Cómo quitar la ira: la neurociencia pide aplicar 3 nuevos y asombroso secretos

Tu cara está roja hirviendo de rabia, todo lo que quieres hacer es gritar y volver a gritar, parece que esto no va a ser bueno para nadie… pero ¿sabes cómo quitar la ira que tienes? Te invito para que conozcas las 3 maneras más eficientes para deshacerte de la ira, además, porque son avaladas por la neurociencia. ¡Eres Bienvenido(a)!

verás que los sentimientos de ira caerán en picada y los buenos sentimientos aumentarán. Aquí está el secreto al momento de responder ¿cómo quitar la ira?

Como profesional del Área Humana, he hablado y escrito antes sobre cómo tratar a otras personas que están enojadas, irritadas e irracionales, pero a esta vez, quisiera hacerlo a la inversa, pues aún no lo había hecho. Como persona ¿cómo quitar la ira en ti mismo?

Es un poco difícil porque muchas veces mirar hacía afuera es relativamente fácil, pero mirarnos hacía dentro sí que es difícil, e incluso, es incómodo.

Sin embargo, la idea es que nos vayamos despegando de ese miedo a conocernos, a pensarnos y evaluarnos, amarnos tal cual somos y a vivir nuestra propia experiencia de vida. Pero eso sería harina de otro costal, por lo pronto, vamos a centrarnos en cómo quitar la ira en ti mismo.

Para ello, quisiera mirar hacía la neurociencia, existe una manera correcta y una manera incorrecta de hacerlo. Te lo explicaré en detalle.

Cómo quitar la Ira según la Neurociencia

…verás que los sentimientos de ira caerán en picada y los buenos sentimientos aumentarán. Aquí está el secreto al momento de responder ¿cómo quitar la ira?

Así que, te invito para que profundicemos en esta investigación sobre cómo deshacernos de la ira, sabrás lo que estás haciendo mal, conocerás cómo hacerlo bien y cómo puedes hacer que tú y los que te rodean sean mucho más felices. ¡Ese es el reto!, ¿difícil?, ¡yo creo que no!, demos inicio.

Suprimir la ira es rara vez una buena idea 

Te ha pasado que en un evento de ira aprietas los dientes, los retienes, y aseguras que estás bien.

La buena noticia es que la supresión funciona, te lleva a que reprimas tus sentimientos y no mires enojado. Sin embargo, normalmente siempre es una mala idea, ¡muy mala!

Si evitas que tu ira salga y luchas contra tus sentimientos, lo único que empezarás a formar es un monstruo, ¡tus sentimientos se irán a formar más fuertes!

El escritor Oliver Burkeman en su obra «El antídoto: la felicidad para las personas que no pueden soportar el pensamiento positivo», asegura que: 

«…cuando a los sujetos experimentales se les cuenta un evento infeliz, pero luego se les indica que intenten no sentirse tristes por ello, terminan sintiéndose peor que las personas que están informadas del evento, pero no se les da instrucciones sobre cómo sentirse. En otro estudio, cuando los pacientes que sufrían trastornos de pánico escuchaban cintas de relajación, sus corazones latían más rápido que los pacientes que escuchaban audio-libros sin contenido explícitamente «relajante». Las personas en duelo que hacen el mayor esfuerzo para evitar sentir pena, según las investigaciones, tardan más en recuperarse de su pérdida».

Ahora, cuando intentas evitar llorar, las lágrimas no son catárticas, la verdad es que no te sientes mejor después. Así mismo pasa con nuestra amiga la ira.

¿Qué sucede en el cerebro cuando intentas reprimir ira? En realidad, lo único que lograrás será todo un río de realidades malas y angustiosas.

Tu capacidad para experimentar sentimientos positivos disminuye, pero no para los sentimientos negativos.

El estrés se dispara, y tu amígdala (una parte del cerebro estrechamente relacionada con las emociones) comienza a trabajar horas extras.

Ves cómo quitar la ira no es un tema tan fácil de fortalecer en nuestras vidas. Continuemos…

El Profesor de la Universidad de Stanford y psicólogo James J. Gross, a través de su «Manual de regulación de las emociones», indica que:

…los estudios experimentales han demostrado que la supresión conduce a una disminución de la experiencia de emoción positiva pero no negativa (Gross, 1998a; Gross & Levenson, 1993, 1997; Stepper & Strack, 1993; Strack, Martin y Stepper, 1988), un aumento en las respuestas del sistema nervioso (Demaree et al., 2006; Gross, 1998a; Gross & Levenson, 1993, 1997; Harris, 2001; Richards & Gross, 2000), y una mayor activación en regiones cerebrales generadoras de emociones como la amígdala (Goldin, McRae, Ramel , & Gross, 2008).

