¿El Efecto Mozart realmente te hace más inteligente?

Todos hemos oído acerca del «Efecto Mozart», el concepto de que escuchar música clásica a una edad temprana ayuda a que los niños sean más inteligentes. Del mismo modo, durante mucho tiempo se ha considerado que el aprendizaje de un instrumento musical también ayuda a desarrollar el cerebro de manera diferente, y puede mejorar la capacidad de las matemáticas en particular. 

El investigador francés Dr. Alfred Tomatis inventó la frase «Efecto Mozart» en 1991. Su libro, Pourquoi Mozart?, se basa en treinta años de trabajo con el aprendizaje de los niños con discapacidad y exploró la amplia aplicabilidad de Mozart. Dijo tener adultos en los que ha ayudado a combatir la depresión, aprender idiomas extranjeros más rápido, desarrollar mejores habilidades de comunicación, y mejorar tanto la creatividad y el rendimiento en el puesto de trabajo.

Algunos músicos, cantantes y actores también afirman haber encontrado útil al haber afinado sus habilidades artísticas. Tomatis escribió 14 libros y numerosos artículos. Sólo unos pocos han sido traducidos al inglés.

En los Estados Unidos el concepto fue escrito por primera vez acerca de un artículo de 1993 escrito por Frances Rauscher y Gordon Shaw. Se informó que la exposición breve (8-10 minutos) a una sonata de Mozart de piano produce un aumento temporal en las puntuaciones de razonamiento espacial, que asciende al equivalente de 8-9 puntos de CI. 

Durante los próximos años, el trabajo de investigación se ha mencionado en varios periódicos, incluyendo el New York Times y Boston Globe. 

En 1998 Zell Miller, gobernador de Georgia, anunció que su presupuesto estatal incluiría $ 105,000 al año para proporcionar a todos los niños nacidos en Georgia una cinta o un CD de música clásica. Es evidente que creía en el Efecto Mozart y su relación con la música y la capacidad mental. Ha habido numerosos estudios para aprobar y desaprobar esta teoría, pero al final una persona tiene que ser su propio juez. 

El efecto Mozart se hizo popular a través del libro de Don Campbell, «El Efecto Mozart» en 1997. La teoría básica es que escuchar música de Mozart aumenta temporalmente la capacidad del cerebro para generar y conceptualizar soluciones a los problemas en varios pasos. Los beneficios para curar el cuerpo, fortalecer la mente, y desbloquear el Espíritu Creativo también se refiere en su libro. 

A pesar de la controversia sobre esta teoría existe considerable evidencia que apoya una relación entre el sonido y la música para aumentar el aprendizaje y la capacidad humana. 

Hay una serie de estudios que se han realizado para justificar la eficacia de escuchar música de Mozart en la mejora de nuestras funciones cerebrales esenciales, el pensamiento y el aprendizaje específico.  Pero Glenn Schellenberg, profesor de psicología en la Universidad de Toronto, ha desmentido tal creencia.

Él afirmó que escuchar a Mozart puede ser emocionalmente, relajante y agradable de escuchar, pero no hace nada más que surgir por los niveles de dopamina en el cerebro, algo que comer chocolates también pueden hacerlo.

Así que escuchar a Mozart realmente no hacer que una persona más inteligente, según Schellenberg.

Sin embargo, al Efecto Mozart se le atribuyen muchos beneficios, entre los que se encuentra:

• Epilepsia

La investigación ha demostrado que Mozart puede reducir la actividad del cerebro implicada en la epilepsia. Una teoría es que los efectos pueden ser debido a la repetición de la melodía y periodicidad: formas de onda que se repiten regularmente.  

• Inteligencia

El primer estudio del Efecto Mozart mostró que el razonamiento espacial y la inteligencia aumentan temporalmente después de escuchar la sonata para piano K448, en comparación con las cintas de relajación o silencio. 

• Las pruebas de visión

Las pruebas oculares se realizan con mayor precisión cuando se lleva a cabo con Mozart tocando en el fondo. Los resultados fueron significativamente mejor, con un menor número de resultados positivos o falsos negativos y una mayor concentración y la precisión. 

• La frecuencia cardíaca

Mozart calma los latidos del corazón.Escuchar música puede ser útil en las enfermedades del corazón. Estudios han demostrado que escuchar a Mozart o Bach provocado una reducción de la frecuencia cardíaca y la variabilidad. 

• Estrés

La evidencia anecdótica ha sugerido que escuchar a Mozart puede aliviar el estrés en los bebés recién nacidos. Mozart al ser reproducido a través de un pequeño altavoz en la incubadora de bebés, es posible notar las reacciones de estos con respecto a la música. 

AUTOR: JoT333, redactora de la gran familia de hermandadblanca.org