Las leyes físicas y las leyes universales son innegables. Actúan de forma constate y perfecta. Queridos guerreros de luz, hoy quiero hablarles sobre la hermosa ley de atracción. Saber hacer un buen uso de su magnetismo y su fuerza, para lograr beneficios y bienestar.
Todo lo que está en tu mente y en tus emociones, vibra. Al igual que tus palabras y acciones.
Pensar en algo es crearlo, o invitarlo a que se manifieste en nuestra vida. Por ello, debemos poner especial cuidado con lo que dejamos entrar a nuestra mente y al corazón, y con lo que dejamos salir de nuestros labios y con lo que hacemos. Las vibraciones de la energía que emanamos al pensar, sentir, decir o hacer, salen de nosotros y por magnetismo se adhieren y atraen a sus equivalentes energéticos.
Hay una anécdota inglesa que deseo compartirles. Narra la historia de un pastor de cabras, alrededor del 1710. Aquel pastor procuraba el sustento de su familia mediante la venta de la leche de su rebaño.
Un día, mientras guiaba su carreta a un pueblo cercano, encontró a un anciano, sentado a la orilla del camino. Cuando pasaba a su lado, el anciano le dijo al pastor que agradeciera su fortuna. Según el hombre, ese día el sol había salido más temprano y era de muy buena suerte. El pastor simplemente lo creyó y regresó a su casa con mucho dinero de la venta.
Lo que conocemos como sugestión, no es otra cosa más que la energía emanada de nuestra consciencia. La ley de atracción.
Si pensamos y actuamos de forma positiva, sólo cosas positivas atraeremos a nosotros. Si nos permitimos sentir y decir cosas negativas, sufriremos las consecuencias. En su libro, “There’s a spiritual solution to every problem” (Dr. Wayne W. Dyer. HarperCollins Publishers, New York, N.Y. 2001), el Dr. Dyer, nos expone lo que él llama: escalas de atracción.
Dichas escalas plantean que, según la frecuencia vibratoria de nuestra energía, será la calidad de lo que atraeremos. Vibración baja: 10,000 ciclos por segundo o menor. Manifiesta enfermedad, miedos, ansiedad, depresión. Conciencia egocéntrica. Mal humor y pérdidas. Vibración alta: 100,000 ciclos por segundo o mayor. Manifiesta salud, alegría, entusiasmo. Empatía, logros y éxitos. Consciencia divina del YO y de unidad. Aunque se mencionan muchas escalas intermedias. Sólo estamos mostrando las extremas para ejemplificar cómo funciona la atracción energética del universo.
Lo que atraemos está ligado a la frecuencia vibratoria que surge de nosotros. Evita o elimina cualquier energía de baja densidad.
No debemos perder de vista que, esta ley, igual que todas, sólo obedece. No es capaz de decidir por sí misma, por lo tanto atraerá bueno o malo según la calidad y cualidad de nuestra energía emanada. Solemos generar energía basándola en lo que percibimos a través de los sentidos. Recordemos que mucho de lo que vemos, oímos, etc. Sólo es aparente. Y necesitamos enfocarnos en la voz interior y en la verdad cósmica de que la perfección existe en todo.
Si tienes problemas financieros, o de pareja, o de salud, deja de pensar en ello. Y peor aún, no se te ocurra empezar a imaginar escenarios trágicos al respecto. La intensidad que le imprimas a tus pensamientos también alterará el resultado. En lugar de eso, debes equilibrar tus ideas y emociones. Pon atención en lo que dices y en tus acciones. No te conviertas en un creador involuntario de cosas negativas.
Trascender sobre lo aparente y reconocer la perfección y divinidad del todo, te brindará armonía.
Sé que suena complicado. Pero si te esfuerzas por mantener tu pensamiento positivo, eventualmente todo mejorará. Escucha tu voz interna, ámala y agradécele por estar ahí. Ella nunca te abandona. Eleva tu frecuencia vibratoria hoy y siempre. No lo olvides.
AUTOR: Kikio, redactora en la gran familia hermandadblanca.org
Para saber más:
Ley de Atracción – Libros Espirituales PDF
Mensaje de los Ángeles y Guías: La Ley De La Atracción
Muchas gracias
gracias, namasté
Gracias Namasté
yo soy luz clarificadora de dios en ti confio gracias gracias gracias asi sera para el bien mayor de todos.