Arcángel Rafael Y Arcángel Miguel: Digan «¡Sí!»
Canalizado por Linda Dillon, 2 de febrero de 2019
Dulces ángeles, ¿están listos y dispuestos a aceptar?
Arcángel Rafael:
Saludos. Soy el Arcángel Rafael. Bienvenidos, amados hermanos. Sí – sanadores, médicos, creadores, expansores.
Y vengo a hablar con ustedes – sí, por supuesto, todo el mundo está presente – pero también vengo a hablarles de la sanación del corazón humano, del alma humana, de la psique humana, del colectivo de este magnífico y hermoso planeta llamado Gaia porque, como bien saben, mi misión, mi servicio… mi amor por la Madre es ser su Sanador – y esto incluye a este colectivo, este planeta, esta galaxia, esta sección, esta parte de su cosmos infinito y eterno.
Ahora, no vengo hoy porque hay una situación urgente emergiendo, no es que el colectivo esté en la sala de emergencias – ¡aunque muchas veces hemos deseado que realmente lo estuviera!
Vengo porque hay un cambio en el reino de la conciencia humana, como nuestra amada Madre ha dicho, y el cambio a la conciencia de crear y co-crear con los reinos visibles y no visibles, de la materialización -el traer a la fisicalidad– lo que se ha trabajado, orado, en el reino invisible por tanto tiempo.
El cambio de conciencia es saber que pueden crear, co-crear, manifestar en el mundo físico.
Y este es un avance significativo, particularmente, podría decirse, para aquellos Gaianos que están despiertos y que están en un lugar de equilibrio al asumir su Autoridad Divina, su derecho de nacimiento divino, en los niveles más profundos de humildad y compasión, excitación, exuberancia y acción.
Ahora bien, ¿por qué yo, como Arcángel de la Sanación del Rayo Esmeralda, del Centro del Corazón, por qué hablo de esto? Porque es vibratorio y este es el tema que ha estado emergiendo últimamente y una mayor comprensión de la necesidad de que la vibración -la frecuencia- de la raza humana se eleve, se despeje, «desempolve» y eleve.
Es necesario que la frecuencia de la humanidad se eleve.
La Madre ha enviado sanación a este glorioso planeta y al colectivo de la raza humana. Y permítanme decir, con toda modestia, que esta sanación ha realizado un trabajo notable en la mejora de la vibración colectiva humana.
Pero los de ustedes que son médicos, mis amados hermanos, entienden -y por eso les hablo de esto, de este día, porque también sé que lo compartirán- que hay un punto en el que el paciente, el receptor del tratamiento, necesita decir «sí», que tiene que haber una elección de libre albedrío, este abrazo voluntario y la aceptación de la sanación.
El paciente tiene que aceptar la sanación.
Y, en este caso, lo que llamamos «sanación» es simplemente la elevación de la vibración humana. Y en ese «sí» de los humanos – y, si me permiten decirlo, de la comunidad de trabajadores de la luz y poseedores de amor – lo que están haciendo es convertirse en la encarnación del Nuevo Tú, del Nova Ser, de reconocer la divinidad y permitir que se active lo que siempre ha descansado en su interior.
Es como una ceremonia de graduación donde los estudiantes dicen: «Sí, he aprendido lo que necesitaba aprender, he hecho mis deberes, he hecho mis ensayos y estoy preparado y doy la bienvenida al siguiente escalón de la espiral sagrada, al siguiente nivel, para comprometerme plenamente con lo que está por venir»… no pasar el tiempo simplemente rumiando acerca de lo que ha ocurrido o no, acerca de lo que ha ocurrido en el pasado.
La sanación es la elevación de la vibración humana.
Aprender esas lecciones, ganar esa perspicacia, pero avanzar hacia la vibración más elevada porque en esa vibración más elevada, en la vibración que llamamos amor, el potencial y la realidad de ser capaces de crear más – y podría incluso decir «más con menos» – está totalmente presente…. no sólo parcialmente presente, sino plenamente presente.
Así que el abrazo profundo de las vibraciones superiores es y ha sido un regalo para cada uno de ustedes, y para toda la humanidad.
La pregunta que les hago es: «Dulces ángeles, ¿están listos y dispuestos a aceptar?»
