“Un padre no tan padre”: ¿Para qué las etiquetas?

La película “Un Padre no tan Padre” es de producción mexicana y aunque está llena de humor contiene gran cantidad de mensajes que podemos aplicar en nuestra vida diaria y en nuestro crecimiento Interior.

En la película podemos apreciar a un padre y la relación que tiene con su hijo, el más pequeño de la familia. No es un secreto que la mayoría de las personas hemos vivido lo que se conoce como Brecha Generacional y aunque parece que navegamos sin dificultad a través de  ella…es más difícil de lo que parece.

La relación entre generaciones está normalmente plagada de etiquetas, por ejemplo cuando vemos a nuestros abuelos tal vez pensamos que son anticuados, que no disfrutan de la música, que no entienden a los jóvenes, que son formales, estrictos y rígidos. La realidad es que posiblemente no nos  hemos dado la oportunidad de apreciar todo lo que son a plenitud.

Si no lo apreciamos en los abuelos, podemos verlo también en nuestros padres, tíos o amigos cercanos que nos dieron en algún momento un consejo u orientación, nos enseñaron tal vez a ver lo fácil y lo emocionante en lo complejo…la riqueza de la experiencia y lo que les fue sencillo ó difícil en el transcurso de los años. Además cuando lo vivimos con tolerancia permitimos que al aprendizaje se le agregue una buena dosis de humor.

Por ejemplo, qué sentimos si visualizamos a nuestra abuela o a cualquier otro ser querido importante en nuestra vida que al abrazarnos nos llena de buenos deseos y aparece una sincera lágrima de amor incondicional en su rostro, o a nuestro abuelo, tal vez con un rostro cansado por el arduo trabajo que se sienta a nuestro lado y nos pregunta ¿Cómo te ha ido en el colegio?, ¿tienes amigos?, ¿te gusta lo que estudias?…¿quieres que juegue contigo?….es en estos momentos que las etiquetas se derrumban o al menos debemos permitir que eso suceda.

En el lado opuesto podemos observar que a los jóvenes se les ve en ocasiones como poco serios, orientados únicamente a la diversión, sin obligaciones significativas y de alguna manera como personas que no tienen nada que aportar debido aún a su corta experiencia….esto también es resultado de las etiquetas que limitan…en muchas ocasiones la espontaneidad, la motivación y la pasión que imprimen en lo que se proponen es algo que podemos valorar y disfrutar.

Esta película muestra como chocan o se encuentran, por así decirlo, dos generaciones, para descubrir que lo que los une no es la edad, ni el conocimiento acumulado  es en realidad el respeto a las preferencias y costumbres de los demás,  la atención a los detalles significativos y  la tolerancia a lo que no nos es familiar….disfrutar de la compañía más que enfocarnos únicamente  en las diferencias.

En la actualidad esto parece utópico, algo así como que tal vez solamente en nuestros sueños es posible y no es así…algunos maestros realizados afirman que el grave error que cometemos es buscar en lo complicado el sencillo secreto de la felicidad.

Cuando hacemos a un lado nuestros puntos de vista egocentrados, observamos que la felicidad de los que nos rodean nos alimenta, es como si nos dieran una rica dosis de aceptación…en realidad debemos comprender que somos seres  bondadosos, compasivos y amorosos que nos conformamos con solamente ser humanos y nuestra naturaleza es más que eso es un mundo de infinita compasión.

No se pierdan ésta película, véanla  con los lentes del análisis introspectivo y deléitense con las diferencias de edades, gustos, costumbres y circunstancias…en realidad si nos lo permitimos estamos convirtiendo nuestro sendero o vida en un laboratorio de crecimiento personal  y bienestar.

AUTOR: Pilar Vázquez, colaborador de la gran familia de la Hermandad Blanca