LIBERTAD Y EMPODERAMIENTO – Jesús a través de Patricia Casidis

“¿Por qué es tan necesario hoy recuperar el empoderamiento? Además, ¿cuándo y cómo la han perdido?»

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Amado y amado:

Os traigo mi energía y mi amor de nuevo…

Me gustaría hablarte de lo que a menudo llamas «empoderarte a ti mismo» o, podríamos decir, «recuperar tu propio poder».

¿Y por qué es necesario recuperarlo? O más bien, ¿cuándo y cómo lo perdieron?

Comparando de nuevo a la Humanidad con las aguas de un río, podríamos decir que, en un principio, antes de que se forme el río, sólo hay aguas esparcidas por el suelo, que brotan o llegan a la superficie de la tierra desde alguna fuente: una pendiente , derritiéndose, desde capas subterráneas…

Una vez que el agua llega a la superficie o cae sobre ella, comienza a viajar por la tierra y se abre camino hacia diferentes lugares. Gratuito, solo acondicionado y limitado por el suelo.

La superficie le presenta diferentes desafíos y luego su flujo se dispersa, se debilita, se absorbe o se evapora. Por otro lado, las partículas de agua que se mantienen unidas, se suman, se fortalecen y forman un caudal que luego se convierte en río.

Asimismo, «las aguas de la Humanidad», es decir, las personas, desde tiempos primitivos, al encauzarse para fortalecerse con el todo, estaban de alguna manera, DEBILITANDO SU INDIVIDUALIDAD.

Casi sin darse cuenta, al perder sus libertades de ser parte del «río», perdieron sus singularidades y su propio poder, depositándolo en unos pocos: los que estaban construyendo la estructura, el canal, los que ponían barreras , es decir, los que dirigían, los que organizaban.

Este grupo menor fue recibiendo paulatinamente el poder cedido y, gobernados por su afán de dominación, encauzaron el «río de la Humanidad» en la dirección que mejor servía a sus propósitos. En diferentes lugares y tiempos, todos aquellos que se atrevieron a intentar cambiar esto han sido perseguidos y silenciados a través de diferentes recursos, pero siempre con el mismo objetivo: sostener este esquema de dominados y dominados, dejando así una marca, una herida. en la conciencia colectiva de la humanidad.

En este presente, las estructuras se han vuelto tan complejas que los límites y barreras son más imperceptibles y ahora la pérdida de libertad y singularidad es más perceptible. De ahí la importancia de despertar conciencias, de expandir la claridad, de recuperar su luz y su verdad.

Para completar el inmenso cambio por el que están pasando, es necesario recuperar el poder que han cedido. Tu propio poder es tu libertad, la libertad de PODER SER, la libertad de MANIFESTAR TU ESENCIA. Y para ello, es necesario recuperar también su esencia singular y su verdad. De esta manera encontrarán el EQUILIBRIO necesario para transitar y concretar este inmenso proceso de cambio.

La idea de recuperar el propio poder o, como suelen llamarlo, su empoderamiento, a veces genera un poco de distorsión, ya que hay diferentes formas de entender el PODER y muchas veces se confunde con DOMINIO, convirtiéndose así precisamente en lo que se combate. y reaccionando a algo que otros quieren imponerles por la fuerza, imponiendo también por la fuerza la posición opuesta.

Quienes, por una o varias razones, se han sentido débiles, condicionados o dominados, fácilmente pueden convertirse en opresores y expresar una violencia que no conduce al resultado deseado. De ahí la importancia del equilibrio y la coherencia individuales. Equilibrio entre poder y empatía. Equilibrio entre tu individualidad y ser parte de un grupo. Equilibrio entre libertad y respeto. Equilibrio entre dar y recibir.

El poder genuino, el propio, no se recupera luchando o enfrentando lo que los oprime. Tampoco se trata de éxito, logro o reconocimiento. No encontrarás poder genuino en tu posición social, ni en tu familia, ni a través de tus bienes.

Todos estos son pilares externos que hasta ahora podían servir para apoyarse en ellos y sentirse apoyados. Pero como se han estado desgastando para sostenerte y han puesto toda su energía en ello, su luz se ha atenuado. Ellos bien saben hoy que estos pilares son volátiles, impredecibles, cambiantes; que les hizo vivir en una falsa sensación de poder, seguridad y libertad.

El empoderamiento no es confrontar o gritar más fuerte que los demás. Tampoco se trata de liderazgo o ser líderes o seguirlos. No se trata de cumplir con estereotipos o moldes ni de sostener una programación antigua. su propio poder No es algo que encontrarás afuera. No es algo forzado o algo que tenga que ser de una forma u otra, no es algo que deba seguir modelos o algo que se enseña o se aprende. Para recuperarlo, tienes que ACCEDER A TU SENTIMIENTO MÁS PROFUNDO.

Empoderarte es redescubrirte a ti mismo, reconociendo tus propios dones, virtudes y fortalezas. También equilibra debilidades, inseguridades, miedos y heridas. Se está afirmando. Está de pie sobre su propio eje de forma segura. Es tener la libertad y la fuerza de SER EN ESENCIA, confiando en la certeza que te da mostrar TU VERDAD.

Tu esencia es lo que ERES, lo que APORTAS EN TI, lo que TE DIFERENCIA.

Los abrazo con profundo amor y respeto. Sepa que siempre estamos con usted.

MAESTRO JESÚS (acompañado…)

Canalizado por Patricia Casidis
www.patriciacasidis.com

FUENTE: https://mivozestuvoz.net/2022/03/13/libertad-y-empoderamiento-jesus-a-traves-de-patricia-casidis/