Historia del Arcángel Jofiel

El Arcángel Jofiel es uno de los llamados “príncipes del cielo” que están en presencia de Dios. Este es el arcángel del intelecto, la sabiduría y la iluminación, por ello se piensa que fue él quien expulsó a Adán y a Eva del paraíso, cuidando luego la senda que conducía al Árbol de la Vida.

Hay quienes creen que este es el arcángel que tiende puentes de energía entre los diferentes niveles de la realidad espiritual, permitiendo la comunicación entre ángeles y humanos. Pero sus virtudes van más allá, pues Jofiel ayuda a aumentar la conciencia del plano espiritual y por ende, la sabiduría del hombre.

Jofiel es también conocido como Jophiel, Yofiel, Iofiel, Iophiel, Zophiel o Zaphiel.

El nombre Jofiel significa “Luz de Dios” o “Belleza de Dios” y se refiere al aprendizaje de los humanos en el camino a su meta de ascensión espiritual. El Arcángel Jofiel puede mostrarle al hombre que todo es un proceso de enseñanza que se repite una y otra vez hasta comprender el sentido del Plan de Dios.

Este aprendizaje es el que se opera en el alma por medio de las sucesivas encarnaciones y en ese ámbito este arcángel ayuda inspirando la sabiduría que permite liberar al alma de sus cadenas que lo atan a la tierra.

De esta forma, Jofiel acerca a los humanos a su creador y permite abandonar las encarnaciones de este mundo espiritual inferior para comenzar a encarnarse en mundos de mayor espiritualidad.

En el cristianismo, Jofiel no se reconoce de forma oficial, pues solo Gabriel, Miguel y Rafael se encuentran en el libro de Enoc. Las iglesias protestantes solo reconocen a Gabriel y a Miguel y consideran el culto a Jofiel como idolatría.

Se cree que el Libro de Enoc fue escrito por Enoc, bisabuelo de Noé, aunque las investigaciones recientes afirman que fue escrito entre el siglo III y el siglo I a.C. por varios autores judíos.

En este libro, los 7 arcángeles eran Gabriel, Miguel, Uriel, Raguel, Remiel y Zerachiel. Luego fue Pseudo-Dionisio quien nombró a los 7 arcángeles tal como los conocemos hoy en día: Gabriel, Uriel, Rafael, Samuel, Jofiel y Zadquiel. Por último, el papa Gregorio I nombró a los 7 arcángeles Miguel, Rafael, Gabriel, Uriel, Selaphiel, Jegudiel y Barachiel. No obstante, la lista de Pseudo Dionisio es la que se acepta hoy en día, pero a nivel extra oficial.

En el judaísmo, el Arcángel Jofiel es el equivalente a Yefefiah, el que vigila la lectura de la Torá en el Sabbat. La Cábala lo señala como el ángel que se debe invocar para crear amuletos y para algunas personas, sería la angelina Dina, guardiana de la sabiduría de la Torá.

• Día de celebración de Jofiel: 29 de setiembre
• Día de la semana: Lunes
• Color: Amarillo o dorado
• Chakra: Séptimo

La representación del Arcángel Jofiel tiene ropas doradas, que representan sabiduría e iluminación, una espada ardiente en una mano, representando a su tarea de cuidar el Árbol de la Vida, y un libro en la otra, como símbolo del conocimiento.

La espada de Jofiel es la espada de fuego que Dios colocó en el camino que conducía al Árbol de la Vida tras expulsar a Adán y Eva, la que se cita en el Génesis. Hay quienes creen que era la espada de un querubín, pero realmente Dios puso a dos querubines y a la espada como un ente separado. Esto parece señalar y hay quienes lo creen así, que la espada misma era la representación del Arcángel Jofiel.

Otra de sus representaciones tiene plumas de pavo real, simbolizando la belleza de su nombre “Belleza de Dios” y mostrando los múltiples ojos de las plumas de este animal como símbolo de la conciencia.

El color de Jofiel es el amarillo o dorado, pero más comúnmente el dorado, pues un color que no existe en los planos espirituales en que se encuentra el alma humana y solo corresponde a santos o sabios.

El dorado, al igual que el color amarillo, representa la mente y a cuestiones tales como la inteligencia, el entendimiento y la lógica, pero el dorado es además iluminación espiritual, comprensión profunda trascendental y sabiduría suprema.

Este arcángel es representado por el séptimo y último chakra, el chakra de la espiritualidad y el que conecta al humano con la divinidad. Este es el chakra que proporciona intensa espiritualidad, lo que trae consigo la sabiduría e iluminación como frutos de la inspiración divina.

Jofiel se asocia a la sabiduría, la inteligencia, el intelecto, la iluminación, la apertura mental y la erradicación de la ignorancia, así como la espiritualización de la mente. Y tiene la capacidad de promover la reflexión que conduce al autoconocimiento y la inspiración artística o filosófica, así como la liberación del orgullo, los prejuicios y la conexión con el Ser Superior Interno.

La sabiduría que suministra este arcángel es entendida como un tipo de conocimiento relativo a las grandes interrogantes de la vida, los que surgen de acuerdo a los aspectos más profundos y trascendentales.

Este es un conocimiento que afirma la existencia de un plano espiritual y permite captar la verdad, pero no en un plano racional, sino en el sentido de apelar a otros medios fuera de la razón, como la intuición, la sensibilidad humana o la iluminación espiritual.

El Arcángel Jofiel ayuda a acceder a los niveles más profundos de la conciencia, conectando el séptimo chakra y los chakras que existen por encima de la cabeza, los que se encuentran fuera del cuerpo, permiten tomar conciencia de la existencia de otros planos espirituales y las visiones.

Por ello, se invoca a Jofiel cuando se necesita claridad mental para estudiar o para tener éxito en los exámenes, cuando es necesario tomar decisiones importantes, cuando se atraviesan crisis existenciales o grandes interrogantes filosóficas.

Hay diversas formas de invocar al Arcángel Jofiel, pero una de las más eficaces es la siguiente:

• Debes invocar a Jofiel un lunes, a las 5 de la mañana.
• Hazlo solo y procura que nadie te interrumpa.
• Toma una vela amarilla o dorada que se mantenga en pie y tras rezar frótala con las manos desde abajo hacia arriba 7 veces.
• Dibuja el sello del Arcángel Jofiel en la parte superior de un papel o cartulina, de forma que ocupe la mitad superior o su tercera parte superior.
• En la parte inferior, escribe tus peticiones y un agradecimiento al arcángel.
• Enciende la vela, lee las peticiones y agradece a Jofiel por la ayuda y por estar presente en tu camino.
• Dobla la cartulina y ponla debajo de la vela.
• Reza una de las oraciones del Arcángel Jofiel.
• Cierra los ojos, relájate, ora e intenta sentir a Dios visualizando una espiral de luz dorada que entra por tu cabeza desde el cielo, llena tu ser de luz dorada y de energía divina.
• Visualiza que tu petición se ha cumplido, agradece al arcángel y a Dios y abre los ojos.
• Quema el papel antes que la vela se consuma y luego deja que la vela se consuma sola.

El Arcángel Jofiel como conciencia puede estar en varios lugares a la vez, pero no en todos los sitios, pues solamente Dios puede hacerlo. Pero esta capacidad no es solamente de Jofiel, pues también la tienen los serafines.

Sin embargo, el Arcángel Jofiel es uno de los arcángeles que tiene esta característica más marcada, por ser el representante de la sabiduría y la iluminación.

Visto en Enciclopedia del Misterio, por Pedro, redactor de la Hermandad Blanca