Cómo el mago protege sus formas mentales

La creación del mundo, según los Anunnaki, se produjo por una ruptura entre el Cielo (Anu) y la Tierra (Ki), a raíz de la intervención de Enlil, el Señor del Viento. Enki, el Dueño de los destinos vertería sobre la Tierra el agua necesaria para la vida. Según la versión griega, antes de que apareciera el Olimpo, sede de los dioses y morada de Zeus, reinaba el Caos, origen de toda Creación.

 La astrología se basa en la mitología, viendo en los mitos, los arquetipos de todos los comportamientos y hábitos intelectuales, morales y afectivos de hombres y mujeres.  “La lucha por la existencia” y “la supervivencia del más apto” reinó suprema desde el momento en que el cosmos vino a la existencia.

La guerra relatada en el Mahabharata y la actual última guerra, tuvieron las raíces de sus dificultades y las simientes de los desastres que produjeron, una, en el mundo astral inferior y la otra, en el superior. Egoísmo y deseos de orden inferior fueron los impulsos detrás de ambas.

La guerra ha logrado mucho,  relegando las cosas al lugar que les corresponde y, por perder sus posesiones, muchos han aprendido el valor de lo esencial y la necesidad de eliminar lo superfluo. Por ejemplo, se  cambió rápidamente la pregunta de que “¿existe la vida después de la muerte?» por «¿de qué naturaleza es la vida futura?», y esto es portentosamente alentador.

OBJETIVOS:

• Justificar la importancia de los arquetipos en la formulación de leyes.
• Justificar la importancia de los sueños en la creatividad.
• Enunciar las fases del proceso creador.

REGLA ONCE

Aquel que trabaja con la ley tiene ahora que llevar a cabo Tres cosas: Primero, descubrir la fórmula que confine las  vidas dentro de la muralla esferoidal; luego, pronunciarlas palabras que le expresen a esas vidas qué deben hacer y dónde llevar lo que ha sido hecho; finalmente, pronunciar la frase mística que lo salvaguardará de su trabajo.

AXIOMA: El agua formó la tierra; el cielo fue producido por el fuego; y el producto del cielo y la tierra fue el aire, que mantiene el equilibrio. En un Año encontramos el invierno y el verano, y las estaciones intermedias que marcan el equilibrio. En el Hombre la cabeza corresponde al fuego, el estómago  al agua, y el pecho  al aire que  marca el equilibrio.

Alan Turing  fue niño muy interesado en la lectura, los números y la naturaleza, quien  debía recorrer  90 kilómetros diariamente  para poder ir a la escuela. Su carácter inconformista  le llevaron a seguir sus propias ideas y apartarse del rígido (e ilógico, según su parecer) sistema educativo.  Alan sufrió acoso escolar al mostrarse diferente a sus compañeros y la muerte de su primer amor adolescente lo hizo pedazos,  dudó de la religión y se volvió ateo. Alan se convirtió en un matemático brillante y un atleta notable de rango casi olímpico. Alan Turing estuvo  al mando de una división de la Inteligencia británica, diseñó tanto los procesos como las máquinas que, capaces de efectuar cálculos combinatorios mucho más rápido que cualquier ser humano, fueron decisivos en la ruptura final del código, fue  procesado por homosexualidad en 1952 y dos años después de su condena murió. Se especula que por suicidio o asesinato. El código enigma es un biopic bélico brito-estadounidense, con cierto suspense de 2014 sobre la vida de Alan Turing.

Dom Cobb es un ladrón prófugo de la justicia estadounidense, que se especializa en infiltrarse en los sueños para robar ideas, claves de bancos, etc. todo mientras sus víctimas duermen, esto lo logra a través de un sueño inducido por un  dispositivo conocido como «la máquina de los sueños». Ésta administra un potente sedante que les permite compartir un mundo de sueños construido por la imaginación del atacante, luego es ocupado por proyecciones mentales del subconsciente del sujeto al que se le extrae la información, para así lograr que la persona no sospeche que está soñando. En el mundo de los sueños, el dolor es experimentado como real psicológicamente, pero el resultado de la muerte es el despertar. Cada miembro del equipo lleva consigo un tótem, un objeto que conocen a la perfección y que les permite distinguir si se encuentran en el sueño de otra persona o en la realidad. El origen  es una película estadounidense de ciencia ficción del año 2010.