¡Increíble! Si reprimes tus sentimientos tu situación como persona enojada empeorará paulatinamente. Es como cuando alguien enciende un bosque, esa llama inicial da origen a una catástrofe de grandes proporciones.

Cuando sostienes tus emociones los picos de presión sanguínea no son buenos.

Los estudios muestran que a largo plazo esto puede llevar a relaciones pésimas que no son tan gratificantes.

Mi lo que dice James J. Gross en otro apartado de su «Manual de regulación de las emociones»:

«Socialmente, estudios experimentales han informado que la supresión conduce a menos simpatía por parte de los compañeros de interacción social, y a un aumento en los niveles de presión arterial de los compañeros (Butler et al., 2003). Los estudios correlacionales apoyan estos hallazgos de laboratorio. Las personas que suelen utilizar la supresión informan que evitan las relaciones cercanas y tienen relaciones menos positivas con los demás; esto encaja con los informes de los compañeros de que los supresores tienen relaciones con otros que son menos cercanos emocionalmente (English, John, & Gross, 2013; Gross & John, 2003; Srivastava, Tamir, McGonigal, John, & Gross, 2009).

Definitivamente, luchar contra tus sentimientos usa mucha fuerza de voluntad, lo que trae como resultado que tengas menos control de ti. Esto, te hace más propenso a que hagas cosas de las que te arrepentirás después de estar enojado.

El Texto ¿Por qué los malos estados de ánimo aumentan el comportamiento autodestructivo?, dice que:

«…el mal humor fomenta la toma de riesgos al alterar la autorregulación en lugar de alterar las utilidades subjetivas. Los estudios 5 y 6 mostraron que las tendencias de riesgo se limitan a estados de ánimo desagradables acompañados de una alta excitación; ni la tristeza ni la excitación neutral dieron como resultado un riesgo destructivo».

Ante la pregunta ¿cómo quitar la ira?, y aplicando los argumentos que hemos conocido hasta el momento, quizá podrías estar diciendo: “¡Sabía que embotellar mis sentimientos era malo!,¡debería dejar salir esa ira!”

Frente a esta postura, también existen varios argumentos que deseo compartir contigo en lo siguiente de este Artículo.

Puedes leer también: La Rabia Emocional

 No ventile su ira 

Si empiezas a golpear a las almohadas, la pared, o incluso a las demás personas, jamás será una buena idea.

Mira, básicamente, desahogar tu ira no la reduce, si la ventilas, su emoción empieza a intensificarse.

En su libro «Manual de regulación de las emociones» James J. Gross, indica que:

…centrarse en una emoción negativa probablemente intensificará aún más la experiencia de esa emoción y, por lo tanto, dificultará la regulación negativa, lo que llevará a un menor ajuste y bienestar.

Así las cosas, la invitación es que compartas tus sentimientos con las demás personas de manera constructiva, ¡siempre será una muy buena idea. Sin embargo, «sacarlos» de manera agresiva ventilando tu ira, esta acción tiende a aumentarla en proporciones bastante altas.

Quizá te estarás preguntando… pero, en realidad ¿cómo quitar la ira?, ¿qué funcionaría? Lo ideal sería que empieces por distraerte, y ¿por qué la distracción ayudaría? Porque tu cerebro tiene recursos limitados en ese momento. Si piensas en otras cosas totalmente distintas y positivas, significa que tienes menos capacidad mental para pensar en las cosas malas.

Conoce estas investigaciones:

La investigación sugiere que se debe a que tanto las tareas cognitivas como las respuestas emocionales utilizan los mismos recursos mentales limitados (Baddeley, 2007; Siemer, 2005; Van Dillen y Koole, 2007) … Es decir, los recursos que se utilizan para realizar una tarea cognitiva ya no está disponible para procesos emocionales. En consecuencia, las personas pueden librarse de los sentimientos no deseados al participar en una actividad cognitiva, como hacer ecuaciones matemáticas (Van Dillen y Koole, 2007), jugar un juego de Tetris (Holmes, James, Coode-Bate y Deeprose, 2008)…

¿Conoces esa famosa prueba de malvavisco que en muchas ocasiones se ha mostrado en televisión para realizar investigaciones?

