El poder del Enfado sobre ti

En esta ocasión Uriel habla sobre el ENFADO. Comparto la canalización recibida para ayudar a una persona a comprender las emociones de ira que se estaban repitiendo a lo largo de varios días.

Soy Cristina Acebrón canalizadora y Coach Transpersonal, y me dedico a ayudar a personas a desarrollar su intuición y a conectar con su Guía Espiritual. El Enfado es una de las emociones que más nos desmotivan ya que sacuden con fuerza nuestro interior, despertando muchas emociones adicionales. Espero que te ayude a comprender y sanar tu interior.

PREGUNTA: Hace tiempo que noto que me sube con mucha facilidad un enojo constante y necesito ayuda. No me gusta perder el control. Además entro repetidamente en un ciclo de rabia, en repetir las mismas cosas para mis adentros y luego en sentirme mal. ¿Qué puedo hacer?

RESPUESTA CANALIZADA:

Saludos mi querida te habla Uriel. Notamos el cambio creciente en tu interior donde desarrollas raíces de rencor. Sientes una pasión que va llenando todo tu ser y no te muestra más que odio, enfado, desilusión, y te preguntas ¿por qué me siento así?

En el fondo hay un sentimiento de no valer suficiente, de no poder con la presión que tú misma te estás imponiendo. Además hay una lucha interna y una búsqueda de cariño que te hacen enfadarte aún más.

Esa actitud te hace despertar las alertas y te das cuenta de que no eres así, y sin embargo no puedes conectar con la paz.

Hay conexiones que tienen que ver con tu alimentación, que están desarrollando lazos de odio y rencor. Al igual que los tics que padeces en tus ojos, te hablan de falta de aceptación.

La alimentación deberá empezar a ser más ligera, para que no haya digestiones eternas de días. Sabes bien que los lácteos no te ayudan, sino que te ralentizan y generan pus en tu interior. Las digestiones pesadas con muchos de los alimentos que amas, simplemente por costumbre, es importante que lleguen a su fin. Esa sensación de vacío está propiciada por buscar algo que siempre te haga sentir llena, que no plena

Esa es la sensación que buscas internamente en tu vida, poder hablar de algo, tener algo en mente, algo que hacer todo el tiempo. Y cuando no hay nada que hacer, entonces te sientes perdida, ya no hay velocidad, ya no hay una sensación de no llegar

¿Y qué hay de la calma? ¿no es momento ya de bajar la exigencia? Has preparado diferentes horarios que te permiten desarrollar tu capacidad, estudiar y trabajar a un ritmo adecuado, pero siempre encuentras algo más que hacer y que añadir a tu interminable lista de cosas necesarias y urgentes.

Cuando te olvidas de vivir, de salir afuera y de compartir con los demás. Cuando sientes que los demás entran en tu vida, sientes que van a juzgarte y tu miedo sale a la luz. Miedo a no ser aceptado, a ser comparado … a que no te amen.

Sientes que las personas se alejan de ti, y eso te hace que tú misma pongas kilómetros de distancia. Incluso sientes que al nombrártelo te estamos juzgando. Estás en un punto donde todo te hace daño.

Mi querida niña, estamos aquí para ti, tan sólo tienes que conectar con esa ilusión de niña pequeña cuando todo estaba bien y cualquier cosa te servía para divertirte.

El momento de estar sola ya debe pasar, para permitirte evolucionar. No seas tan exigente contigo misma, permítete aprender, fluir, reír, incluso equivocarte y aceptarlo y reconocerlo, que es algo que te da pánico

El proceso del enfado interno que tienes no es más que una coraza fácil que te pones, que te protege de ser consciente que las opiniones de los demás te duelen. Que tú misma te comparas con los demás y que eres la primera que no te amas y te aceptas como tal. Que sientes que estarías mejor a kilómetros de distancia del mundo, cuando en el fondo lo que te encantaría es sentir el calor de los demás.

Acabará cuando te aceptes y dejes de correr buscando soluciones externas que no implican el adentrarte en tu interior.

Mi querida niña, estamos entrando en tu corazón en este momento, colocando pedazos de energías que hacen de tiritas espirituales que sanan tus heridas.

Cada día decide que es un momento adecuado para ser tú misma, elige una faceta de ti misma y estúdiala. Lo que veas que no te gusta, anótalo y durante un par de semanas observa cuando esa actitud sale, para amansarla diciendo para tus adentros “AMOR”.

Piensa en nosotros, estaremos contigo durante ese proceso de autoaceptación, y con el tiempo, el enfado desaparecerá.

Con cariño se despide tu amigo Uriel.

Canalizado por Cristina Acebrón Guirau

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