Las reflexiones de Krishnamurti sobre la educación como actividad religiosa (Primera parte)
Durante la mayor parte de la vida de Krishnamurti, lo que dijo y lo que escribió provocaron por igual interés y controversia. Sus observaciones sobre la religión. Las organizaciones. La tradición. El nacionalismo y las relaciones, frecuentemente iban contra las convenciones del momento. Si hoy en día parecen menos alarmantes, eso se debe al poderoso efecto que tuvieron sus reflexiones en las mentes comunes. Y que para muchos fue evidente que era un adelantado a su tiempo. Pero las reflexiones de Krishnamurti con respecto a la educación siguen siendo radicales y frecuentemente ignoradas, o tachadas de imprácticas. Esto puede deberse principalmente a que Krishnamurti interpreta la educación como una actividad religiosa. En una época en que la mayoría de las personas la ven como la preparación para el éxito en el mundo material. Las personas frecuentemente sólo pueden escuchar lo que esperan o quieren escuchar.
Todos queremos que nuestras opiniones y perspectivas se vean confirmadas. Porque preferimos pensar que ya tenemos la verdad absoluta y que ya lo comprendemos todo.
Esto es una generalidad en lo que respecta a la educación y también en lo respectivo a la religión. La educación moderna está fallando de manera muy evidente en su tarea de resolver los problemas del mundo. Se le critica frecuentemente por fallar en su persecución de las aspiraciones sociales. Y claramente no prepara a las personas para los desafíos de la vida. Las reflexiones de Krishnamurti sobre la educación combinan lo secular con lo religioso. Y de esta manera interpretan los desafíos de la vida y los fracasos de la sociedad en un nivel muy profundo. En el momento en que más se requiere una visión diferente de las cosas. Muy probablemente, estas reflexiones sobre la educación tengan un profundo y poderoso impacto en el mundo.
El interés de Krishnamurti por la educación perduró con apasionamiento a través del tiempo. En el que es quizá, su primer libro “La educación como una manera de servir” (1912), podemos observar su preocupación por la educación y la introducción a algunos temas que continuaron siendo parte de su mensaje. Escuchamos, en la voz de un Krishnamurti de diecisiete años, las experiencias de su corazón cuando escribe:
«Muchas de las sugerencias realizadas en este breve libro, vienen de mis propias memorias de la vida escolar temprana. He experimentado por mi cuenta tanto la manera adecuada de enseñar. Como la manera incorrecta. Es por eso que quiero ayudar a otros a encontrar la manera correcta«
Y por el resto de su vida, trabajó para ayudar a otros a encontrar la vereda correcta para educar. Este camino hacía énfasis en:
1) Las intenciones de la educación
2) La naturaleza física de los lugares en que la educación ocurre
3) La naturaleza de los participantes del proceso de la educación. Los estudiantes y los maestros (y esto implica una visión de lo que significa ser “humano”. Que es bastante diferente de la que se ha formado en las escuelas convencionales).
4) Las actividades en un centro educacional.
Estos cuatro elementos son explorados y descritos por Krishnamurti en términos de religiosidad. Ya que para él, la educación es una actividad religiosa. En estas cuatro características no enfocaremos a lo largo del artículo.
Krishnamurti reiteró las intenciones de los centros educativos que fundó en términos inequívocos y bastante religiosos. “Estos lugares existen para la iluminación de hombre y niños que deben ser educados adecuadamente. De tal forma que puedan convertirse en seres humanos llenos de religiosidad”
De hecho, él insistía en que el propósito de toda la educación es alcanzar la libertad, el amor, el florecimiento de la divinidad y la completa transformación de la sociedad. Comparando estos términos con la mayoría de las escuelas, cuyo objetivo es preparar a las personas jóvenes para tener éxito material en una sociedad que ya existe (o una con mejorías muy sutiles). A pesar de que se ha puesto de moda apuntar a objetivos más elevados en términos educativos, se sigue poniendo mucha más atención a preparar individuos para la ganancia económica en la vida, que en alcanzar estos objetivos más nobles.
Otro tema recurrente en las declaraciones de Krishnamurti sobre las intenciones de la educación es la libertad.
