El amor de la Tierra, por Pamela Kribbe
La Madre Tierra nos habla hoy a través de este mensaje canalizado por Pamela Kribbe. A pesar de los difíciles momentos por los que atravesamos, siempre tenemos a nuestra madre que vela por nosotros.
La voz de la Tierra nos dice:
«Querida gente, soy la voz de la Tierra y les doy la bienvenida.
Te llevo en mí, y en amor y entrega fluyo a través de ti. Vivo dentro de las células de tu cuerpo. Te expresas a través de mí, pero también encuentro expresión a través de ti.
Deja que la energía de la Tierra fluya en ti
Disfruto estar contigo y experimentar la vida en la Tierra a través de tu conciencia humana. Me gustaría que te decidieras a rendirte a mí; que te atrevas a entregarte a tu cuerpo, tus sentimientos y el flujo de vida que hay en tu interior. Ese es mi deseo.
Siente el poder de mi amor por ti. Eres mi hijo, me tienes como madre. Quiero que me experimentes y me aceptes como una energía de apoyo en tu vida, pero que no lo hagas a través de tu mente y los procesos de pensamiento que te han enseñado.
En esencia, mi energía no funciona de manera determinante y directiva, sino que fluye con un ritmo natural y espontáneo. Cada vez que tu alma se conecta conmigo al dejarte llevar por la vida, bailamos y experimentamos la vida juntos.
Luego conectas la energía de tu alma, tu corazón cósmico, con mi energía terrenal en una conexión que fluye de arriba hacia abajo, en plena entrega a las grandes fuerzas de la vida, tanto cósmicas como terrenales, y sin la intervención de la mente y todos sus procesos.
Este es el nuevo humano que aparecerá en la Tierra, el que reconoce y experimenta sus raíces terrenales y cósmicas, y se siente como uno con esa experiencia. Lo que sucederá ahora en todas partes, es que las personas van a conectarse más, tanto con su origen cósmico como con su vida terrenal a través del cuerpo en el que habitan.
Toma un momento y considera el cuerpo humano como una puerta de entrada para que la energía cósmica fluya hacia la Tierra.
Esta semana todos ustedes han estado en diferentes cuevas (en el sur de Francia). Estas son puertas físicas para que la energía cósmica entre en la Tierra, tal y como su propio cuerpo funciona a modo de puerta de entrada.
Tu cuerpo está compuesto de las energías poderosas y fundamentales de los elementos de la Tierra, que tienen como base: solidez, estabilidad y paz.
Sin embargo, al mismo tiempo, contiene una puerta de entrada de energía, una abertura para que los rayos de luz inspiradores fluyan desde el Sol Cósmico hacia la Tierra.
Tu cuerpo necesita estar anclado sobre y en la Tierra; estar completamente arraigado aquí, necesita nutrición, no solo comida física: pan y agua, sino también comida etérea: la sensación de ser uno con la naturaleza al conectarse con árboles, plantas y animales; sentir el sol en su piel, flotar en agua refrescante, respirar aire fresco y sentir el calor de un fuego.
Todos estos elementos, mis elementos de agua, fuego, aire y tierra, son tantas energías espirituales como las de los maestros y ángeles a los que veneras. Mis energías espirituales están aquí entre nosotros, y a través de los elementos terrenales que yo proporciono, puedes unirte a ellas.
Estas energías terrenales espirituales están en todas partes en la Tierra. Observa a tu alrededor las flores que crecen en el campo, y las plantas y hierbas que te ofrecen lo que necesitas como ser humano.
Abraza estas energías de la Tierra y siente mi poder: ¡este es tu hogar! Y cada vez que te sientas terrenal y arraigado, y te atrevas a alimentarte con todo lo que necesitas, física y enérgicamente, entonces la puerta de entrada se abre a la luz de tu alma.
Esa puerta de enlace forma una conexión con este mundo terrenal, y permite que este mundo florezca al infundirle luz cósmica.
Siente por un momento lo que necesitas en tu propia vida para lograr esta interacción de la mejor manera posible.
Comienza sintiendo a través de tu cuerpo ese fundamento terrenal en ti mismo. Siente tu cuerpo anclado en mí. Aquí, en este entorno (en el sur de Francia), donde la naturaleza es salvaje y libre y se ha cultivado y modificado lo menos posible, puedes experimentar más fácilmente el flujo puro de la energía de la Tierra.
Tu cuerpo reconoce y responde a esta energía, y no tienes que hacer nada en tu mente para que eso suceda. Simplemente recuéstate en la hierba y admira la naturaleza y la energía que te llega espontáneamente.
Conecta con la Tierra siempre que puedas
Siente esa energía fluyendo hacia tus pies y verás cómo tu cuerpo recupera una sensación de mayor plenitud y solidez.
Puedes percibir la paz y la tranquilidad de las rocas debajo de ti, con su cubierta de tierra milenaria. Esta energía terrenal está ahí y te llega porque tú mismo eres parte de la naturaleza, al igual que los animales, las plantas y las piedras, el agua y el aire.
Así como ellos lo son, también eres una parte importante y un componente de la naturaleza. Abraza y acepta la realidad y la belleza de este hecho.