• Después de ver las películas El código enigma y El origen, responder las siguientes preguntas. ¿Cuál es la diferencia entre una guerra política y una económica?  ¿Cuál fue el aporte de la guerra a las telecomunicaciones? Cuál es la función de las polaridades en la sexualidad humana?  ¿Cuál es la relación entre arquetipo, tótem y tabú?, ¿Cuál es la diferencia entre sueños y deseos?, ¿Cómo ayudan los principios de la termodinámica a comprender los sueños? ¿Cuál es la relación entre los sueños y el mito del minotauro? ¿Cómo diferenciarías estos cuatro tipos de personas: dormido, soñador, despertando, despierto?

El concepto aplicado de la energía siempre concierne a la conducta de fuerzas, es decir, de sustancias en movimiento, pues sólo de ese modo se da la energía a la experiencia: sólo por la intuición de la conducta de sustancias en movimiento, de ahí la importancia de diferenciar fuerza y energía. La fuerza psíquica es la condición previa para que en el alma ocurra proceso alguno y para que llegue a tener cierto grado de acción. La energía psíquica, en cambio, sería «la posibilidad, implícita en los procesos mismos, de actualizar esa fuerza en sí». La experiencia sólo nos da específicamente la energía como movimiento y fuerza, cuando es actual, o como situación o condición, cuando es potencial. Cuando es actual, la energía psíquica se manifiesta en los fenómenos dinámicos específicos del alma, como instinto, deseo, voluntad, afecto, atención, rendimiento, etc., que son precisamente fuerzas psíquicas. Cuando es potencial, la energía aparece en las específicas habilidades, capacidades, posibilidades, disposiciones, actitudes, etc., que son todas condiciones suyas.

Carl Jung denominó sincronicidad a los casos especiales en donde la energía física y la energía psíquica se manifiestan como dos aspectos de una misma realidad.

La Conciencia divina, expresión de la divina Siquis se manifiesta eventualmente en las tres características sicológicas sobresalientes de la divinidad: Luz, Energía y Magnetismo. En el ser humano, reflejo microcósmico del Macrocosmos, estas cualidades se expresan mediante las palabras: Iluminación (Sabiduría),  Inteligencia (Actividad) y Atracción  (Amor).

La conciencia es una especie de órgano de percepción y de orientación dirigido, en primer lugar hacia el medio ambiente, está localizada en los hemisferios cerebrales, de los que es una de las funciones. La conciencia, a su vez, como órgano de orientación utiliza cuatro funciones para orientarse en el espacio exterior: la sensación, el pensamiento, la intuición y el sentimiento. Estas funciones están dotadas cada una de una energía específica; les es inherente una tensión energética, que preside su actividad. Si una de estas funciones no es empleada, se desarrolla y se pierde en el inconsciente.

La psique posee un sustrato general que trasciende todas las diferencias de cultura y conciencia, al que se le ha denominado inconsciente colectivo. Se trata de comunes instintos de representación y de acción. Todo representar y actuar conscientes se han desarrollado de esos prototipos inconscientes.

Muchos de los que antes eran dioses han pasado de ser personas a ser ideas personificadas y, finalmente, a ideas abstractas, pues los contenidos inconscientes vivificados aparecen siempre primero como proyectados hacia afuera y, en el transcurso del desarrollo espiritual, son paulatinamente  asimilados  por la conciencia y reformados en ideas conscientes.