Pero la libertad es algo de carácter más espiritual que material. Por supuesto, existe una diferencia entre la libertad psicológica y la compulsión externa -Es difícil ayudar a un estudiante a encontrar la primera en un clima dominado por la última- pero no es la libertad política lo que interesa a Krishnamurti, si no la libertad más profunda, la liberación interior que es el significado y el final de la educación.
La libertad se encuentra en el principio, no se trata de algo que se obtiene al final. No existe ninguna libertad al final de la compulsión; el resultado de la compulsión es la compulsión misma. Si dominas a un niño, lo obligas a entrar en un patrón. Aunque sea uno idealista ¿Será verdaderamente libre al final? Si queremos traer una verdadera revolución a la educación, obviamente debe de existir libertad desde el principio. Lo que significa que los padres y los maestros deben estar comprometidos con la libertad, y no con ayudarle a los niños a ser esto o aquello.
Las descripciones de Krishnamurti sobre lo que debería ser el entorno físico de una escuela son otra indicación de la religiosidad de la educación. Las escuelas deberían ser lugares sagrados. Esto debería reflejarse en su ascetismo como la atmósfera principal y en áreas especiales que Krishnamurti instauraba en todas las escuelas que fundó.
Las escuelas que fundó Krishnamurti son lugares muy hermosos, y esto no es una casualidad. La belleza es importante, no sólo porque es placentera, sino porque la sensibilidad hacia la belleza está relacionada con la religiosidad y es indispensable para el sano desarrollo de un niño. Ser religioso es ser sensible a la realidad. Tu ser completo –Cuerpo, mente y corazón- es sensible a la belleza y a la fealdad, al burro atado a un poste, a la pobreza que inunda la ciudad, a los sollozos y a las lágrimas, a todo lo que tenga que ver contigo.
Desde esta sensibilidad hacia toda la existencia florecen la divinidad y el amor.
Él mismo era extremadamente atento a los detalles y crítico de las cosas que estaban mal hechas. Él siempre fue muy comprensivo de que las escuelas no podrían ser mejores debido a las limitaciones materiales, y nunca presionó a los administradores de las mismas a ir más allá de los medios disponibles. Sin embargo, si las cosas no estaban ben debido a un manejo descuidado, negligencia o falta de sensibilidad, entonces sentía que algo iba en contra de la esencia de la educación. Esperar que la sensibilidad se desarrolle en los niños cuando los educadores son insensibles a su entorno es enseñar una gran lección de hipocresía. Como decía Keats, a quien Krishnamurti admiró mucho, la belleza está vinculada a la verdad. La naturaleza también es una parte muy importante de las escuelas fundadas por Krishnamurti.
Sus escuelas se localizaban en parques o en zonas aledañas a las ciudades. De nuevo, esto no era sólo por que el sintiera que la naturaleza era agradable, si no porque Krishnamurti sentía que una relación con la naturaleza tenía importantes implicaciones sagradas y para vivir sanamente. La sanación de la mente es algo completamente distinto. Esta sanación toma lugar si estás con la naturaleza, con esa naranja del árbol, con esa brizna de pasto que lucha entre el cemento, y con las colinas cubiertas y escondidas por las nubes.
Esto no es sentimentalismo ni imaginación romántica, sino una verdadera relación con todo lo que vive y se mueve en la tierra. Si estableces una relación con la naturaleza, entonces tienes una relación con tu propia humanidad, pero si no tienes una relación con las cosas vivientes en esta tierra, entonces puedes perder cualquier tipo de relación que tengas con tu humanidad, y con otros seres humanos.
Continuará…
FUENTES: http://www.holistic-education.net/articles/kinsight.pdf
TRADUCCIÓN: Kikio, redactora en la gran familia hermandadblanca.org
PARA SABER MÁS:
El problema sexual según Krishnamurti
Advaita Artículos: Krishnamurti y Advaita, por Hillary Rodrigues
Gracias por tu post. Reciba un cordial saludo.
Infinitas gracias por el "post"..
Por fin encuentro una verdadera definicion de qué es la educación y cuáles elementos conlleva en si mismo como una religion, y lo dice Krishnamurti un verdadero sabio maestro.
Gracias por éste post.
Gracias Namasté
yo soy luz clarificadora de dios en ti confio gracias gracias gracias asi sera para el bien mayor de todos.