El rol del cuerpo físico en el proceso de ascensión

La sanadora Sarah Elkhaldy comparte su punto de vista acerca de la importancia del cuidado del cuerpo físico, el vehículo que ahora nos acompaña en este proceso de ascensión. En nuestras se células se guarda una gran cantidad de información, y el cuerpo en sí, es un maravilloso receptor y transmisor de energía.

«Muchos de nosotros hemos tenido aversión a la forma humana y algunas dificultades para aclimatarnos a la vida tridimensional, que se han manifestado, de una forma u otra, como enfermedad.

Hay aspectos positivos de una enfermedad que no se reconocen fácilmente, debido a la gran cantidad de dolor que trae consigo. Uno de los aspectos infravalorados de la enfermedad es que nos enseña a cuidar adecuadamente nuestro vehículo físico.

Personalmente, sé que si no fuera por mis propias condiciones de salud, que he sufrido a lo largo de los años, no sería tan consciente de mi salud como lo soy hoy, ni sería tan útil a los demás en mi desempeño como sanadora.

Es innegable que muchas lecciones importantes de la vida nos llegan a través del cuerpo físico. Fuente: Pixabay.

Imagínense el éter como un mar de conciencia formado por diferentes ondas de radio. Estas ondas de radio se transmiten en infinitas versiones de la realidad, o «estaciones de radio». Cada estación transmite una versión diferente de la realidad.

El proceso de ascensión es la elevación de nuestros cuerpos a una estación de radio diferente, es decir, otra versión de la realidad. Esto incluye cambiar todo nuestro ser a una fase diferente de conciencia.

Este proceso incluye todos nuestros cuerpos: el físico, emocional, mental, etérico y espiritual. No servirá de nada repeler el canal en el que estamos. Se trata simplemente de dejar de estar magnetizado en este canal.

Cuando ya no hay necesidad de que un ser aprenda sus lecciones en esta estación de radio, el canal naturalmente se cae.

El papel del cuerpo en el proceso de ascensión es el de guiarnos hacia estados superiores de conciencia, y lo hace maniobrando a través de ciertos caminos que conducen a un despertar espiritual.

La enfermedad nos redirige. Muchas veces, nuestro Ser Superior utilizará la enfermedad como un medio para sacarnos de nuestra identidad y cambiar nuestra conciencia.

Por eso también parece que tantas personas que despiertan terminan con enfermedades misteriosas. Aunque el despertar es continuo y sin un final previsible, es completamente posible despertar en la medida en que esta densidad nos lo facilite.

Negar que la conciencia es un espectro que consta de una miríada de fases es, en el fondo, negar que el crecimiento pueda tener lugar en absoluto. De hecho, el propósito de esta vida para muchas almas es despertar a la naturaleza multidimensional de la realidad.

Las lecciones que aprendemos a través del cuidado de nuestro cuerpo amplían nuestra comprensión del mundo en el que vivimos, incluidos los muchos perjuicios encubiertos a nuestra salud, así como por qué existen estos perjuicios en primer lugar.

Para muchos, su despertar espiritual comienza con una sensación no tan espiritual en absoluto. Se produce al tirar de un solo hilo de información y descubrir que se desentrañan más cosas de las esperadas.

Dado que el cuerpo es el vehículo que facilita nuestra ascensión, parte de la evolución incluye aprender a cuidar la embarcación física.

Todos hemos escuchado decir que el cuerpo es un templo, aunque a veces puede ser difícil tratarlo literalmente como tal.

Nuestro templo necesita una cantidad adecuada de recursos para llevar a cabo sus funciones. Para empezar, el cuerpo físico debe ser lo suficientemente fuerte para integrar el influjo masivo de energía de los reinos superiores.

A partir de esto, podemos ver que una gran parte de cultivar el amor propio proviene de nuestra capacidad para tomar decisiones y llevar a cabo acciones que produzcan salud y vitalidad.

Podemos desarrollar una tendencia inocente y con buenas intenciones de concentrarnos en las actualizaciones de nuestro campo energético sin haber aprendido antes a escuchar a nuestro cuerpo y satisfacer sus necesidades.