Una vez que se haya admitido la realidad de la existencia del alma, prevalecerá acrecentadamente la tendencia a dejar que las personas sean guiadas y dirigidas por el propósito de sus propias almas, siempre que comprendan lo que les está sucediendo y puedan discernir entre:

1. El surgimiento ascendente del yo subconsciente a la zona iluminada de la conciencia.
2. La actuación, la fuerza y el reconocimiento del yo inmediatamente consciente.
3. La afluencia que desciende del yo superconsciente, el alma, trayendo inspiración, intuición y conocimiento superiores.

Estas palabras -subconsciente, consciente y superconsciente- necesitan ser definidas para el propósito de este curso; se las interpreta muy libremente y significan cosas muy distintas de acuerdo a la escuela sicológica de pensamiento a que pertenece el estudiante.

Se emplea el término subconsciente para significar la vida instintiva de la forma, las tendencias heredadas y las predisposiciones innatas, las características adquiridas y acumuladas (adquiridas en encarnaciones pasadas, frecuentemente aletargadas, a no ser que sean repentinamente evocadas por la urgencia de las circunstancias) y todos los deseos y anhelos no formulados que impulsan al hombre a la actividad, además de los deseos reprimidos y no reconocidos y las ideas inexpresadas, presentes aunque incomprendidas. La naturaleza subconsciente es como una profunda laguna de la cual un hombre puede extraer casi todas las experiencias pasadas, si lo desea, cuyas aguas pueden ser agitadas hasta convertirse en una caldera hirviente, causando muchos trastornos.

Lo consciente se limita a aquello que el hombre sabe lo que él es y posee en la actualidad -el tipo de las cualidades, las características, los poderes, las tendencias y los conocimientos de cualquier índole, constituyen los dones naturales del hombre, de los cuales éste o el sicólogo, es definidamente consciente. Los expone a la vista de todos y hacen de él lo que aparentemente es ante el mundo que lo observa.

Por superconsciente se quiere significar esos poderes y conocimientos disponibles, con los cuales no se ha hecho contacto todavía ni se han reconocido y no tienen, por lo tanto, aplicación inmediata. Constituyen la sabiduría, el amor y el idealismo abstracto, inherentes a la naturaleza del alma, pero que aún no han sido ni serán parte del equipo disponible para ser utilizado.

Hemos visto que las zonas del cerebro pertenecen al cuerpo físico (materia) y los centros energéticos pertenecen al cuerpo psíquico (conciencia). La mente como electricidad y principio animador de la conciencia misma, crea un campo magnético para trabajar por gravedad (materia)  y magnetismo (conciencia).

El viaje  hacia el inconsciente es la travesía heroica de la individuación, en el mito del héroe en sus etapas de preparación, travesía y retorno, encontramos las tres estructuras de la psique, el camino a la iniciación. En el camino el héroe se encuentra con arquetipos que actúan como guías y a la vez estructuran las etapas del viaje. Los arquetipos son los relatos míticos de héroes y heroínas interiores, los deseos más profundos de nuestra alma colectiva. Los arquetipos son concentraciones universales de energía psíquica.

• Trata de recordar tus series de televisión favoritas en la niñez. Cuál era tu héroe o heroína preferidos? Con cuál Dios o Diosa te identificas?

El sueño es una representación simbólica de contenidos inconscientes. Las principales causas que producen una angustiosa vida de sueños, consiste, en todos los casos, en la frustración o en la incapacidad que tiene el alma para imponer sus deseos o designios sobre su instrumento, el hombre. Estas frustraciones se agrupan en tres categorías: Frustración sexual, Ambición frustrada y Amor frustrado. Donde haya estos tres tipos de frustración existirá, frecuentemente, una vida de sueños vívida y malsana, impedimentos físicos de diversa índole e infelicidad cada vez más profunda. Observarán que estas frustraciones constituyen, como es de esperar, simples expresiones del deseo frustrado, y es en este sector particular  donde necesaria y principalmente el sicólogo  lleva a cabo su trabajo.

