Obtienes lo que piensas: cómo utilizar la ley de atracción
La ley de atracción es una ley universal, como la ley de gravedad, por ejemplo. No puedes escapar de su alcance. El principio de esta ley es: “te conviertes en lo que más piensas y también atraes lo que más piensas”, tal como lo expresa Rhonda Byrne en su best seller “El Secreto”.
Como solían decir nuestras abuelas: “ten cuidado con lo que pides, porque puede hacerse realidad”, conociendo la ley de atracción, ten por seguro que se hará realidad.
La ley de atracción nunca te confunde ni te decepciona. Funciona siempre. Debes saber que obtienes lo que piensas sin excepciones, te guste o no, lo quieras o no.
La ley de atracción responde en la vibración que estás ofreciendo.
Muchas personas dicen que no funciona porque quieren algo, desean tener o ser de una determinada manera, o conocer a alguien, lo desean. Pero no se dan cuenta de que, aunque saben lo que quieren, la mayoría de los pensamientos que tienen y palabras que pronuncian son opuestos a ese deseo.
Por ejemplo, si alguien quiere conocer al amor de su vida, es probable que tenga pensamientos similares a estos:
“Ya no quiero estar más solo. Quiero conocer a una persona que me haga compañía y me ayude a salir de mi soledad.” Entonces el foco está en la soledad, los sentimientos son de escasez, lo que se atrae es más soledad.
Una vez que comprendas las emociones que hay detrás de los pensamientos, nunca más dejarás la vibración de tus pensamientos y emociones librada al azar.
¿Por qué funciona la ley de atracción?
1 Eres parte de la energía de la Fuente/Dios.
2 El mundo físico es el medio perfecto para crear.
3 La gran variedad, de cosas, experiencias, personas, que existe puede satisfacer tus deseos o preferencias.
4 Cuando tienes un deseo, la fuerza creativa del universo comienza a moverse hacia él para materializarlo.
5 No hace falta que conozcas el proceso, o que te preocupes en cómo llegará eso que quieres.
¿Cuáles son los pasos para materializar un deseo usando la ley de atracción?
1. Pide
Da una orden al universo, como Aladino al genio de la lámpara.
Escríbelo, anótalo en un cuaderno “de los deseos” o en una pizarra. Debes escribirlo en presente, como que ya lo estás viviendo. Por ejemplo: “Tengo una maravillosa pareja y compañero/a con quien compartir mi vida.”
Imagina tu vida ideal y descríbela como si ya la estás viviendo. Piensa en cómo sería un día de esa vida y descríbelo. Siente que ya estás ahí, en ese tiempo y lugar.
También puedes conseguir una foto de lo que quieres y tenerla siempre a la vista. Debes tenerlo claro, y no enviar frecuencia confusa.
2. Cree
Confía en que llegará. Da por seguro que ya lo tienes. Imagínate poseedor de eso que quieres.
No dudes, ya está llegando, debes creer que ya lo has recibido y actuar en consecuencia. Es decir, actuar con la tranquilidad de saber que ya está en camino, como cuando haces una compra online y sabes que en pocos días estará en tu puerta.
No necesitas saber cómo sucederá no te aflijas, solo cree, ten fe. El universo hará su trabajo.
3. Recibe
Siéntete bien, agradecido y abierto a recibir. Siente que ya tienes lo que pediste.
Puedes decir: “Ahora estoy recibiendo todo lo bueno que hay para mí, ahora lo recibo.”
También debes estar abierto a escuchar a tu intuición y confiar en tus instintos, recibirás señales que te guiarán para que obtengas eso que pediste.
Recuerda que las emociones son importantes. No puedes pedir con el intelecto algo que tus emociones no aceptan, porque eso no llegará. Escucha a tu cuerpo y sabrás que es lo que en verdad necesita y acepta.
Deben estar el pensamiento y la emoción en la misma frecuencia. Debes pedir con todo tu ser.
Practica y cuando logres eso que pediste, ¡pide otra cosa! El universo se expande cada vez que lo haces.
¿Has intentado usar la ley de atracción alguna vez?
REDACTORA: Carolina, redactora de la gran familia de la Hermandad Blanca
REFERENCIAS: Rhonda Byrne, 2007, El Secreto. Barcelona, Ediciones Urano.
