La fuerza del caos del consumismo. Aprende a detectarla y a combatirla desde ti mismo
No permitas que el consumismo te convierta en un código de barras
¡Hola guerreros de luz! Como siempre, me llena de alegría tener la oportunidad de saludarlos cada semana. En esta ocasión, me gustaría seguir abordando un tema que ya se ha vuelto recurrente en mis artículos para la hermandad. El consumismo y cómo nos vemos expuestos a esta nociva fuerza. Día con día.
A menos que tengamos la suerte o la desgracia de vivir muy lejos de la civilización. La publicidad nos bombardea minuto a minuto. Y el simple hecho de que tengas internet y estés leyendo esto, también llena tu vida de anuncios. A menudo me he referido al consumismo como una de las fuerzas destructivas del mundo.
Esto es porque el consumismo nos aleja del verdadero camino hacia nuestro ser de luz
No sólo eso, también nos llena de cosas que no necesitamos. Afecta nuestra economía, desviando nuestros ingresos de las cosas que realmente importan. Además, desgasta con una tremenda rapidez los recursos de la madre tierra. Por eso esta vez te comparto cinco pasos prácticos para que, como guerrero de luz, te apoyen a tomas decisiones sabias en los productos que consumes día con día.
¿Cómo sé si realmente lo necesito?
1: La mercadotecnia está diseñada para detonar sentimientos falsos de necesidad. Es sencillo dejarse llevar por el engaño de las cosas que brillan. Pero recuerda que no todo lo que brilla es oro. Si realmente lo necesitas, probablemente esto no se manifieste a través de un repentino y súbito deseo. Todos conocemos cuáles son las cosas que requerimos para vivir con comodidad, y es válido adquirirlas. Pero hay que hacer ojos ciegos a las invitaciones para comprar cosas que no forman parte de nuestra rutina.
2: Identifica cuál es la necesidad a la que realmente le están vendiendo el producto. Por ejemplo, tal vez quieras un carro del año, aunque el tuyo funcione bien. Trata de ser honesto contigo mismo. ¿Lo necesitas, o necesita presumir o demostrar algo? Nunca adquieras nada en función de querer demostrar nada. La mercadotecnia usualmente apunta a nuestras frustraciones e inseguridades para vender sus productos. No necesitas una crema de belleza para ser hermosa. Si lo sientes así, el problema estriba en que existe una falta de seguridad o autoestima. Dicho sea de paso, aprender a detectar qué deseos está movilizando en nosotros la publicidad es una gran forma de auto conocimiento.
No existe ningún producto que pueda sanar tus heridas interiores.
3:Anticipa las consecuencias de no adquirir un producto:
Si las consecuencias repercuten en tus necesidades básicas, entonces es algo que necesitas. Si no alcanzas a encontrar alguna consecuencia trascendente, probablemente se trata sólo de un capricho.
4: Piensa si lo que quieres adquirir repercute negativamente en la madre tierra: Tenemos que aceptar que no siempre es posible adquirir productos 100% verdes. Ya sea por nuestra economía o por que el mercado simplemente no los tiene. Pero mucho de lo que compramos está lleno de empaques innecesarios. Genera un montón de basura. O promueve un abuso de recursos naturales insostenible. Desde una soda hasta un celular. Piensa en toda la industria que hay detrás y en cómo puedes ayudar a Gaia.
Un guerrero de luz no se deja engañar por un empaque bonito.
5: Recuerda que tú NO eres lo que compras: Estás rodeado de un sistema que va a intentar convencerte de que sí. De que vales menos si no tienes productos a la moda. Pero tú eres un guerrero de luz, y sabes que eso es una vil y vulgar mentira. Sabes detectar las fuerzas energéticas nocivas del consumismo en el mundo. Y sabes que puedes pelear a favor de las fuerzas de la luz en cada pequeña acción. Incluida cada cosa que pones en el carrito del supermercado.
¡Que la luz esté siempre con ustedes hermanos amados!
AUTOR: Kikio. Redactora de la gran familia hermandadblanca.org
Para saber más:
El manantial de la felicidad, carta a los grupos, por Carmen Santiago
Beneficios del reciclaje para la economía familiar