Esto también significa que cuando regreses a su hogar después de esta visita y hayas retomado tu vida cotidiana, recordarás sentir cómo es estar conectado con la Tierra y así obtendrás la calma que necesitas.
Tómate en serio el ritmo natural que tiene tu cuerpo y no te dejes desviar por las muchas demandas que te llegan de la sociedad. Esas demandas no te llevan a donde tienes que estar, más bien te alejan de tu esencia. Así que descansa un poco y relájate, sintiendo los elementos de la Tierra.
Aprecia estos elementos terrenales y recréate con ellos. Solo entonces se puede abrir la puerta para que la luz de tu alma se manifieste verdaderamente en tu vida diaria.
Haz una conexión ahora con la luz de tu alma. Has sentido lo que es estar arraigado y conectado conmigo, la Tierra, y has sentido lo que es recibir en tu propio cuerpo las fuerzas espirituales de los elementos terrenales.
Ahora imagina qué la fuerza cósmica y la luz del alma quieren entrar en ti. Visualízalas descendiendo del cielo sobre ti.
Siente tu propia luz solar, la fuerza de tu alma, y recíbela en tu corazón. ¡Mira cómo brilla en tu interior! Y observa cómo la energía de la Tierra recibe y responde a esa luz dentro de ti. ¡Qué delicioso es experimentar este resplandor!
Lo terrenal y lo cósmico son energías que responden y se necesitan mutuamente, no son energías opuestas.
La energía de la Tierra en tu cuerpo se revitaliza y se llena de alegría y está inspirada en la luz cósmica que eres, y esta unión de energías toma forma terrenal a través de ti. La luz cósmica no quiere nada más que estar aquí y fluir a través de las células de tu cuerpo, para ayudar a que la Tierra sea fructífera y dé a luz cosas nuevas y maravillosas.
Eres muy bienvenido aquí. ¡Necesito tu luz! Físicamente, como la Tierra, no puedo vivir sin la luz del Sol, y energéticamente, también necesito tu luz cósmica.
Y eso solo puede fluir hacia mí cuando te permites ser recibido por mí; cuando confías en mí y te sientes como en casa aquí. ¿Ves cómo ambas energías están ahora unidas en ti? Tu luz estelar cósmica unida a tu cuerpo, el ancla terrenal. Deja que se mezclen y fluyan juntas por tu cuerpo.
Lo terrenal y lo cósmico: aspectos complementarios
Aquí está entonces la unión de las energías masculina y femenina; las energías tanto de dar como de recibir: el Sol y la Tierra.
Permita que estas energías unidas y unificadas fluyan a través de ti en círculos cada vez más amplios; no solo en tu cuerpo, sino en todo tu campo energético, tu aura. Permite que estas energías te renueven y te recuerden quién eres realmente: un ser que juega en la luz; un ser vivo presente aquí temporalmente para interactuar alegremente con mi energía en la Tierra.
Vuelve a experimentar la unión íntima de la energía de la Tierra y la luz cósmica que eres. Dale la bienvenida e incorpora ese sentimiento de intimidad, y llévalo contigo cuando regreses a tu hogar.
Ahora, por un momento, mira tu vida cotidiana desde la perspectiva de ese sentimiento de la unión íntima de las energías. Simplemente siente intuitivamente, y sin pensarlo, que estás allí en tu hogar.
Mira si puedes encontrar una parte de tu vida allí que cambiarías para estar más en equilibrio con tu verdadera naturaleza.
¿Qué puedes hacer por ti mismo, física o emocionalmente, a través de lo cual te sientas más nutrido y con más tranquilidad, relajación e inspiración? Hazte la promesa de que te lo vas a conceder. Haz más espacio en tu vida para nutrirte de manera terrenal y celestial.
Finalmente, me gustaría pedirte que sientas las grandes fuerzas que te acogen en esta vida. Debajo de tus pies, recibe los poderes nutritivos de la Madre, la Tierra y, desde arriba, los brazos amorosos del Padre que te protege y te aprecia.
Siente esta totalidad de fuerzas desde arriba y debajo de ti, y permite que ocurra su unión. Para esto solamente debes soltar el exceso de pensamiento y acción; sabe que eres llevado por fuerzas mayores que te aman, que quieren lo mejor para ti. Renuncia al control y permítete ser arrastrado por una gran ola de energía.
Un nuevo mundo te espera, y una vez que te rindes a ese flujo de energía, te conviertes en uno de los que se preparan y dan forma al nuevo mundo. Eso está pasando hoy en día, hay tanto que está evolucionando ahora en la Tierra.
El mayor paso para ti es atreverte a rendirte a las fuerzas de la Tierra y el Cielo.
Te quiero, siente mi mano en la tuya, nunca estás solo»
Mensaje canalizado por Pamela Kribbe.
Puedes ver el texto original aquí en el siguiente enlace:
https://www.jeshua.net/channelings/earth-speaks/the-love-of-the-earth/
Versión en español por Fanny Zapata, redactora y traductora en la hermandadblanca.org.
Maravillosa fusion cósmica y terrenal. Gracias por tan bella canalización y a mi Madre Tierra por su Amor INCONDICIONAL.Bendiciones y luz
GRACIAS MADRE GAIA
Gracias gracias gracias