El Oráculo de Delfos
¿Quién no ha oído hablar alguna vez del Oráculo de Delfos? Tanto los amantes de la historia clásica como cualquier persona, sabe de la existencia de esta mítica presencia en la antigua Grecia. ¿Qué hay de cierto y de verdad en su leyenda? Vamos a descubrirlo.
Delfos, una ciudad mítica de la antigua Grecia
Delfos fue una mítica ciudad de la antigua Grecia todavía existente. Se ubica en la zona del valle del Pleisto, a la vera del monte Parnaso. Pero no siempre tuvo este nombre. Anteriormente fue conocida como Pito, en tiempos de la guerra con Troya. Posteriormente se llamó Pitón, al igual que la serpiente de la madre tierra Gea, quien aguardaba pacientemente con el oráculo de la diosa Temis.
Así pues, el principal origen del Oráculo de Delfos, en su versión mítica, se produciría cuando Apolo fundó su propio oráculo en la ciudad tras matar a la serpiente Pitón. Luego apareció en forma de delfín ante navegantes de Creta, quienes fueron los primeros sacerdotes. Estos afortunados marinos fueron conducidos al Golfo de Corinto, y después al monte Parnaso.
Estos primeros sacerdotes llegados al Parnaso fueron quienes rebautizaron la ciudad como Delfos. Tal evento tuvo lugar por petición del mismo dios. Más tarde encargó ser venerado como Apolo Delfino.
Según la leyenda, el primer templo para honrar al dios griego se levantó a base de arbusto consagrado por Apolo y laurel. Después se construiría otro fabricado en plumas y cera de abejas. Finalmente hubo un tercero compuesto por bronce, que cayó víctima de un terremoto. El cuarto y definitivo fue obra de dos arquitectos, Trofinio y Agamedes.
Así fue el legendario origen del Oráculo y de la propia ciudad de Delfos. De hecho, en sus fronteras se practicaban cada cuatro años los Juegos Píticos. Estos rivalizaban con los mismos Juegos Olímpicos, por lo que no coincidían en tiempo. Como premio a los vencedores, se otorgaban coronas de laurel. Y también hubo incluso certámenes musicales. Es decir, que este fue un centro cultural muy importante en la antigua Grecia.
Cómo era el Oráculo de Delfos
Una vez nos hemos situado en la historia de la ciudad y su importancia histórica, cabe preguntar cómo era el Oráculo de Delfos. Hasta nosotros ha llegado una imagen más bien mágica, casi mítica. Sin embargo, este lugar existió realmente en su época.
El Oráculo se situaba en una profunda cueva de entrada estrecha y costosa. Al final se encontraba un enorme trípode sobre el que se sentaba la Pitia, persona que recibía inspiración divina para dictar las respuestas.
El Oráculo de Delfos fue en su día el más famoso del planeta. Estaba situado en el centro del mundo, conocido como ónfalos. Así pues, en aquel lugar antiguo se aventuraban personas de todas las nacionalidades para recibir información sobre su destino, pues era prestigioso y muy respetado. Es más, allí se guardaron enormes botines de guerra y tesoros.
También resulta llamativo el origen de la situación del Oráculo en Delfos. Según se sabe, fue por la cabra. Este era el animal que más se sacrificaba en honor a Apolo, y estas abundaban en aquella zona, fue descubierta la cueva por casualidad. Así pues, se cuenta que las cabras quedaron atrapadas tras un terremoto, y mientras balaban, un pastor acudió a ver qué ocurría. Dicho pastor fue poseído y predijo diversos sucesos del futuro. Y así fue que se concluyó que quien pasaba por allí era también poseído por un poder que venía de la mismísima Gea.
Sin embargo, dada la atracción de la gruta, muchos se precipitaban en su profundidad. Así que se designó una pitonisa para las profecías. Curiosamente, comenzaron usando chicas jóvenes y vírgenes. Pero tras varias violaciones, se decidieron por mujeres mayores y poco agraciadas.
Como es de imaginar, el enorme prestigio del Oráculo de Delfos llevó hasta su gruta a grandes reyes y personajes célebres en su día. El momento de consulta eran el 7 de cada mes, fecha del nacimiento de Apolo.
Por Pedro, redactor de la Gran Hermandad Blanca, visto en Delfos y Apolo
Miquel no te despistes más xd que tienes faena jajajajajaja
Shanty gracias
MUCHAS GRACIAS