Quienes investigan colocan a un niño solo en una habitación con malvaviscos. Si el niño puede resistirse a comerlo, obtienen dos malvaviscos más tarde. Los niños que tuvieron éxito en la espera lograron mejores calificaciones y más éxito en la vida; además que su actuación hizo que se libraran de la cárcel, ¡es broma!, solo era un experimento.

Este estudio ha dado de mucho que hablar, todos han querido opinar,  sin embargo, de lo que no suelen hablar es cómo los niños exitosos evitaron la tentación; cómo hicieron para no dejarse tentar por aquellas poderosas emociones mentales «¡cómeme!, ¡come el malvavisco ahora!

Para este cuestionamiento, la respuesta es clara, se distrajeron así mismo.

Walter Mischel, quien fue el investigador que dirigió el famoso estudio, explica en su libro «La prueba de Marshmallow: dominar el autocontrol», que:

Los retrasos exitosos crearon todo tipo de formas de distraerse y enfriar el conflicto y el estrés que estaban experimentando. Transformaron la situación de espera aversiva inventando distracciones imaginativas y divertidas que eliminaron la lucha de la fuerza de voluntad: compusieron pequeñas canciones («Este es un día muy bonito, ¡diablos!», «Esta es mi casa en Redwood City»), se hizo gracioso y Caras grotescas, sacaron sus narices, limpiaron sus canales auditivos y jugaron con lo que descubrieron allí, y crearon juegos con sus manos y pies, tocando sus dedos de los pies como si fueran teclas de piano.

Evidentemente, distraerse así mismo, también funciona con otras emociones «calientes», como la ira.

Sé que cuando alguien grita en tu cara es muy difícil distraerte, o cuando alguien te dice mentiras o te hiere. Sin embargo,  existe una maravillosa manera de hacer de esto algo fácil y atractivo, lo mejor es que está respaldada por la investigación en neurociencia. Te contaré al respecto.

 ¿La respuesta? «Re-evaluación» 

Te invito para que imagines la escena en la que alguien te está gritando, precisamente a una pulgada de tu cara.

Nuestra reacción humana es gritarte también, defenderte, e incluso golpearlo. Pero ¿y si te dijera que su madre falleció ayer?, ¿o que estaban pasando por un duro divorcio y simplemente perdieron la custodia de sus hijos? Lo más seguro es que lo dejarías ir, es más, estoy totalmente seguro que responderías a su ira con compasión.

¿Qué cambió? No es el evento distinto, la situación es la misma, pero la historia que te están contando sobre el evento lo cambió todo.

Ya lo dijo el famoso Albert Ellis, psicoterapeuta cognitivo que inventó la terapia racional emotiva:  «No te frustras por los acontecimientos, te frustras por tus creencias»

A la luz de estas investigaciones, los resultados muestran que cuando alguien te está explotando, una buena manera de «re-evaluar» la situación y resistir enojarte es simplemente pensar: «no es sobre mí, debe estar teniendo un mal día».

Frente a la pregunta ¿cómo quitar la ira?, y cuando de verdad estés pasando por una situación de estas, recuerda: «no es sobre mí, debe estar teniendo un mal día».

Como dijo el neurocientífico Jens Blechert en relación a algunas de sus investigaciones::

«Si está capacitado para re-evaluar y sabe que su jefe suele estar de mal humor, puede prepararse para una reunión», sugirió Blechert. «Él puede gritar y gritar y gritar, pero no habrá nada«.

Mira, cuando cambias tus creencias sobre una situación, tu cerebro cambia las emociones que sientes.

David Rock en su libro «Su cerebro en el trabajo: estrategias para superar la distracción, recuperar el enfoque y trabajar de manera más inteligente todo el día», asegura:

En uno de los experimentos de re-evaluación de Ochsner, a los participantes se les muestra una foto de personas que lloran afuera de una iglesia, lo que naturalmente hace que los participantes se sientan tristes. Luego se les pide que imaginen que la escena es una boda, que la gente llora lágrimas de alegría. En el momento en que los participantes cambian su evaluación del evento, sus respuestas emocionales cambian, y Ochsner está allí para capturar lo que está sucediendo en su cerebro utilizando un IRMR. Como explica Ochsner, «Nuestras respuestas emocionales finalmente fluyen de nuestras evaluaciones del mundo, y si podemos cambiar esas evaluaciones, cambiamos nuestras respuestas emocionales«.

Así es como la re-valoración también funciona para la ansiedad. Re-interpretar el  strés como emoción puede mejorar tu rendimiento en las pruebas.

