Novilunio de Aries: La semilla del Fuego Eléctrico Cósmico.

 Las fuerzas y energías cósmicas que distribuidas a través de la trascendental influencia de Aries envuelven la Tierra durante este excepcional período de  ”restauración”, influencian de manera trascendental tanto los aspectos psicológicos como emocionales del Ser, poniendo a nuestra disposición un tiempo excepcional de carácter evolutivo.

La energía que Aries distribuye y que llega desde el Sol Central en el centro de la galaxia de forma directa, sin mediación ni intervención de las Jerarquías superiores que hasta ahora, difractaban y “suavizaban” las corrientes cósmicas, nos conduce durante este periodo a un fuerte bucle de energía evolutiva, a un excepcional tiempo, a un primer, Festival Mayor de servicio universal.

Aries, parte de la cruz Cardinal donde el primer Rayo, el Padre, el Principio Masculino de Voluntad Poder se extiende y generaliza sobre todos los estados y niveles psico-emocionales nos zarandea con uno de los fuegos principales, El Fuego Eléctrico, cuyo transmisor por excelencia es Aries.

“Aries, Trasmisor del Fuego cósmico eléctrico

El signo zodiacal Aries forma un brazo de la Cruz Cardinal y proporciona el Fuego cósmico eléctrico.

Los canales de acercamiento trasmisores del Fuego cósmico son 3: Aries, que libera el Fuego eléctrico.Leo, que expresa el Fuego Solar y Sagitario, el Fuego planetario. Nos enseña el Maestro D.K.:

“Estos tres Fuegos son los elementos del Fuego Cósmico practicados en el Yoga del Fuego, el Agni Yoga. Este yoga sagrado despeja el camino hacia la Resurrección.”

El signo de Aries forma un brazo de la Cruz Cardinal. Es el canal de aproximación de los Rayos 1  y 7. Se llama por eso el “Signo de los Comienzos”.

Desde “el Sol Central” (el Centro galáctico), el Rayo 1 da el impulso y el Rayo 7 entona el tema del primer movimiento de la Partitura cósmica concebida por la Voluntad del Padre: “la Glorificación de la Materia”. Surge ya en nuestro tiempo como un majestuoso “andante cantabile”, iniciando la Sinfonía  de Acuario. La magnitud de este tema, que nos viene desde el Centro galáctico es tan asombrosa que, en forma paradójica, produce el actual clamor caótico mundial.

Nuestra Presencia divina planetaria (el Logos planetario), ella misma canal del Rayo 1, capta este Fuego eléctrico divino de Aries y, por la mágia del Rayo 7,  lo transforma  en “Actividad Inteligente Feminina, la Luz divina de la Madre”.

La Jerarquía espiritual siempre ha temperado el ímpetu de este potente Fuego eléctrico y lo ha adaptado a las necesidades de la Raza humana. Sin embargo, en nuestro tiempo, por la virtud del Rayo 1 y 7, servidores privilegiados de la Nueva Era, la Jerarquía considera que el Hombre-Aries es capaz de recibir DIRECTAMENTE desde Shambala el impacto del Rayo 1 para manejarlo sin ningún filtro. Es eso que produce, el día de hoy en nuestro planeta, esta enorme explosión de violencia a todos los niveles. El Discípulo mundial se esfuerza a canalizar esta poder destructor del Rayo 1. En esta tarea es ayudado por el impacto constructivo de “la Mágia y  Oden Ceremonial” del Rayo 7. Éste Rayo será el gran constructor de la Era de Acuario.”  William Van Marsenille.

La conjunción entre el Sol, la Luna y  Urano, que se produce durante el novilunio nos conduce hacia la interiorización de la “semilla” de un nuevo espacio-tiempo, de una nueva senda, donde el hombre es capaz de convocar los escenarios perfectos  para regir la energía, envueltos en el primordial impulso de Aries, la mente despierta, conectada, concentrada en un poderoso centro, donde el axioma inmemorial “la energía sigue al pensamiento”, se realiza.

El sol, potencia global de todos los aspectos del Ser, la Luna gobernadora de la personalidad que un periodo excepcional de “sacralización” de la materia ya es sensible a los planetas velados por ella y Urano, personificación de los poderes creadores, planeta sintetizador de la fuerza de Sirius,  y hogar por excelencia de este Fuego Eléctrico, nos influencian directamente con la poderosa fuerza restauradora del 1er Rayo, Voluntad-Poder de una forma tracendente y sin mediación, reconduciéndonos a la idea de la co-creación cósmica, donde es ya el propio ser humano el encargado de recibir tal fuerza universal para radiarla y conducirla a las áreas de servicio y ascensión planetaria.

“La nota clave de Aries

El meditador, cuando se eleva y concentra totalmente en el plano mental, puede tomar contactoconscientemente con el Fuego Eléctrico canalizado por Aries para que así sea distribuido hacia los reinos inferiores. La nota clave de Aries es:

“Surgo, y desde el plano de  la mente, gobierno”

El Hombre-Aries, si se concentra en el plano mental, puede desarrollar el autodominio, controlar la energía de la muerte y dominar el poder destructivo. Por esta concentración, su colaboración con la sinfonía del Padre será divinamente armoniosa.” William Van Marsenille.

Así Aries se convierte en una actividad triádica de las fuerzas del Alma, (Padre-Hijo-Madre) llamadas a hacernos resurgir tras el cierre de ciclo anual al propio poder y a los escenarios de servicio y Magia Universal donde el ser humano es llamado a crear los puentes y mediaciones de energía que precipitarán y exteriorizarán un nuevo tiempo, un paraíso en la tierra de fraternidad y buena voluntad.

Directos al primer plenilunio anual, al gran Festival de Pascua, donde el poderoso Amor, el Cristo, el Hijo, la manifestación pura de este sistema de Amor-Sabiduría, trasciende la muerte y se eleva en la resurrección de la materia (sacralización,sutilidad) superando la inercia ancestral de su densidad para vibrar en su plano más elevado y radioactivo, el novilunio de Aries, nos invita a concentrar y dirigir nuestra atención a todas las fuerzas y vehículos que están inmersos en esta sagrada ascensión, en este movimiento planetario y universal,convocándolos desde el profundo Amor que contiene la vida, para producir un cambio psicológico tremendamente evolutivo, para generar un cambio consciente planetario, para exteriorizar, vivir y manifestar una nueva edad dorada del hombre y el planeta tierra.

Bendita la danza de Visionarios y sus Almas.

Namasté.

Anabel. C. Huertas y WilliamVan Marsenille.

Novilunio de Aries: La semilla del Fuego Eléctrico Cósmico.