Dr. Strange: Hechicero Supremo

Si es verdad que puede parecer extraño escribir acerca de una película producida por la franquicia MARVEL en lo que se refiere a la secuela de Hollywood de muchos héroes del corte de: Iron Man, Thor, Odin, Capitán América o Los Vengadores.

Lo interesante en éste caso es la historia que se plasma en la película y la muestra que hace de los poderes aparentemente sobrenaturales del Héroe el  Dr. Strange.

El Dr. Strange es un médico inicialmente exitoso en su profesión, reconocido en el campo de la neurocirugía, pero que un grave accidente le hace recurrir, para curarse, a las culturas de oriente (Nepal),  para inicialmente descubrir el alivio de una lesión física y en un segundo plano  darse cuenta de una lesión más profunda en sí mismo que es la emocional y espiritual.

 En ésta película podemos encontrar una vasta muestra de los estudios profundos que se han hecho acerca de los poderes de la meditación y el retiro en la vida ascética o monástica. Se ilustra de manera breve la existencia del cuerpo astral (alma o conciencia en otras tradiciones), la manipulación de la energía para sanar y encontrar el equilibrio interno y externo y sobre todo lo más importante, el poder sanador de la mente cuando se trabaja de manera correcta y continúa.

Se pone de manifiesto el manejo del calor o energía en el cuerpo y el desarrollo de poderes que parecen resultado de la práctica de hechizos y conjuros, cuando la realidad es que todos podemos realizar esas enormes habilidades si nos  descubrimos y nos dedicamos a conocer el poder ilimitado de nuestra mente.

En la Historia de algunas culturas de oriente se han documentado habilidades de grandes meditadores o yoguis muy realizados, que por ejemplo con la práctica del TUMO o fuego interno, pueden resistir muy bajas temperaturas sin nada que los proteja del frío, solamente una gran concentración y dominio de sus canales de energía interna, la que corre a través de su cuerpo y se considera como un cuerpo sutil, por así decirlo, constituído de muchos canales y nudos energéticos, es sorprendente pero no es resultado de hechizos, en el fondo todos tenemos el potencial de realizarlos, con muchos años de práctica y dedicación.

Lo importante es destacar que las personas que han obtenido estos logros resultado de su práctica espiritual y emocional no los consideran útiles sino los dirigen u orientan al beneficio de los otros, lo que se conoce como el espíritu altruista de la Bodichita, que es dedicar tu vida, esfuerzo espiritual y los logros resultantes en beneficio de los demás seres sin distinción.

De alguna manera se entiende que si puedes estabilizar tu cuerpo energético, puedes curarte en lo físico o espiritual y curar también a los demás seres que te rodean, no debe ser utilizado en el beneficio de sí mismo, debe ser dado a los otros sin egoísmo o espera de retribución.

Por ejemplo, muchos maestros de oriente pueden controlar el proceso de morir para asegurarse de continuar, en otra vida,  siendo de beneficio a los demás.

Así que en éste caso podemos extraer de una película que aparentemente es superficial una base espiritual, que no es del todo ficción ya que sucede en oriente, solamente que en éste caso debe estár dirigida de manera exclusiva al beneficio de los demás, sin afán de lucro o presunción.

En el Tibet se le conoce a éstos seres realizados como Bodhitsatvas o “Heróes y guerreros espirituales” que existen entre nosotros pero con una intención bondadosa y compasiva, con grandes realizaciones que no son para nada las de Hollywood, pero se agradece que los  exhiban en una película de corte comercial muy bien documentada y estudiada, apegada lo más posible a la realidad que existe en las culturas de oriente desde ya muchos siglos atrás. Es una buena opción y deleite  para los estudiosos de los poderes de la meditación y el desarrollo interior.

AUTOR: Pilar Vázquez, colaborador de la gran familia de la Hermandad Blanca