Las mascotas: comunicación y sanación con energía
Las mascotas son nuestras compañeras y nos aman y cuidan y hacen lo mejor por nosotros. Ellos saben cuando estamos tristes y alegres porque tienen una gran percepción.
La experta en comunicación animal británica y autora del libro Heart to heart, Pea Horsley, dice que “la comunicación animal, es la forma no verbal de comunicarse con otras especies animales. Los animales se comunican entre ellos, y este es un método para que los humanos nos podamos comunicar también.”
A pesar de haber sido una escéptica en un principio, encontró que la comunicación con los animales, especialmente con aquellos que tenemos una relación de cariño, es posible.
Pea nos dice que lo que hay que lograr es confiar en que podemos entender sus necesidades. Es difícil de aceptar en principio que estamos comprendiendo lo que quieren comunicar, pero hay que confiar en la conexión con nuestra mascota.
En su método, enseña a realizarle preguntas simples y divertidas como: ¿Eres feliz? ¿Te sientes bien? ¿Cómo puedo ayudarte a que estés más cómodo?
Y luego esperar qué sensaciones nos llegan para comprender las respuestas.
Las mascotas y la energía
Durante el transcurso del día vamos acumulando emociones negativas como enojo o tristeza. Cuando no sabemos dejar ir las preocupaciones o las angustias del día, las llevamos a casa al finalizar la jornada.
Cuando llegas a casa tu mascota te recibe, se sienta junto a ti en el sofá, y ocurre un proceso de sanación natural. Tu mascota absorbe tu dolor, y se lleva tu carga, ayudándote a sentirte mejor. Algunos animales están siempre sintonizados con su energía de sanación, porque tan sólo sentarte junto a ellos puede ayudarte a relajarte y estar más confortable.
Abby Wynne, psicoterapeuta chamánica, sanadora energética, autora y profesora, dice que los perros y los gatos son maestros en dejar ir las energías porque no lo asocian mentalmente a ningún problema en particular, como hacemos las personas.
Otras mascotas tienen otros propósitos. Con algunas mascotas no nos sentimos tan cercanos.
¿Cómo retribuirle a las mascotas todo lo que nos dan?
Muchas mascotas se enferman en lugar de sus dueños. Tú puedes ayudarlos a hacer su propio trabajo personal y liberar tus energías negativas que pueden enfermarte a ti y a tu mascota. Cuando te estresas menos y te relajas, el cuerpo busca su propio equilibrio y curación. Llegar a casa con alegría en lugar de estrés es una experiencia muy diferente y también para tu mascota.
Formas de sanación
Existen muchas maneras de utilizar la sanación energética para ti y tu mascota. No hace falta tener un certificado de reiki o cualquier otro entrenamiento. Quienes tienen una práctica espiritual regular y diaria están en mejores condiciones para comenzar, pero todos podemos aprender. Saber curar con energía es un gran alivio para los malos momentos.
A continuación hay un ejercicio fácil que podrás realizar con tu mascota:
- Siéntate con tu mascota con los pies en el suelo y respira.
- Enfócate en el momento presente
- Cuando te sientas presente, permítete visualizar tus cargas de energía emocional, que no necesitas llevar.
- Déjalas que se disuelvan y permítete sentirte más liviano.
- Expira y libera el estrés y la tensión de tu cuerpo. Inspira imaginando que tomas energía de una fuente.
Expira sufrimiento, inspira curación.
- Ahora siente a tu mascota más relajada también, y permite que esa energía que respiras recorra tus brazos hasta tus manos y hacia tu mascota.
Pueden quedarse así por todo el tiempo que quieran, respirando y sanando.
Las mascotas son sanadores naturales, cuando ya haya sido suficiente para ellos, se irán.
REDACTORA: Carolina, redactora de la gran familia de la Hermandad Blanca.
REFERENCIAS:
Pea Horsley. (2016). How To Communicate With Your Pet. 24/10/2017, de Heal Your Life Sitio web: www.healyourlife.com/how-to-communicate-with-your-pet
Abby Wynne. (2017). Energy Healing for You and Your Pets. 24/10/2017, de Heal Your Life Sitio web: www.healyourlife.com/energy-healing-for-you-and-your-pets
Así es, gracias
Mira Jorge Ramirez Beltran
Hermoso, gracias