B.A. Robinson – ¿Son todas las brujas iguales? Tipos de hechicería

Las versiones en español de La Biblia a veces traducen la palabra hebrea m´khashepah o m´khaseph encontradas en las Escrituras Hebreas como Bruja o Hechicero. Por ejemplo:

• Éxodo 22:18: “No dejes con vida a ninguna hechicera”. (NVI)
• Deuteronomio 18:10-11: “Nadie entre los tuyos deberá sacrificar a su hijo o hija en el fuego; ni practicar adivinación, brujería o hechicería; ni hacer conjuros, servir de médium espiritista o consultar a los muertos”. (NVI)

Las palabras Hebreas m´khashepah y m´khaseph significan hechicera o hechicero maligno; una persona que utiliza los hechizos por habla en secreto para dañar o matar a otras personas. Ellos fueron muy temidos por los israelitas antiguos porque creían que no habían medidas de protección que una persona pudiera utilizar contra esas maldiciones.

Gálatas 5:19-20 incluye una lista de “actos de naturaleza pecaminosa”, o “trabajos de la carne”. Uno de ellos es, en el griego original, “pharmakia”. La palabra inglesa “pharmacy” deriva de ella, “farmacia” en español. “Pharmakia” es la práctica de preparar pociones venenosas en secreto, para lastimar o asesinar a otras personas. Esto suele traducirse erróneamente como hechicería en algunas versiones de La Biblia. Otras versiones lo traducen como: brujería, magia, artes mágicas, espiritismo, y “participar en actividades demoníacas”.

En Europa Oriental, a finales de la Edad Media y en el Renacimiento, la Iglesia Católica Romana dijo que los individuos malignos, sobre todo las mujeres, vendían su alma al Diablo, adoraban a Satán y dedicaban sus vidas a dañar a los demás. Se decía que ellos adoraban a Diana y a otros dioses y diosas. Que eran brujas malvadas que secuestraban a bebés, mataban y comían a sus víctimas, estaban aliadas con los demonios, volaban en el aire, se reunían a mitad de la noche, causaban impotencia masculina e infertilidad, hacían que los genitales masculinos desaparecieran, entre otros.

Estas creencias fueron generalmente aceptadas por los europeos de la época. Cientos de miles de individuos fueron condenados como “brujas”. Cientos de miles fueron condenados por adorar a Satán y fueron ejecutados colgándolos en la mayoría de las jurisdicciones protestantes, y quemados vivos en la mayoría de los países católicos. A diferencia de lo que dice la opinión pública, la mayoría de los acusados fueron enjuiciados y condenados por cortes civiles, no por la Inquisición Católica. El terror dejó una cicatriz tan grande en el cristianismo que muchas personas aún creen que los satánicos góticos existen en la actualidad. Esta creencia tuvo un resurgimiento temporal en la década de los 80 y a principios de los 90, en la forma de pánico del Abuso de los Rituales Satánicos.

Estas brujas probablemente nunca existieron, excepto en las mentes y pesadillas de las personas. Hay rumores de la existencia de grupos satánicos góticos en Francia hacía siglos; pero no es seguro si son una fábula o un grupo real. Creer en brujas malvadas que cometieron las atrocidades previamente mencionadas, y más, continúa sucediendo en África y en partes de Asia en el presente.

Wicca es una religión recientemente creada, parcialmente basada en conceptos, deidades, símbolos y días de celebración de los antiguos Celtas. Algunos de los que son Wicca también se refieren a sí mismos como brujas, paganos, o neopaganos. Tanto hombres como mujeres que siguen la religión son típicamente llamados brujas; el término brujo no es utilizado. Las dos leyes que gobiernan el comportamiento Wicca son:

• “No dañes a nadie, haz lo que debes”. Los Wicca son libres de hacer lo que quieran, siempre y cuando no lastimen a nadie, incluyéndose.
• Ley Triple: Cualquier cosa mala que hagas, regresará a ti tres veces mayor; y lo mismo ocurre con las buenas acciones.

Ambos obviamente motivan a las Brujas/Wiccans a evitar hacer el mal. Las “Brujas” en La Biblia y las “Brujas” Wicca son, de hecho, totalmente opuestas en creencias y prácticas. Además ellos tampoco se relacionan con la farsa creada por la Iglesia Cristiana a finales de la Edad Media. Siendo Wicca no se cree en Satán; sus deidades no incluyen a un ser sobrenatural todo malvado. Tampoco se vinculan con la hechicería imaginaria de la literatura infantil; ellos viven definitivamente en el mundo real, no en un universo alternativo.

Los satánicos modernos reconocen a Satán, ya sea como deidad o como un principio de vida. Los seguidores suelen ser adultos serios, aunque también hay unos pocos adolescentes maduros. Existen tres tradiciones principales: la Iglesia de Satán, el Templo de Set y la Iglesia de la Liberación Satánica. Una fuente estima que había entre 10 y 20 mil miembros de la Iglesia de Satán en Los Estados Unidos a finales de los años 70. La cantidad de miembros ha disminuido desde entonces.