Ahora surge el interrogante sobre el origen de los sueños, enumeraré simplemente los orígenes y dejaré que el estudiante de psicología aplique adecuadamente la información cuando enfrente algún problema vinculado con los sueños. Estas fuentes son aproximadamente diez, y podrían definirse de la manera siguiente:

1. Los sueños producidos por la actividad cerebral.
2. Los sueños en que se recuerdan cosas.
3. Los sueños que constituyen recuerdos de actividades reales.
4. Los sueños de naturaleza mental, son fundamentalmente de tres tipos:
5. Los sueños basados en el contacto establecido con el mundo de las formas mentales.
6. Los sueños de naturaleza geométrica en los cuales el sujeto se da cuenta de esos diseños, formas y símbolos básicos que constituyen los anteproyectos de los arquetipos que determinan el proceso evolutivo, produciendo oportunamente la materialización del Plan de Dios.
7. Los sueños que constituyen presentaciones simbólicas de las enseñanzas recibidas en el Aula del Aprendizaje, mientras duermen los aspirantes y discípulos en el nivel más elevado del plano astral y en el Aula de la Sabiduría, en el plano mental.
8. Los sueños que registran el trabajo realizado.
9. Los sueños telepáticos.
10. Sueños que son dramatizaciones del alma.
11. Los sueños que son relacionados con el trabajo grupal.
12. Sueños donde se reciben instrucciones.
13. Sueños conectados con el plan mundial.

El hombre que aún no ha despertado es aquel cuyos rayos de los cuerpos mental y emocional son muy difíciles de determinar porque hay muy poca expresión mental y experiencia emocional. Sólo se definen claramente el rayo del alma y el del cuerpo físico, los demás rayos se insinúan solamente.

Hombre soñador es aquel  cuya  personalidad ha logrado el punto más elevado de independencia, es decir, antes que el alma controle conscientemente y actúe en forma predominante.

Hombre que está despertando es aquel que está en un momento de crisis determinante, en que luchan el alma y la personalidad, donde la batalla por la reorientación ha alcanzado su punto culminante.

Hombre despierto es aquel cuya orientación ha sido alterada y el énfasis puesto en las fuerzas de la vida ha cambiado y el hombre se convierte en un discípulo aceptado.

La intuición en cuanto proceso inconsciente, cuyo resultado es una ocurrencia, se presenta como irrupción de un contenido inconsciente en la conciencia. Por esto la intuición es una especie de proceso perceptivo, pero en contraposición con la actividad sensorial consciente y la introspección, es una percepción inconsciente. El lenguaje corriente refiriéndose a la intuición habla también de aprehensión «instintiva», porque la intuición es un proceso análogo al instinto, con la única diferencia de que el instinto es un impulso adecuado a una actividad a veces muy complicada, y la intuición la aprehensión inconsciente adecuada a una situación con frecuencia sumamente compleja. Los instintos y  los arquetipos de la intuición constituyen lo inconsciente colectivo.

El Sello de Salomón o la cruz de David son símbolos unificadores. El zodíaco también es uno de ellos, así como los hexagramas del I Ching. Un símbolo unificador tiende a conciliar todo lo que, a priori, parece irreconciliable, a juntar los contrarios y a unir los opuestos.

En la regla que estamos considerando, se dice que el aspirante debe realizar tres cosas:

1. Averiguar la fórmula que cristalizará esa forma que él ha construido en modo muy similar a como los arquitectos, o constructores de puentes, reducen la forma empleada a una fórmula matemática.
2. Pronunciar ciertas palabras que darán vitalidad a la forma y de esa manera conducirla al plano físico.
3. Expresar la frase que separe la forma mental de su aura y así evitar el drenaje de sus energías.

