Historias reales de vida después de la muerte: La experiencia de Unidad y Amor, vivida por Joan LH

«Me sentía como si yo fuera parte de ese Amor, y él fuera parte de mí, aunque era mucho más que sólo yo. Me sentí liviana, sin peso alguno y completamente libre.»
– Joan LH

En la vida hay algo que no podemos evitar. La gran certeza, y es el saber que tarde o temprano, a todos nos llega nuestra hora. La muerte nos aterra, porque sabemos que pasará algún día.

Históricamente, siempre hemos buscado respuestas sobre lo que nos espera del otro lado, y sólo algunos afortunados pueden darnos esa respuesta. Unos elegidos han sido bendecidos y pueden contar historias reales de vida después de la muerte. Y tal es el caso de Joan LH.

La historia de esta mujer nos demuestra que estamos en constante contacto con una realidad que sobrepasa lo mundano. Y esta es sólo una de muchas historias reales de vida después de la muerte.

Estos relatos nos llevan a pensar en lo que nos espera. Y nos ayudan a repensar todo aquello que vivimos día a día.

¿Cuáles son los valores que estamos replicando?¿A qué le damos realmente importancia?

Como Joan, otras personas que también han vivido una experiencia cercana a la muerte (ECM) reconocen que esto cambió radicalmente el curso de sus vidas. Pero no todos pasamos por esas vivencias. Así que puedes estar toda tu vida esperando que algo fuera de lo normal suceda que te obligue a encaminar tu existencia. O puedes simplemente reflexionar y rehacer tu camino.

Leyendo historias reales de vida después de la muerte te aseguro que puedes encontrar algunas de las respuestas más perseguidas por la humanidad. Así que en esta oportunidad vamos a compartir una de ellas.

A los 25 años, Joan LH era lo que ella consideraba una persona llena de vida. Gozaba de buena salud, vibraba. Hacía dos años que había recibido su título de licenciada en Teología. Aunque pagaba las deudas de sus estudios trabajando para McDonalds.

Contrario a lo que uno podría pensar, ella disfrutaba de ese trabajo. Tenía muchos amigos y su trabajo le permitía la estabilidad financiera que necesitaba. Incluso hizo planes para regresar a estudiar, pues su vocación de servicio ahora la llamaba a ser enfermera certificada.

Aunque, ella nos cuenta, para eso necesitaba solucionar un problema de debilidad en sus tobillos. ‘Podía estar de pie un instante y el próximo en el suelo’ relata Joan. Y aunque este inconveniente la llevaba a caerse de imprevisto con mucha frecuencia, nunca lo consideró realmente importante. Sin embargo, como enfermera no podría permitirse ese riesgo.

Así que hizo planes para lo que según los médicos sería una operación simple para ajustar un tendón lateral en el tobillo izquierdo. Pero ella no sabía que esa cirugía simple la llevaría a estar entre las historias reales de vida después de la muerte más destacadas.

Lo que ella recuerda de su hospitalización es el estar haciendo el papeleo para la admisión. Describe lo cómoda que se sentía sentada en esas sillas, la habitación de madera oscura y lo divertido de ser trasladada en una silla de ruedas por una de las niñas voluntarias. Lo que sigue sólo puede saberlo por relatos de las personas que fueron con ella.

Joan nos cuenta que según le fue relatado, sus padres y amigos la esperaban en la sala de espera del hospital cuando por los parlantes de la sala de operaciones se oyó una llamada de urgencia. La madre luego le confesaría que ya sabía que se trataba de su hija.

Estando a punto de finalizar la operación, con el tendón completamente reparado, algo salió terriblemente mal con la anestesia espinal que le habían aplicado. En lugar de actuar solamente en sus miembros inferiores, la anestesia subió por su cuerpo afectando directamente a su corazón y sus pulmones.

Así fue trasladada a la Unidad de Cuidados Intensivos, pasando al frente de su familia en una camilla.

Esta es una de las historias reales de vida después de la muerte más impresionantes, pues estuvo entre 5 y 8 minutos sin oxígeno antes de poder ser estabilizada. Y para entonces, los médicos dudaban que llegara a tener una vida normal.

Durante su segundo día del coma, su hermano menor, con el que tenía una relación de mucha cercanía, fue a visitarla. Y en medio de un ataque, él comenzó a pedirle a gritos que volviera, que no lo dejara solo. Y nos cuenta Joan que esto fue el disparador de que lentamente comenzara a recuperar su conciencia. Despertó del coma y de a poco fue recuperando su movilidad hasta lograr controlar todo su cuerpo nuevamente. Reconocía  a las personas, entendía completamente quién era y era capaz de responder a preguntas simples. Lo único que reporta notar afectada es su capacidad de lectura y su memoria. Pero lo que vivió ese día queda grabado en sus recuerdos.

Conociendo otras historias reales de vida después de la muerte, Joan reconoce que la suya fue diferente. ‘Yo simplemente tuve una experiencia profunda de Amor, Libertad y Unidad.’

Nos cuenta que no vio luz, ni túnel alguno. También recuerda no encontrarse con ningún ser iluminado, ni revivir momentos de su vida. Más bien, recuerda, se trataba de sentimientos e impresiones.

Recuerda la sensación dejar su cuerpo atrás para encontrarse en un lugar de Amor absoluto. Cuenta la sensación de sentirse parte de ese todo, aunque también podía reconocerse como una unidad independiente. ‘Me sentía como si yo fuera parte de ese Amor, y él fuera parte de mí, aunque era mucho más que sólo yo. Me sentí liviana, sin peso alguno y completamente libre’.

Una y otra vez hace referencia a estar en un estado de conexión total con el Universo, un lugar donde no existía el tiempo, donde se experimenta nuestra verdadera esencia de Amor. Nos habla también del hecho de encontrarse con la Sabiduría Absoluta. ‘Simplemente supe cosas, sin oír ni una sóla palabra’.

En ese completo estado de armonía, recuerda también escuchar como una hermosa canción, que la traspasaba. Sin embargo, no reconoce ninguno de sus sentidos activos durante esa experiencia. ‘Era como si todo viniera desde mi interior’.

Las historias reales de vida después de la muerte son siempre una experiencia única en su género. Sin embargo, el vivirlas no garantiza tampoco una experiencia de vida fuera de lo mundano.

‘Desearía decir que nunca más estuve enojada, que no volví a dudar de mi capacidad de vivir, pero esa no es la verdad. La forma humana posee grandes limitaciones y desafíos que son parte de esta existencia. Pero ahora sé que soy mucho más que sólo eso’. De una recuperación milagrosa, reconoce hoy sólo ver secuelas en su habilidad para los números, y sus ocasionales faltas de memoria. Y reconoce, humildemente, que esta experiencia le ha cambiado la vida.

Así podemos ser testigos de las experiencias que superan lo ordinario, y que nos demuestran que en nuestra naturaleza hay mucho más que sólo aquello que podemos percibir a simple vista.

¿Cómo estamos viviendo nuestra vida? Si tú mismo fueras hoy protagonista de una de estas historias reales de vida después de la muerte, ¿qué cosas cambiarías de tu manera de vivir?

AUTOR: Lucas, redactor y traductor de la gran familia de hermandadblanca.org

FUENTE: https://www.nderf.org/Spanish/joan_lh_ecm.htm