Psicología del Color: Entiende cómo el nuestras emociones se ven afectadas por la influencia de los colores
«Apaga el gris de tu vida y enciende los colores que llevas dentro de ti.»
– Pablo Picasso
Sabemos que los seres humanos reaccionamos al entorno al cual nos encontramos expuestos. Pero, ¿qué tanto puede llegar a influenciarnos?
Pues bien, la psicología del color se ha dedicado a estudiar este fenómeno. Es decir, la manera en que nuestras emociones se ven alteradas o inducidas de acuerdo a los colores que entran en nuestro campo de visión.
Muchas de las interpretaciones individuales están también sujetas a cuestiones geográficas y culturales. Sin embargo, no podemos negar que nos afectan. A partir de ahí podemos poner manos a la obra para hacer de nuestro entorno un lugar más amigable y más relacionado con nuestra identidad.
Quédate con nosotros mientras incursionamos en las bases de la psicología del color. También veremos el significado de algunos de los colores más importantes y cómo utilizar este conocimiento para mejorar nuestro entorno.
Historia de la psicología del color
Los efectos del color en la psicología de las personas ha sido demostrada desde tiempos antiguos. Quizás uno de los pioneros en la psicología del color fue Aristóteles. Él relacionó los “colores básicos” con la tierra, el cielo, el fuego y el agua.
En el año 1666, el científico inglés Isaac Newton descubrió que cuando la luz pura pasa a través de un prisma, se separa en todos los colores visibles. Así planteó la base de la teoría lumínica de los colores. Y esto fue el disparador del tratado ‘Teoría del color’ del científico y poeta alemán Wolfgang von Goethe.
En ese tratado, Goethe sostiene que lo que se ve en los objetos no depende únicamente de su materia o de la luz como Newton dice. También se ve involucrado nuestra percepción de cada objeto. De esta manera, los colores se vuelven algo subjetivo, y las personas tomamos un papel activo en su interpretación.
Y fue la psicóloga y socióloga alemana Eva Heller quien estudió las bases de la psicología del color. Según ella, entre los colores y los seres humanos, tanto a nivel emocional como racional, existe una relación que no es accidental. En esta relación no solamente se dan preferencias y gustos. También experiencias universales que tienen raíces en el lenguaje y el pensamiento.
De esa manera, los colores tienen una influencia directa en las personas que los experimentan. Y estos significados presentan algunas variaciones dependiendo, obviamente, de los distintos grupos culturales.
Efectos de los colores
Veamos ahora algunos de los efectos más comunes dentro de la psicología del color.
Para empezar, el color que resulta de la suma de todos los otros, el blanco. Casi universalmente, el blanco es un color que representa la pureza y la simplicidad. También está relacionado con la inocencia, la frescura y el optimismo. Este color provoca a su vez una sensación de espacio, por lo que es muy popular como pintura de interiores.
Otro color importante en la psicología del color es el rojo. Este es un color fuerte, que rápidamente llama la atención. Tiene una relación con el amor, la pasión, el deseo y la lujuria. También se asocia con la impulsividad, el valor, la fortaleza y la determinación. Sin embargo, y quizás por ser el color de la sangre, es también señal de peligro.
Por otro lado, tenemos el color verde. Este color es muy relacionado, como no podía ser de otra manera, con la naturaleza. Así, el crecimiento, la esperanza y el equilibrio son sensaciones que podemos asociar con el verde. También la frescura, la abundancia, la armonía y la fertilidad.
Otro color que es protagonista en la psicología del color es el azul. Al azul se lo relaciona con la verdad, con la libertad, la seriedad y el progreso. Es también asociado a la lealtad, la calma y serenidad, la sabiduría y la concentración.
Deberíamos también mencionar al color amarillo. Este es un color energético, relacionado con la espontaneidad, la innovación, la diversión y la alegría. El calor, el hambre, la intensidad y la frustración también son sensaciones que nos provoca este color. Sin embargo, es también señal de envidia, traición e ira. Esto lo vuelve uno de los colores más ambiguos de la escala.