Se observará que la fórmula tiene relación con la forma mental, las palabras de poder con el objetivo para el cual la forma ha sido construida, y la frase mística concierne al corte del eslabón magnético que une al creador con su creación. Por lo tanto una corresponde a la forma, otra al alma incorporada en la forma (cuya característica inferior es deseo, el reflejo del amor) y la última al aspecto vida con el cual el creador dotó a su creación. Por consiguiente enfrentamos nuevamente las eternas triplicidades espíritu, alma y cuerpo.

1. Averiguar la fórmula que confine las vidas dentro de su muralla esferoidal.

Puede afirmarse que esta Vida inteligente crea en su meditación y por consiguiente en su mente reflexiva, lo que llamamos una forma mental. Esta forma mental tiene cuatro características principales:

1. Es traída a la existencia mediante, el uso consciente de la Ley de Atracción.
2. Es formada por un infinito número de entidades vivientes que son atraídas por la mente del divino Creador, entrando en relación entre sí.
3. La forma es la exteriorización de algo que su Creador:
4. Ha visualizado.
5. Ha construido inteligentemente, «matizado» o «calificado», a fin de cumplir el propósito para el cual estaba destinado.
6. Ha vitalizado con la potencia de su deseo y la fuerza de su pensamiento viviente.
7. Ha mantenido formado durante el tiempo necesario para efectuar su trabajo específico.
8. Ha conectado en sí mismo, por un hilo magnético, el hilo de su propósito viviente y la fuerza de su voluntad dominante.
9. Este propósito interno, que se ha revestido de sustancia mental, astral y vital, es potente en el plano físico mientras:
   1. Permanece conscientemente en el pensamiento de su Creador.
   2. Conserva «su distancia», en sentido esotérico, de Su Creador. Muchas formas mentales son inútiles por estar «demasiado cerca» de su Creador.
   3. Pueden ser dirigidas en cualquier dirección deseada, y de acuerdo a la ley de menor resistencia pueden encontrar su propio lugar, ejecutar su función deseada y llevar a cabo los propósitos para los cuales fueron creadas.

Por lo tanto la «fórmula» puede ser considerada como la idea que emana del divino Pensador; podría ser definida como el propósito dinámico, la «cosa» como la ve el Pensador y la exterioriza en su mente y la visualiza como portadora de su intención.

2. Pronunciar las palabras que le expresen a esas vidas qué deben hacer y dónde llevar lo que ha sido hecho.

El propósito de la palabra pronunciada es decirle a las vidas que constituyen la forma «qué deben hacer y dónde han de llevar lo que ha sido hecho». Así nos encontramos con la diferencia entre propósito, estrategia y meta.

3. Finalmente, pronunciar la frase mística que lo salvaguardará de su trabajo.

Por lo tanto, al finalizar el trabajo mágico de creación, se debe pronunciar una frase que efectúe la salvación y produce dos tipos de liberación –libera al agente creador de la forma que él ha creado, y emancipa a esa forma del control de quien la produjo.

Es evidente que la relación del lenguaje con las ideas encarnadas ha sido  comprendido por los publicistas. Estúdiese el método del lenguaje que es el principal factor empleado ahora para «lanzar una idea al mercado».

EL PROCESO CREADOR

El proceso creador de Dios, constituye la energía unificada de las tres personas, desde el punto de vista físico. En todo trabajo creador con materia mental, se ve al hombre como Trinidad activa, el creador, el preservador y el destructor, esto involucra la energía de la voluntad más la del deseo, alimentada por la energía del cerebro físico.

Las fases del proceso son las siguientes:

1. Concebir la idea.
2. Revestir la idea con materia.
3. Energetizar la idea, capacitando así a la forma para preservar su delineamiento y cumplir su misión.
4. Dirigir esa forma mental, vitalizándola continuamente, hasta haber logrado el objetivo, por medio del deseo y el amor.
5. Destruir o desintegrar la forma mental cuando se ha cumplido el fin deseado, retirando su energía.