Es importante recalcar que el Satán que ellos siguen es casi completamente diferente a la del satanismo gótico durante el Renacimiento, o al concepto Cristiano Conservador de hoy en día. La imagen de los satánicos de Satán es precristiana, y deriva de una imagen pagana de poder, virilidad, sexualidad y sensualidad. Para la mayoría de los satánicos, Satán es una fuerza de la naturaleza, no una deidad viva. Su Satán no tiene nada que ver con el Infierno, demonios, tortura sádica, maldad profunda, y Abuso de Ritual Satánico.

A diferencia de las personas del Wicca, los satánicos son libres de lastimar a sus enemigos. No sabemos de ningún satánico que haya sido condenado por un crimen relacionado con su religión o rituales.

La hechicería imaginaria suele parecer ciencia en novelas fantásticas y para niños. El ambiente es en un tipo de universo alternativo, donde las leyes físicas normales no aplican. La magia toma el control. Por ejemplo, las escaleras y otras estructuras en el edificio del Colegio Hogwarts, de los libros de Harry Potter, no obedecen las leyes de la física; ellas son constantemente reubicadas por magia. En este mundo mágico, las personas pueden volar por los aires con escobas. Ellas pueden cambiar su forma de humano a animal. Los dementores pueden atacar a las personas y succionar sus almas, dejándolos sin dicha. Los “succionadores de almas” y demás pueden ser derrotados con una varita mágica y recitando un hechizo.

Esta forma de brujería/hechicería también es visto en una parte la película Fantasía, en donde Mickey Mouse hace el papel de un aprendiz de hechicero. Él experimenta con un hechizo mágico sin permiso, y esto le causa muchos problemas al crear miles de escobas cargadoras de agua. Las brujas malas y buenas habitan el mundo de las rimas infantiles, las caricaturas y las películas; desde Cenicienta hasta el Mago de Oz. Como la escritora Rowling dice: “Mi mundo mágico es un mundo de imaginación. Creo que es un mundo moral… Yo no creo en el tipo de magia que aparece en mis libros”

Sus libros no se asemejan a la “Hechicería” de La Biblia, con la excepción del malicioso “brujo” Lord Voldemort. Su comportamiento encaja con la palabra hebrea m´khaseph (brujo oscuro). Él se describe constantemente en la serie de libros como un ser maligno al cual despreciar y combatir.

Los libros también describen a Harry y a sus amigos utilizando algunos métodos de adivinación que tienen algunas similitudes técnicas vagas que algunos que la religión Wicca usa para predecir el futuro. Sin embargo, la adivinación no es parte integral de los Wicca; es meramente una actividad que algunos hacen. Y, por supuesto, la mayoría de las personas que buscan adivinar el futuro no pertenecen a los Wicca.

La adivinación toma muchas formas en Norteamérica, incluyendo consultar el horóscopo, convocar runas, leer las cartas del tarot, interpretar las hojas del té, u observar la sombra de una marmota para decidir si la primavera se retrasará.

Los libros de Harry Potter enseñan un sistema positivo de moralidad:

• No son racistas. Cuando Harry está seleccionando a una chica con la cual ir al baile, él intenta tener una cita con varias estudiantes. A partir de sus nombres, podemos suponer que una es de la India y otra de África. Harry es caucásico.
• No son sexistas. Los hombres y mujeres interactúan como iguales; los hombres no adoptan una posición de superioridad hacia las mujeres. En el primer libro, Harry se apoya en la habilidad de una estudiante femenina para resolver un rompecabezas.
• Tienen moral. Lo correcto siempre triunfa sobre lo malvado; los buenos les ganan a los malos; el amor al odio.

Los personajes de Rowling poseen una fuerte lealtad hacia su familia y amigos.

La “brujería” vista en la ficción es diferente de la religión de “Brujería” (comúnmente llamada Wicca) en el mundo real. Por ejemplo:

La magia de Harry Potter tiene una naturaleza completamente diferente a la de la hechicería del mundo real. Él y sus amigos conjuran hechizos, leen bolas de cristal, y se convierten en animales, sin hacer contacto con un mundo sobrenatural. En el mundo Wicca, los hechizos suelen ser más como oraciones. No utilizan el “abracadabra”.

La confusión aparece cuando las personas tratan de vincular dos de estas formas de hechicería sin relación. Esto suele ocurrir cuando:

Algunos cristianos conservativos entrelazan la Hechicería de La Biblia, el Satanismo Gótico, los Wicca, y la hechicería imaginaria de los libros de Harry Potter como si fueran una única cosa prohibida. Como ha sido describo arriba, la hechicería de La Biblia y los Wicca son opuestos en muchas maneras. El Satanismo Gótico y la hechicería imaginaria no existen.

Los estudiantes adolescentes confunden la hechicería imaginaria de los libros de Harry Potter con los Wicca y quieren aprender hechizos que puedan utilizar para cambiar tu entorno.

Traducido por: Diana Martínez, redactora y traductora en la gran familia hermandadblanca.org 

Redactado por: B.A. Robinson

Página original: http://www.religioustolerance.org/wic_pott2.htm