Mensaje de Madre Mileila por Fernanda Abundes: El Magno escribió…

Geny Castell

Madre Mileila

Un día leyendo las memorias de un gran sabio, el Magno aquel ser maravilloso escribió… 

«Veo a todos los sabios, todos se ríen y pocas veces me invitan a reír, no obstante, comparto su risa y resuena tanto en mi ser que me vuelvo igualmente feliz.

El sabio del otro día me invitó un té, llegué pero no había té y tampoco había sabio.

De pronto otro sabio un día llegó y me invitó otro té, llegué, estaba el té y la tetera pero no estaba el sabio, le había ocurrido algo tan maravilloso que lo había puesto feliz y ya no había regresado para contarme que le había pasado, no obstante yo había visto todo lo que él podía disfrutar en ese momento, e igualmente yo había sido muy feliz. 

Un día un sabio me invitó a tomar un té y cuando llegue ahí estaba, antes de decirme si quería una taza de té, -vi la tetera, vi la taza- me empezó a contar todo lo que pasaba por su vida. Pensé que me iba a contar grandes situaciones, pensé que me iba contar la vez que lo había escuchado reír tanto que no podía parar y que incluso había llorado de risa, pensé que me iba a contar la vez que había brincado de emoción; pero empezó a decirme que las cosas no salían bien, que no eran como quería,  que no eran lo que parecía, que no era lo que habíamos acordado, que él me había pedido otra cosa distinta y que yo le había dado mucho menos de lo que él quería y que al contrario, le había dado muchos más problemas de los que él tan siquiera hubiera imaginado que podía sortear y tampoco me invitó el té, se fue molesto y no me volvió a hablar».

Yo seguía leyendo las historias de un sabio, del gran sabio… y al final el gran Magno escribió: 

«Muchas veces me gustaría que me contaran cuando ríen, que realmente me sirvieran el té para contarme lo felices que son, también me gustaría que después de que ya vivieron tan felices, regresarán a decirme que son aún más felices por poderlo contar y que no sólo verdaderamente me citaran y estuvieran sentados cuando tienen que contar todo lo que no ocurre, porque igual me he dado cuenta de cuántas veces han reído». 

Y de pronto es cierto… ustedes ponen demasiada atención a las cosas malas que ocurren en su día día o en aquello que ustedes piensan como malo; ¿creen en algo superior? ¿agradecen a la vida y al Magno? pocas veces, pero siempre piden cuando ustedes consideran que todo está mal. Y no es por agradecerle al Magno y a la vida, sino por darse cuenta ustedes que de pronto hay que hacer una pausa para reconocer las cosas favorables que pasan. También poder despertar y decir un día, a pesar de que la lista está vacía para el «¿que quieres el día de hoy?», poder decir: Hoy todo está bien«. 

Continuaré trabajando con todos ustedes… Hablen por las voces del mundo, que éstas sean para construir, que éstas sean para definir un mundo más tranquilo, nada es una profecía todo es la oportunidad de transformar.

Estaré con ustedes… hasta otro instante, y recuerden que un instante no se puede cuantificar por lo tanto sin observar en qué momento de la realidad, por siempre ahí, disfrutando la eternidad.

 

Feliz

Mensaje canalizado por Fernanda Abundes (Puebla México)

Publicado por Geny Castell redactora de la gran familia de hermandadblanca.org

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