Nasa Descubre Un Tercer Cinturón De Radiación Alrededor De La Tierra.
NASA DESCUBRE UN TERCER CINTURON DE RADIACIÓN ALREDEDOR DE LA Tierra.
PRIMERA FOTO
Dos franjas gigantes de radiación, conocidas como los Cinturones Van Allen, rodeando la Tierra, fueron descubiertos en 1958. En 2012, observaciones desde las Sondas Van Allen mostraron que un tercer cinturón puede aparecer algunas veces. La Radiación aquí es mostrada en amarillo, con g (NASA/Van Allen Probes/Goddard Space Flight Center)
Two giant swaths of radiation, known as the Van Allen Belts, surrounding Earth were discovered in 1958. In 2012, observations from the Van Allen Probes showed that a third belt can sometimes appear. The radiation is shown here in yellow, with g (NASA/Van Allen Probes/Goddard Space Flight Center)
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En Agosto 31, 2012, una prominencia gigante en el sol hizo erupción, enviando fuera partículas y una onda de choque que viajó cerca de la Tierra. Este evento puede haber sido una de las causas de un tercer cinturón de radiación que apareció pocos días después alrededor de la Tierra.un fenómeno.
On Aug. 31, 2012, a giant prominence on the sun erupted, sending out particles and a shock wave that traveled near Earth. This event may have been one of the causes of a third radiation belt that appeared around Earth a few days later, a phenom (NASA/SDO/AIA/Goddard Space Flight Center)
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La Misión de las Sondas del Cinturón de Radiación de Tormentas, parte del programa Viviendo con una Estrella de la NASA, proveerá conocimiento sin precedencia dentro de las dinámicas físicas de los cinturones de radiación.
Un anillo de radiación previamente desconocido para la ciencia rodeó temporalmente a la Tierra el año pasado siendo ahiquilado vistualmente por una poderosa onda de choque, dicen los científicos. Las Sondas gemelas espacialas Van Allen de la NASA, las cuales están estudiando los cinturones de radiación de la Tierra, hicieron un encuentro cósmico. El sorprendente descubrimiento – un nuevo aunque temporal, cinturon de radiación alrededor de la Tierra – lo cual revela como mucho permanece desconocido acerca del espacio exterior, aún de aquellas regiones mas cercanas al planeta, añadieron los investigadores.
Despues de que la humanidad comenzó a explorar el espacio, el primer mayor descubrimiento hecho fueeron los anillos de radiación Van Allen, zonas de partículas altamente cargadas energéticamente, magnéticamente atrapadas descubieras primero en 1958. «Eran algo que pensamos que habíamos entendido sobre todo por ahora, el primer descubrimiento de la era espacial,» dijo el principal autor del estudio Daniel Baker, un científico del espacio de la Universidad de Colorado. «Era tan sorprendente, que inicialmente tontamente pensé que los instrumentos en las sondas no funcionaban correctamente.» – Daniel Baker, un científico del espacio de la Universidad de Colorado
Estos cinturones se creían que consisten en dos anillos: una zona interna compuesta por ambos electrones de alta energía y los iones positivos muy enérgicos que permanecen estable en intensidad a lo largo de los años a décadas; y una zona externa compuesta principalmente de electrones de alta energía cuya intensidad oscila en el transcurso de horas o días dependiendo principalmente de la influencia del viento solar, la inundación de la radiación desde el sol.
[Cómo trabajan las Sondas Gemelas de Radiación la NASA (infográfico) /]
El descubrimiento de un nuevo cinturón de radiación temporal tiene ahora a los científicos revisando los modelos de cinturón de radiación de Van Allen para entender cómo ocurrió.
Anillos de radiación alrededor de la Tierra
Las gigantes cantidades de radiación que los cinturones de Van Allen generan pueden plantear serios riesgos para los satélites. Para aprender más sobre ellos, NASA lanzó naves espaciales gemelas, las Sondas gemelas Van Allen, en el verano de 2012.
Los satélites estaban armados con una serie de sensores para analizar a fondo el plasma, partículas energéticas, campos magnéticos y ondas de plasma en estos cinturones con resolución y sensibilidad sin precedentes. Inesperadamente, los sondeos revelaron un nuevo cinturón de radiación que rodean la tierra, un tercer cinturón de super-high-energy electrones incrustado en el exterior del cinturón de Van Allen cerca de 11.900 a 13.900 millas arriba de la superficie del planeta. Este anillo estable de radiación del espacio aparentemente fué formado el 2 de septiembre y duró más de cuatro semanas. «La característica fue tan sorprendente, que inicialmente tontamente pensé los instrumentos en las sondas no funcionaban correctamente, pero pronto me di cuenta que el laboratorio había construido esos instrumentos maravillosos que no había nada malo con ellos, así que lo que vimos debe ser verdad», dijo Baker.
Este recién encontrado cinturón de radiación entonces bruscamente y casi totalmente desapareció el 1 de octubre. Al parecer fue interrumpido por una onda de choque interplanetaria causada por un aumento en la velocidad del viento solar.
«Más de cinco décadas después del descubrimiento original de estos cinturones de radiación, aún se pueden encontrar cosas inesperadas nuevas allí,», dijo Baker. «Es un placer poder encontrar cosas nuevas en un antiguo dominio. Ahora tenemos que reevaluar completamente ambos teóricamente y Observacionalmente.»
Un misterio de radiación
Sigue siendo incierto cómo surgió este cinturón de radiación temporal. Los científicos de la misión de Van Allen sospechan probablemente fué creado por el viento solar / rasgando lejos el cinturón exterior de Van Allen. «Parece que su existencia puede haber sido sustentada por disturbios solares», dijo Baker.
El estudio de los cinturones de Van Allen puede revelar si tales anillos temporales de radiación son comunes o raros. ¿»Estos ocurren con frecuencia, o tuvimos suerte y vimos una circunstancia muy rara que ocurre sólo una vez en cuando»? Baker dijo. . «Y lo que otras revelaciones inusuales podrían venir ahora que estamos realmente ante estos cinturones de radiación con herramientas nuevas y modernas?»
Los científicos detallan sus hallazgos en línea el 28 de febrero en la revista Science..