Tenemos también el negro, que dentro de la psicología del color se lo relaciona con el misterio, el poder y el silencio. Además, el negro es símbolo de sobriedad y formalismo. La autoridad, la inteligencia y la muerte son también temáticas que nos llegan cuando entramos en contacto con este color.
Por último, el púrpura es otro color muy interesante. Este se encuentra muy relacionado con lo místico, con lo ecléctico, la elegancia y la serenidad. También el romance y la sensualidad son sensaciones que se nos despiertan por la psicología del color púrpura.
Psicología del color como forma de terapia
Muchas culturas antiguas, incluyendo la civilización China y los Egipcios, han aprovechado la influencia de los colores para mantener el equilibrio en nuestro cuerpo y mente. Ellas han practicado la cromoterapia, o el uso de los colores como inducción a la sanación. Esta es también conocida bajo el nombre de terapia de la luz o colorología, y es utilizada al día de hoy como tratamiento alternativo u holístico.
A grandes rasgos, el tratamiento implica el uso del color rojo para estimular el cuerpo y la mente. También se lo utiliza para mejorar la circulación.
A su vez, el color amarillo se cree que puede estimular los nervios y conseguir una mejor purificación del cuerpo.
El naranja, en cambio, es utilizado para todo aquello que tenga que ver con los pulmones. Actúa también los niveles corrientes de energía.
El azul, como vimos en la psicología del color, es un color que puede ayuda a alcanzar el equilibrio físico. Esto ayuda a disminuir las enfermedades y como tratamiento del dolor.
Diferentes tonalidades del índigo son utilizadas generalmente en pacientes que presentan distintas afecciones en la piel.
Aplicando la psicología del color a nuestra vida cotidiana
Todos hemos notado cómo en situaciones nos encontramos en algunos ambientes que se sienten completamente relajantes y no lo podemos explicar, o que nos despiertan una cierta sensación de ansiedad. En estos casos, es muy probable que los colores estén jugando un papel fundamental.
Ahora tenemos conocimiento que tenemos sobre los colores y las emociones que nos despiertan. Y esto puede ser una gran influencia para crear nuestros espacios. ¿Cómo aplicamos lo aprendido en la psicología del color a los entornos en los que nos encontramos día a día?
Pues bien, he aquí algunos consejos.
Si lo que necesitas es crear una atmósfera para la creatividad, intenta utilizar el color violeta. Este color presenta tanto un rojo como un azul que nos ofrece un gran balance entre estimulación y serenidad. El violeta claro, también, puede resultar en un ambiente pacífico. Esto es ideal para aliviar la tensión, ideal para una oficina de negocios o algún rincón dentro del hogar.
Si lo que quieres es un lugar calmo, entonces la psicología del color verde y del color azul pueden ser tus aliadas. Estos colores frescos son comúnmente asociados al descanso. De hecho, se cree que son de los que menos estresan la retina, cansando menos a la vista.
El color azul también se lo recomienda para habitaciones muy transitadas. Sirve también donde las personas dedicarán gran parte de su tiempo. Este también fomenta la respiración tranquila y disminuye la presión circulatoria. Es una gran opción para los dormitorios.
¿Quieres fomentar el apetito en las personas o mantenerlas estimuladas? Pues no hay mejor que la psicología del color amarillo y naranja. Estos colores son relacionados con la comida, lo que los hace muy comunes en los restaurantes. Aunque estos pueden ser colores muy brillantes y reflejar mucha luz. Pueden por lo tanto estimular de manera excesiva a la vista de las personas. Y esto causará irritación.
Utiliza este conocimiento sobre los colores con sabiduría, y haz de tus espacios unos lugares inolvidables.
AUTOR: Lucas, redactor y traductor de la gran familia de hermandadblanca.org
FUENTES:
Gracias por el articulo, me ha gustado!