Hemos visto que la creatividad es posible cuando los tres centros físicos de la cabeza comienzan a despertar del letargo y a entrar en actividad, sintiéndose el siguiente efecto:

1. Cuando despierta el centro principal de la cabeza la glándula pineal comienza a funcionar.
2. Cuando el centro del corazón está completamente activo entra en actividad la glándula pituitaria (hipotálamo).
3. Cuando el centro de la garganta ocupa su correcto lugar en el proceso evolutivo la glándula rima (tálamo).

Por medio de la glándula pineal, órgano de la percepción espiritual, el hombre comprueba la voluntad y el propósito del Alma, y desde allí extrae de los niveles superiores la energía necesaria, vía el centro coronario y el hilo de la vida.

Por medio de la glándula  pituitaria, queda disponible el segundo elemento del deseo o la energía constructora de la forma y, de acuerdo a la ley de atracción, puede moldear y construir con sustancia lumínica.

Cuando  la glándula rima, síntesis de la energía nerviosa, ha despertado, se puede materializar y activar la forma deseada que está en proceso de construirse  mediante la energía atractiva.

El proceso de construcción está fundado en la relación existente entre los polos opuestos. Los centros físicos son receptivos a la influencia positiva que ejercen los centros de fuerza. La Voluntad del alma encuentra receptividad en el cerebro físico, mediante la fuerza atractiva del deseo. Este proceso de construcción se divide en tres partes que se superponen y parecen simultáneas.

Cuando el ser humano es un experto en meditación, el trabajo de crear mentalmente se efectúa con mayor rapidez hasta sobrepasar  la actividad del período inconsciente.

Por lo tanto, comenzando con el reconocimiento de la intención egoica en el cerebro físico, el hombre procede a construir la forma para su idea. Empieza primero a organizar el material requerido en el plano mental. En este plano el impulso adopta su forma primaria. En el plano astral  se efectúa en gran parte el proceso de vitalización, puesto que la duración de la vida de cualquier forma mental depende de la persistencia y fuerza del deseo. En los niveles bioenergéticos del plano físico tiene lugar el proceso de concreción física. Hay una analogía exacta con el trabajo de los nueve Sephirot de la cábala:

El de los tres primeros corresponde al impulso del Alma.  Sonido, color y vibración que, de acuerdo a la Ley de Analogía, reflejan los tres aspectos del macrocosmos.

El del segundo grupo de Sephirot tiene su analogía en el trabajo llevado a cabo en la etapa  del impulso mente-deseo, emanado conscientemente del cerebro de un hombre.

La tarea de los tres últimos se termina cuando la forma mental, ya revestida de materia astral y mental, se hace objetiva en el plano físico.

En términos de transmutación y tal como lo vemos en los hexagramas del I Ching, los cambios se producen aplicando calor: los elementales del fuego: humedad, calor y brillo.

Primero la humedad lenta y omnienvolvente: luego el calor que se acrecienta y arde intensamente; después la fuerza que oprime, impele y concentra. Así se produce  el brillo, la exudación, la mutación, el cambio de forma. Finalmente se libera y escapa la esencia volátil, volviendo el residuo a la sustancia primordial. El proceso en ocho fases se realiza de la manera siguiente:

1. La forma es sometida al calor externo.
2. El calor, actuando sobre la forma, produce exudación y sobreviene el factor humedad.
3. La humedad y el calor desarrollan su acción al unísono.
4. El calor interno del átomo aumenta.
5. El calor del átomo aumenta rápidamente y sobrepasa al calor del medio exterior.
6. El átomo irradia.
7. La pared esferoidal del átomo se derrumba con el tiempo.
8. La vida central escapa para fusionarse con su polo opuesto, convirtiéndose en polo negativo que busca el positivo.

REFERENCIAS

Carol S. Pearson. El Héroe interior. Barcelona: 1991.

Carl G. Jung. Energética psíquica y esencia del sueño. Buenos Aires: Paidós. 1954

Stanislav Grof. La evolución de la conciencia. Barcelona: Kairós. 1994