Mi nuevo amigo el caos

Dentro de todo lo que puedo experimentar como  ser humano, hay un espacio quieto, silencioso, lleno de paz, amor, inamovible y siempre presente.

Ese dulce sabor del verano, de las vacaciones, de los deseos realizados, del amor correspondido, todo ese sentir que me llena más de vida de acuerdo a todo lo que me apasiona.

Como el suave ir y venir de las olas,  por momentos luce como si alcanzara a percibir lo que sostiene todo esto que llamamos realidad.

Aunque cada día es más evidente, el enamoramiento no fue sencillo.

Justo cuando creí haber librado todas las batallas que me correspondían por superar tanto crisis familiares como crisis existenciales casi apostaba que lo que seguía en mi vida era descansar.

Eso de pensarse ser una buena creadora, si mucho tiempo fue como si podía hacer realidad todos mis deseos, solo pensando.

Pues así apareció esta etapa que un taxista me ayudo a  calificarla como noviciado, a este hombre le toco recogerme de una funeraria en la mañana para luego llevarme a cita con un doctor por la tarde, no pude esconder ni mi cara llorosa ni mis estudios médicos, así que solo me comento algo como todo va a estar bien señorita, es solo una temporada de noviciado y me compartió como él había pasado por varias situaciones.

Fue muy curioso porque a la vez de sentirme escuchada y bendecida me dieron más ganas de llorar je je pero como ya estaba por llegar al consultorio médico no me dio tiempo.

Esa idea tan genial del noviciado me ayudo a reflexionar para no tomarme en serio lo que estaba sucediéndome, tal vez todo se trataba de aprender a confiar en mi experiencia interna, en ese espacio de paz.

Pero bueno regresando a mi drama al final de ese día el pronóstico con el doctor fue muy alentador mi cabeza esta normal,  luego de eso hubo que moverse de trabajo, por momentos se veía como una serie de desafortunados eventos en un corto lapso de tiempo.

Cabe mencionar que recibí mucha ayuda, estuve usando algunos amuletos de protección, no deje de practicar meditación.

Poco a poco me fui dando cuenta que es posible que esto de la vida, es solo una exploración de descubrir lo verdadero de lo falso desde el enfoque del ser, del corazón.

Es así como estas experiencias me ayudaron a despertar los sentidos hacia otras realidades, había estado usado mucho este amuleto para traer a mi vida las cosas deseadas.

Cuando deje de hacer caso a los diálogos y opiniones de la mente, empecé a tener un verdadero descanso, dentro de todo este caos podía sentir amor y paz, podía experimentar la grandeza que puede vivirse cuando uno se hace chiquito.

Es como ir descubriendo un propósito mayor como si despertara a un sueño más lleno de colores,  entonces la mente es muy limitada para experimentar la realidad.

Le fui diciendo adiós como hace uno con esos amuletos que en su momento fueron útiles, se agradece con cariño y se guardan en un cajón.

Para mi no quedo otra que hacerme amiga del caos, este continua tocando mi puerta a menudo así que le hago pasar, nos tomamos un café nos escuchamos, ya hasta parece que perder el control se ha vuelto divertido.

Este camino hacia la libertad interior es como tratar de entender con la cabeza que estoy en verano pero por momentos se percibe el peculiar y dulce aroma en el viento que solo se presenta en otoño.