¿ Que nos aporta el sonido azul a la práctica de las llamas sagradas de nueva frecuencia?
El sonido azul es una experiencia en sí mismo, las ondas rebotando por la sala, impactando con todas tus células y haciendo vibrar tu cuerpo en otra frecuencia de manera consciente de que lo que está ocurriendo.
Vas observando cómo se va produciendo y es una experiencia en sí como algo que podemos describir de maravillosa.
Y no solo es un sonido, sino el sonido azul que ha sido creado conscientemente para estas actividades concretas, con toda la intención, con todo el «Yi» enfocado y direccionado intensamente hacia esta dirección de manifestar dentro de nuestras posibilidades y vibración las secuencias más parecidas que han resonado para este rayo.
Antes de crear este sonido conscientemente para todas las prácticas del rayo azul de nueva frecuencia, lo que hicimos fue conectarnos a través de la oración en esta frecuencia y así sintonizarnos con ella, con su conciencia, con su sabiduría, con su olor, con sus emociones y sentirnos así lo más cerca posible de la mismísima esencia de la llama azul para materializar un sonido en la tierra lo más aproximado posible y con cuencos que nos habían llegado desde diferentes partes del mundo, alguno de ellos con prisa por asistir a esta creación.
Y es que si tenía que llegar bastantes días después de esta creación, el señor cuenco atravesó todo el mundo para llegar justo unos días antes, llegó como gritando y dejándose abrazar para venir sin casi ni sentir porque, pero cuando las cosas son así, sabes que son así.
Sentirse parte de una creación así que compartirán seres durante un largo e inagotable período de tiempo, por todo el mundo, atemporal y en altas frecuencias, es simplemente maravillosos y de un agradecimiento pleno.
Cada persona es responsable de mantener su individualidad aunque participe en un grupo, el sonido azul nos acompaña a nuestro eje.
El conocimiento por el que cada persona avance con las llamas sagradas y/o rayos metafísicos de nueva frecuencia en las gamas azules y que contacte con nuestra actividad y prácticas, vendrá acompasado y acompañado tanto por las ondas sonoras; atravesando por su sala y rebotando con sus cuerpos físicos y energéticos, como por las ondas lumínicas, emparejadas a las ondas sonoras, rebotando también y dando una vibración multiplicada.
Durante las diferentes actividades que vamos realizando, eso se siente cada vez más y se va intensificando a medida que nos vamos rindiendo a nuestro ser y vamos dejándonos transportar ha estado más ligeros y amorosos.
No es ni mejor ni peor que otros sonidos que se han creado para la práctica consciente del rayo azul, simplemente es nuestra aportación en una de los miles de frecuencias que presenta, si te resuena, entenderás e integrarás el porqué de nuestra actividad. Si no, pues estará tan perfecto como lo contrario. No será más quien resuene ni menos y viceversa.
Todo esto se realiza de seres conscientes a seres conscientes, desde la máxima humildad a la que nos permitimos sentir en este momento y sobre todo desde el máximo respeto y amor incondicional que nos acompañan a todos los que estamos aquí para generar este cambio de paradigma de la tierra hacia Gaia.
En esta misma revista de la gran hermandad blanca que tanto agradecemos la oportunidad y el esfuerzo para que tengamos un espacio para compartir nuestros avances vamos colgando cada práctica con las llamas sagradas azules para que puedas disponer de ellas de manera gratuita y sea accesible a su expansión constante.
En cada práctica además dispones de una pequeña parte con la teoría que envuelve esa práctica para que así vayas sintiendo su resonancia.
Nuestra actividad no se basa en la práctica común de un rayo por día de la semana, aunque tampoco negamos esta práctica pues es de intención maravillosa y generalmente llena de amor, aunque sí que consideramos que es algo que quizás en una mayor fusión con los rayos y la información que estos comparten, pues como todo, mayo sentido cobran.
Las diferentes prácticas con los rayos son evolutivas.
No es lo mismo empezar a hacer una práctica cada día con un rayo diferente durante toda la semana e ir repitiendo esa actividad semana tras semana que ir llama a llama hasta conocer el que pertenece a cada cual.
En la primera parte se me hace muy cuesta arriba imaginar que alguien puede ir distinguiendo que característica pertenece a uno u otro sin el tiempo de integración, pues lo que nos va pasando en el día antes, el mismo día y el día después de cada práctica con cada llama, tiene una relación directa.
Si hacemos cada día un rayo, ¿Cómo saber a cuál pertenece lo que está pasándonos durante la semana?
Un abrazo y feliz practica en sentir el azul, envuélvete en él y déjate llevar desde un amor pleno por ti.
me encanta.