y de gran sabiduría a las que vamos accediendo y comprendiendo a medida que nos acercamos capa a capa y segundo a segundo de dedicación entre nuestro propio ser y el ser de cada llama, rayo o luz.
Desde que empecé hasta hoy, me he ido dedicando espacios de tiempo a ellas y ellas a mi, al 50%, como funciona la energía neta y ligera en las frecuencias del amor.
Tanto que se emito tanto que se recibe
Aún recuerdo cuando me llegó la creencia que si hacia algo bueno se multiplicaba por 10 y que como durante un tiempo mantuve esa creencia sin pensar en cómo funciona el universo y porque me hacía sentir bastante bien ese posicionamiento.
Gracias a la interacción con las llamas me llegó la información lógica y coherente. Si dispongo de un recipiente de luz con 1000 impulsos de luz para hacer circular diariamente, y emito un impulso de luz: ¿Cómo voy a recibir 100? ¿Dónde pondría los 99 que sobrepasan mi capacidad?
Y así fue como empecé a entender que una creencia como la compensación de las buenas intenciones del universo, simplemente no dejaba de ser como una leyenda urbana que la gente expande sin parar a descubrir y sentir. El porqué quizás es lo más sencillo de entender; simplemente porque cuando estamos en la frecuencia de querer creer y sentirnos mejor, pues esa frase no aporta una seguridad que realmente dentro nuestro no tenemos.
Nos “megacompensa” la sensación de ser “superluz” y seres de gran bondad cuando hacemos algo bueno creyendo que el universo nos compensa cien veces lo que nosotros hacemos. Y es que eso en realidad es necesidad, pues cuando con el tiempo y la práctica, sobre todo del rayo rosa, uno se da cuenta de que simplemente emites sin esperar.
Emites porque sientes emitir y ni pretendes compensaciones ni regalos de vuelta ni nada, o mejor dicho, eso sí lo sientes, sientes la nada de vuelta, y esa energía, sí que es de un amor incondicional indescriptible. No me voy a extender en la energía de la nada aunque si comentarte que su origen proviene de partículas del rayo azul de nueva frecuencia y que estas prácticas nos acercan a amores incondicionales que no podremos compartir más que con una mirada o un gesto pleno con los que allí también haya estado.
Volviendo a los rayos, y concretamente al azul. Hice las prácticas básicas que todos realizamos gracias a la aportación de las siete llamas sagradas y allí empezó una andadura más intensa por ellas. Algunas de estas prácticas duran años y otras, segundos. Mi última evolución con las siete llamas y que me han traído aquí hoy, me ha llevado a dedicarle espacios temporales intensos durante los últimos cuatro años de mi tiempo en la tierra.
Con grupos de prácticas en diferentes centros y con la nueva frecuencia, revisando palabra a palabra y sintiendo la sincronicidad entre las palabras y la sonoridad de las frases que se iban construyendo prácticamente solas.
Les dimos tres vueltas enteras a cada rayo, y pasamos de unas cinco o seis páginas de información a unas 30 y donde aún podríamos añadir la consonancia de los minerales, los olores y los sonidos.
Cuando estaba llegando al final de la segunda vuelta, una sensación diferente llego a mi campo perceptivo y me di cuenta de que no solo estaba acompañado por el grupo interdimensional al que me gusta pertenecer con esta actividad, sino que alguien, más humano que etérico, estaba a mi lado facilitando mis conexiones de una manera maravillosa.
Descubrir quién me acompañaba fue una grata sorpresa
Como ya sabemos, no nos vamos presentando con los nombres por delante porque antes nos conocemos como seres y esencias. Sentí un salto de calidad enorme en la información y en la facilidad para redactar esa información. Materializaba mucho más rápido y revisaba de manera más efectiva. Agradecido es una palabra que se queda diminuta con lo que sentía.
La misma sensación y la misma escritura me daba información que ni me había planteado, ni me imaginaba que se pudiera percibir así. Seguimos con dedicación y devoción unas semanas más hasta que un detalle me hizo percibir que quién me acompañaba era Aurelia, la que conocemos generalmente por su aportación a la humanidad con las siete llamas sagradas. Aunque su actividad fue mucho más extensa y fructífera que eso ( y que la sensación que percibo ahora mismo de su humildad actual no me da para extender más en halagos por respeto y amor ).
Sentí un montón de dudas de si era, si podía ser y un largo recorrido de horas dedicadas a sentir que decisión tomaba y que decidía creer. Al final lo obvio y los datos que me daba hicieron su efecto y empezó una colaboración indescriptible donde no solo hemos actualizado todas las palabras y frases de las siete llamas sagradas, sino que hemos intensificado las oraciones, los desplazamientos a los templos, y sobre todo hemos materializado un gran número de prácticas con cada rayo para llegar mejor a ellos y entenderlos.
Las prácticas que se están materializando son de nueva creación
Serán de acceso libre y totalmente gratuito por las redes a través de esta revista para que se pueda practicar desde la individualidad y tantas veces como se quiera y se desee. Te dejamos la muestra de la oración y de la práctica del inicio para que te permitas sentir y disfrutar de este paso.
Un abrazo enorme de luz y feliz camino. Espero que compartas tus experiencias para así crear momentos de luz y abrazos infinitos de gratitud por la tierra.
Gracias.
Llamas de LUZ. CROMOTERAPIA. Talleres Gratuitos
El evento se desarrolló de forma tan intensa que, tras la liberación, la materia danzaba al son de vibraciones de frecuencia amorosa con lo que tuvimos que anclarnos a tierra firme para, poco a poco, ir regresando al Estado 3D mediante una tierna y agradable conversación. Fue como uno de esos procesos cíclicos pero carentes de reversibilidad, pues, desde ese día, desde ese instante, nada volvió a ser lo que era…
Me alegro muchisimo R.V. los rayos nos aportan cada vez más cosas y más intensidades.
un abrazo de luz.
Gracias, David, en mi caso y desde hace casi dos años siento un estado de completitud que me permite vivir sin necesitar. Supongo que es eso a lo que llaman "vivir en conexión con la fuente". Me alegra que existan personas, como usted, que hayan experimentado esa cosa que no se entiende pero que se siente tan pura que es cuando un@ comprende lo que es la verdadera riqueza.
Con cariño,
¡un abrazo de luz!