Comer, rezar y amar..
Sí…en ese orden….éste es el título de un libro y una película protagonizada por Julia Roberts que ha sido vista muchas veces por espectadores de todas las edades hasta el día de hoy. Nos muestra a grandes rasgos como una vida sin la adecuada dosis de experiencias físicas y espirituales resulta ser incompleta y disfuncional.
encontrarnos a nosotros mismos…
Pero ¿Qué es lo importante a destacar? Lo primero es la oportunidad de encontrarnos a nosotros mismos a través de apreciar todo lo que nos rodea desde lo más burdo y físico hasta lo más sutil. Desde nuestra vida cotidiana a nuestro interior, de nuestra existencia y placeres físicos a los del corazón.
La referencia de “Comer” se utiliza para reflexionar no solo en alimentarnos, sino hacer todo con atención, disfrutando cada momento con intensidad, una escena importante es la de la cita en la que una persona le ruega a Dios que por favor se saque la Lotería y éste en su desesperación por ayudarle le contesta “por favor.. por favor…hijo mío…compra el boleto”. Y es verdad cuantas veces deseamos obtener algo y ni siquiera generamos las condiciones para que eso suceda…por ejemplo..el viajar a muchos lugares en el mundo y no ahorramos ni nos determinamos a obtenerlo ó cuando pedimos que nuestro matrimonio o noviazgo marchen bien y no le prestamos atención al otro(a).
la ley de la causalidad…
Toda aspiración debe estar acompañada de la acción, así como la teoría es vacía si no se practica y experimenta, de igual manera no cosecharemos sino sembramos previamente..es la simple y siempre presente “Ley de la causalidad”.
En el caso de “Rezar” es una realidad que lo ideal para encontrarle sentido a nuestras vidas es el agradecer todo lo que tenemos y no tenemos, estar en contacto con nosotros mismos a través de la meditación, encontrar la paz en la atención plena y aprender como una gran lección que cuando el río fluye no debemos ejercer tanto control sobre el, la mayoría de las ocasiones es necesario dejar ir todo lo que nos gusta y lo que no también, aprender a vivir sin apegos que generan obstáculos y sufrimiento…no resistirnos al cambio sino estar preparados para el mismo y danzar (por así decirlo) de manera armoniosa en el camino, al final aprenderemos de lo que no nos es tan agradable y nos regocijaremos en lo que ha llegado a nosotros cargado de gozo y aceptación.
con gozo y aceptación…
Finalmente en la parte de “Amar” no se utiliza sólo en el ámbito de la pareja, es amarnos de manera sana a nosotros mismos sin llegar al egoísmo y exceso de importancia personal.. es apreciar todo lo que nos rodea, lugares, personas, cosas…todo tiene un sentido si nos detenemos por un momento a no solo ver sino a observar. En ésta parte encontramos la cita “perder el equilibrio por amor es parte importante de estar en equilibrio”, y esto es para reflexionar que no en lo congelado y ausencia de cambios es donde se encuentra la felicidad…es en el constante movimiento y aceptación donde nos contactamos con nuestra paz interior.
El miedo puede ser también un obstáculo cuando nos detiene y no solo lo tomamos como una advertencia, por supuesto que es importante sentirlo para pensar dos ó más veces las consecuencias de lo que nos determinamos a realizar, pero no debe paralizarnos pues cuando esto sucede el mayor riesgo es el de estancarnos, dejar de crecer y permanecer en una poco saludable zona de confort.
completa e integral transformación…
Tanto la película como el libro son bastante recomendables siempre y cuando notemos el fin profundo que es el transitar de lo ordinario a lo que da un sentido último a la vida que es la espiritualidad…cualquiera que sea la religión que se practique el fin no debe ser otro que la completa e integral transformación.
AUTOR: Pilar Vázquez, colaborador de la gran familia de la Hermandad Blanca
Preciosa pelicula
"Perder el equilibrio por amor es parte de estar en equilibrio"
yo soy luz lo siento te amo perdon gracias gracias gracias confio limpio suelto quien como dios