Ustedes han pensado que había algo mal con ustedes debido a su duda y su temor. Ustedes se han imaginado que ellos eran un problema mayor de lo que realmente son. A decir verdad, es un problema mayor el que ustedes luchen contra y se resistan a estos sentimientos que lo es el experimentarlos.

Tan importante como la fe es para ustedes, eso no significa que el temor y la duda los paralizará o los destruirá. No quieren afianzarse a ellos, pero eso no significa que tienen que estar completamente libres de ellos. Dudando de su habilidad para correr en la carrera sólo los detendrá, si ustedes lo permiten. La emoción no tiene poder. Ella por sí misma no daña; es una estática sin sentido, una observación basada en el raciocinio y es una imagen de una experiencia en un momento dado. Si ustedes son capaces y descartan la duda y siguen corriendo, entonces no hay problema alguno.

Ustedes no tienen que luchar contra sus emociones.

No hay ganancia alguna luchando contra sus emociones.

Hay un gran sufrimiento y malestar personal a causa de luchar contra sus emociones.

Es tiempo de dejarlas ir. Es tiempo de permitirlas. Es tiempo de aceptarlas. Es tiempo de reconocer que los sentimientos por sí mismos no son dañinos. Ellos no son su enemigo. Sé que ustedes han pensado que lo eran; pero no lo son. Ellos no tienen poder alguno. No son tan importantes.

La fe es lo que les permite moverse más allá de estos pensamientos y sentimientos y proseguir. La fe es la conciencia de su propia fortaleza. Ustedes superan el temor y la duda enfocándose de nuevo en la fortaleza suya. El superar el temor y la duda no se logra luchando contra ellos. Ustedes los superan desenganchándose de ellos. Descartándolos. Dejándolos ir. Eligiendo no creer en ellos.

Eso es todo.

No es gran cosa.

No es un reto. No es difícil y no está destinado a ser difícil.

Es importante creer en sí mismos. Es importante tener fe en Mí. Pero no es importante que el temor y la duda cesen de existir.  Ustedes no necesitan estar libres del temor para tener una fe firme. No necesitan nunca tener dudas o recelos. No necesitan ser puros y perfectos como se imaginan.

La fe importa; pero la fe es simplemente recordar. Cuando se olvidan, necesitan recordar. Cuando duden de su fortaleza, necesitan reafirmarla.  Y a veces necesitan escuchar cuando su cuerpo les dice que han empujado suficiente por un día. Pudiera ser que son capaces de correr un maratón a tiempo, pero eso no significa que puedan correr un maratón a diario.

Ustedes son fuertes, pero sí tienen límites. Está bien. No hay nada malo en eso. Está bien que busquen superar sus limitaciones, pero no se queden atrapados en la ilusión de que tienen que ser el mejor. Ustedes no necesitan ser el mejor. No necesitan la perfección del mundo.

Ustedes necesitan Amor.

Yo los amo.

Y los insto a que acepten Mi Amor.

Aprendan a amarse a sí mismos como Yo los amo.

Ámense a sí mismos sin motivo y sin limitaciones.

Ustedes no necesitan razón alguna para amarse a sí mismos. Dejen ir la razón. El Amor es más grandioso que la razón. El Amor supera toda razón. La razón es ordinaria y el Amor es extraordinario. Dejen de pensar que necesitan hacer algo para ser merecedores del Amor. Ustedes son merecedores del Amor ahora. Dejen ir la idea de que necesitan ganarse el Amor.  A ustedes se les obsequia el Amor. El Amor es su derecho de nacimiento. Todo lo que necesitan hacer es reclamar el Amor. Todo lo que necesitan hacer es aceptar el Amor. Todo lo que necesitan hacer es reconocer el Amor que ya es suyo.

Mi Amor ya es suyo. Ustedes ya son muy amados. Ustedes son merecedores. Ustedes son Mi Querido Niño. Ustedes son Mi Ángel en la Tierra. Ustedes son Divinos.

Los amo, Niños.

Los amo.

Los amo tal como son.

Los amo a pesar de sus errores.

Los amo a pesar de sus virtudes.

Los amo siempre.

Los amo aquí y ahora.

Amo su Corazón.

Amo su Luz.

Simplemente los amo.

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Meditación Del Canto Del Corazón: No Necesitas Luchar Contra Tus Emociones