Un mantra importante que he aprendido de mi propio viaje de sanación es:

«Dale al cuerpo lo que necesita antes de que tenga que pedirlo»

Una vez que el cuerpo necesita pedir algo, ya está operando desde un lugar de angustia y se ha desarrollado un síntoma. Con todas las toxinas modernas con las que nos encontramos, es fácil dar por sentado que nuestro vehículo físico está bien, hasta que se agota o se encuentra con una crisis de curación.

Al igual que es muy poco realista esperar que una persona que está experimentando un cambio de paradigma opere desde el mismo nivel de conciencia durante toda su vida, es tan poco realista esperar que el cuerpo funcione de manera óptima sin el apoyo fundamental que requiere para hacerlo posible.

Como sanadora energética, doy recursos a mis clientes para que puedan mantener su régimen de autocuración.

Cuando el campo de energía del cliente se aborda como una composición holística de cuerpo, mente y alma, entonces las mejoras que recibe pueden integrarse a nivel celular sin sobrecargar el cuerpo físico.

Por ejemplo, cuando un cliente acude a mí por problemas de ansiedad, lo primero que pregunto antes de entrar en algo esotérico es si puede tener deficiencia de zinc, así de importante es el papel que juegan los minerales en nuestra salud en general.

Las emociones atrapadas tambén pueden afectar la capacidad de nuestro cuerpo para absorber nutrientes. La producción adecuada de ácido estomacal es absolutamente vital para varias funciones diferentes en el cuerpo que parecen no estar relacionadas con el intestino, como el sueño, la producción de neurotransmisores y el crecimiento del cabello, por nombrar algunas.

El cuerpo físico y el espíritu se integran armoniosamente para conducirnos por el camino de la ascensión, por ello es de vital importancia el cuidado adecuado de nuestra salud. Fuente: Pixabay.

Estas breves descripciones muestran un vistazo de cuán multidimensionales son los factores que contribuyen a la integridad o el agotamiento del sistema cuerpo/mente.

Otro papel importante del cuerpo físico es su capacidad de almacenamiento. La red capilar entera por sí sola tiene un propósito metafísico, como guía de ondas para las señales infrarrojas.

Desde nuestras células sanguíneas hasta las cavidades de nuestro cerebro, el cuerpo es una tecnología sofisticada que recibe y transmite energía electromagnética.

Las huellas kármicas también se mantienen dentro de las células de nuestro cuerpo, y es a través de la limpieza de estos traumas que podemos transmutar la forma humana en grados superiores de luz.

Por esta razón, el proceso de ascensión activará todos los temas de esta vida y de las vidas pasadas, que guardan el sufrimiento en nuestra memoria celular para que sea procesado conscientemente, a nivel visceral.

Esto significa que nos sentiremos atraídos por situaciones arquetípicas, en las que desempeñamos cada papel en medio de una dinámica que refleja un conflicto, el cual se ha mantenido dentro del incesante flujo de nuestra alma.

Para que el alma sane, nos movemos en cada uno de estos roles y así experimentar cada percepción con respecto al tema.

En realidad, lo que usted está haciendo es buscar el equilibrio para poder neutralizarlo. Por ejemplo, podemos tener mucha experiencia como víctimas de una polaridad, por lo que pasamos inconscientementeal papel del perpetrador, hasta que esa dinámica de poder se exorciza en la conciencia.

La evolución espiritual se mueve en un movimiento en espiral donde revisamos nuestros temas generales, cada vez integrando un poco más de nuestro ser, profundizando nuestra comprensión y cambiando nuestro punto de vista.

El viaje del karma al dharma se facilita mediante el don del cuerpo físico»

Autora: Sarah Elkhaldy

Puedes ver el artículo original haciendo clic en el siguiente enlace:

https://wakeup-world.com/2021/05/14/the-physical-bodys-role-in-ascension/

Traductora: Fanny Zapata, redactora y traductora de la Gran Familia de La Hermandad Blanca en hermandadblanca.org