Árbol de la vida.

En el origen del juego cuando la energía comenzó a proyectarse había un árbol lleno de burbujeante vida, el más esplendoroso que pudieras imaginar sus raíces cubren lo que parece un país a nuestros pequeños ojos, su tallo alcanza espectaculares dimensiones para sostener el increíble follaje que tapiza un planeta entero.

Como peculiaridad extra el árbol en lugar de hojas está repleto de burbujas, cada burbuja, es una semilla, una parte de este ser, un alma.

El movimiento inicia con una danza ligera, los ritmos armoniosos ondulan a través de vibraciones sutiles que tocan ligeramente a las burbujas, provocando su  efervescencia  por todos lados.

El árbol vibrante, poderoso, concibe cada una de sus partes en perfección divina, solo da a consignación experimentar amor, en cualquiera de sus formas.

Las burbujas se van desprendiendo puede ser de acuerdo a su madurez,  su valentía, sus ganas de evolucionar, o tal vez el mismo árbol solo las deja ir suavemente.

El viento hace su parte para que la vida siga fluyendo, cada burbuja llega exactamente a donde es requerida.

Al inicio no parece sencillo el cambio, las burbujas ahora adquieren un cuerpo humano, estaban acostumbradas a experimentarse como parte de su creador el árbol no notaban la individualidad, ahora habría que adaptarse a estar  contenidas en un frasco.

Las nuevas actividades y habilidades hacen que las burbujas vayan olvidando su origen pero el árbol jamás las olvidaría como parte del plan se les permite regresar especialmente en las noches ya sea que solo quieran recordar de donde vienen, o bien platicar de sus nuevas experiencias.

Puede suceder también que el impacto por el cambio hace que algunas burbujas olviden su propósito, solo están como distraídas con las nuevas formas por lo que se van presentando sensaciones, enfermedades o eventos que las llevan a buscar un algo más que las ayude a recordar puede haber un deseo por salir de su cotidianidad.

El árbol de la vida sabía que esto podía ocurrir para lo cual otorga otra herramienta para las burbujas más despistadas,  que es acceder a esa conexión como cuando estaban en el árbol para poder recordar que no hay separación,  esto ayuda para comunicarse entre sí  y ayudarse a recordar unas otras, como una especie de radio o frecuencia donde se pueden sintonizar.

Regresar a casa se escucha como un murmullo, así caminan traslúcidas en pasos lentos grupos de burbujas, algo distraídas por los sabores cotidianos.

Unas a otras en forma de señales ocultas, tratan de comunicarse, como un guiño de ojos o como un empujón intentos por dejar de ser burbujas.

Experimentar amor había  sido la tarea algunas veces ha dejado velos, huellas, marcas del caminar pero la envoltura original sigue intacta…

Imaginas cuantos pedazos de ti hay por todos lados… es fácil creer que has encontrado a tu alma gemela… pero solo es por la añoranza… 

Es posible recordar la inmensidad, recordar el árbol, recordar casa, porque es el origen todos hemos estado ahí, vida creando vida.

Las burbujas conscientes de su origen, se convierten en semillas algunas son tan brillantes que ya no pueden regresar a ser burbujas, su tarea es reflejarnos el brillo del cual fuimos emanados, viajan al árbol de la vida a placer o incluso fingen ser burbujas para regresar, con su brillo pueden también ir a nuevos planetas a germinar como otro árbol.

Burbuja o semilla no tiene relevancia más que en la medida o capacidad de experimentar amor, el árbol de la vida somos todos.