Como Arcángel de la Sanación, sé, amados amigos, que la respuesta de muchos es «¡absolutamente, sí!» No hay lugar para los viejos paradigmas de falta o limitación, vergüenza o culpa o miedo o ira – o cualquiera de estos.
Ya no hay lugar para los viejos paradigmas limitantes.
Y mientras dicen «sí» – piensen en ello de esta manera: están diciendo «sí» para millones de personas que no entienden tan bien como ustedes que la elección consciente es parte del proceso y también es parte del camino y de la recompensa.
Así que se lo agradezco, amados. Lo están haciendo muy bien – a pesar de todas las probabilidades, no conocen el significado de rendirse. La perseverancia – y digo esto como alguien que ha servido a la Madre por siempre – la perseverancia es un regalo poderoso y la calidad, la fuerza, el coraje, la consistencia que han practicado es estelar.
La perseverancia es un regalo poderoso.
Hay grandes cambios ocurriendo en su planeta. Tal vez lo más significativo sea, digamos, la obvia llegada de su Familia Estelar y sus amigos – no como un botín escondido en el suelo, sino como un avance en la plenitud de su «rama de olivo» y su ofrecimiento de comunidad y unidad, de amor, de amistad, de cooperación, de compartir tecnología y sabiduría…. y las historias, los cuentos, el compartir de lo que yace más allá de lo que la gente llama las galaxias.
La familia estelar está llegando con su sabiduría.
Y así, amado hermano, estoy con ustedes y estoy con la totalidad de la humanidad. Este es el tiempo en el que doy un paso al frente en nombre de la Madre y nosotros resucitaremos y ustedes resucitarán, y todo está en orden -todo está en desarrollo- no como un horizonte lejano, sino ahora mismo.
Por eso he venido. Se puede notar…. No hablo con frecuencia – sólo cuando es necesario. Y ahora es una de esas veces.
Son profundamente amados, honrados y respetados. Los quiero, amigos míos.
Arcángel Rafael
Arcángel Miguel:
Saludos – Yo soy Miguel.
Bienvenidos a todos ustedes. Han sido fieles, amigos míos. Y sí, lo sé, están agotados. Y por eso llego hoy, no para luchar, sino simplemente para alimentarlos, quizás para tocar mi arpa o para invitarlos a escuchar conmigo a los coros celestiales, porque su sonido y su luz pueden curar y elevar desde el alma cansada hasta la más agotada.
Cuando mi hermano Rafael habla de elevar las vibraciones, no está añadiendo una tarea, un trabajo, otra misión, porque esto es tan natural como respirar. Pero es la conciencia, es la conciencia de cada uno de ustedes como seres soberanos independientes que tienen el derecho – y la elección – de simplemente aumentar su frecuencia, y que están en un punto de conciencia, de despertar, donde esto es realmente capaz de ser elevado por una elección y decisión consciente.
Elevar la vibración es tan natural como respirar.
Es una elección que se basa en la conciencia de asociación, de unidad con nosotros en la más dulce armonía de nuestra Madre, de nuestro Padre, del Uno. Por lo tanto, no es una acción o una empresa que requiera esfuerzo, sino que lo que requiere es un punto de elección y decisión y un «sí».
Y a ti y a mí y a todos los que servimos – es inconcebible que no digas «sí», porque el anhelo más profundo de tu corazón y de nuestro corazón es el de elevar a un ritmo vibratorio que es la armonía – es la canción – de la Nova Tierra.
El anhelo más profundo del corazón es elevar la vibración.
Así que deseaba también elaborar y aclarar más este aspecto de elevar las vibraciones – se debe hacer en la alegría, en la risa y en la dulzura. Es como si acabaras de ser invitado y estuvieras en marcha, o quizás incluso asistiendo, a la coronación -no de alguna deidad o monarca distante- sino de la autonomía, la soberanía de tu alma.
Arcángel Miguel
TRADUCTORA: Carolina, redactora de la gran familia de hermandadblanca.org
FUENTE: Linda Dillon(2019) Archangels Raphael and Michael say yes. https://counciloflove.com/2019/02/archangels-raphael-michael-say-yes/