Ahora, para que logres acertar en tu respuesta a cómo quitar la ira, quiero que conozcas lo pasa en tu cerebro.

Esencialmente, tu amígdala no se excita como lo hace con la supresión. De hecho, se empieza a calmar, hasta llegar totalmente a la serenidad.

Volviendo al «Manual de regulación de las emociones» de James J. Gross, dice:

La evidencia de que la re-evaluación puede influir directamente en este circuito de la amígdala proviene de hallazgos consistentes en estudios tomográficos de emisión de positrones (PET) y de resonancia magnética funcional (fMRI) en individuos sanos que muestran disminuciones dependientes de la re-evaluación en la activación de la amígdala en respuesta a estímulos negativos.

En vez de embotellar o reprimir tu ira, deberás decirte a ti mismo «están teniendo un mal día», verás que los sentimientos de ira caerán en picada y los buenos sentimientos aumentarán. Aquí está el secreto al momento de responder ¿cómo quitar la ira?

Retomemos a James J. Gross en su libro «Manual de regulación de las emociones»

En contraste, los estudios experimentales han demostrado que la re-evaluación conduce a niveles reducidos de experiencia de emoción negativa y mayor experiencia de emoción positiva (Gross, 1998a; Feinberg, Willer, Antonenko, & John, 2012; Lieberman, Inagaki, Tabibnia, & Crockett, 2011; Ray , McRae, Ochsner, y Gross, 2010; Szasz, Szentagotai, y Hofmann, 2011; Wolgast, Lundh, y Viborg, 2011), no tienen impacto ni disminuyen las respuestas del sistema nervioso simpático (Gross, 1998a; Kim & Hamann, 2012 ; Stemmler, 1997; Shiota & Levenson, 2012; Wolgast et al., 2011), y conduce a una activación menor en regiones cerebrales generadoras de emociones como la amígdala (Goldin et al., 2008; Kanske, Heissler, Schonfelder, Bongers, & Wessa, 2011; Ochsner & Gross, 2008; Ochsner et al., 2004) y estriado ventral (Staudinger, Erk, Abler y Walter, 2009).

Ahora, otra pregunta que también es importante resolver es ¿qué pasa con los resultados sociales?

De acuerdo a todas estas investigaciones, los expertos han llegado a concluir que las personas que re-evalúan reportan mejores relaciones, y sus amigos reportan estar totalmente de acuerdo.

Conoce esta otra cita del Dr. James J. Gross en su libro «Manual de regulación de las emociones»

La re-valuación, por el contrario, no tiene consecuencias adversas detectables para la afiliación social en un contexto de laboratorio (Butler et al., 2003). Los estudios correlacionales respaldan estos hallazgos: las personas que normalmente utilizan la re-evaluación tienen más probabilidades de compartir sus emociones, tanto positivas como negativas, e informan que tienen relaciones más estrechas con amigos, lo que coincide con los informes de mayor simpatía de sus compañeros (Gross y John, 2003; Mauss et al., 2011).

Ahora, si te enojas y comienzas a decirte a ti mismo: “¡Ellos están tratando de hacerme caer! ¡Quieren hacer mi vida miserable!” Eso también es una re-evaluación, no obstante, está hecha en la dirección equivocada. Te estás contando una historia que es incluso peor que la realidad. Esto hará que tu irá se dispare. ¡Jamás vayas a hacer esto!, ¡no lo hagas por favor!

Has visto como los infomerciales siempre dicen: “¡Pero espera, hay más!, te cuento que la re-evaluación tiene otro gran beneficio: ¿recuerdas cómo la supresión minó el autocontrol y te hizo hacer cosas de las que más tarde te arrepentías?

Bueno, al igual que los niños en el experimento del malvavisco, la re-evaluación puede aumentar tu fuerza de voluntad y ayudarte a comportarte mejor después de momentos intensos.

Walter Mischel explica:

Los experimentos con malvaviscos me convencieron de que si las personas pueden cambiar la forma en que representan mentalmente un estímulo, pueden ejercer el autocontrol y escapar de ser víctimas de los estímulos calientes que vienen a controlar su comportamiento.

¿Cómo te ha parecido el Artículo? Si en realidad para cómo quitar la ira empiezas a utilizar estas estrategias, te cuento que tu vida se irá por un muy buen camino, ¡llegarás a donde quieres ir!

Bien, quiero que me acompañes a realizar un buen resumen de lo que acabaste de conocer, y te asegures de una vez y para siempre, que la ira no regrese más a tu vida.

Resumen: ¿cómo quitar la ira?

…al practicar el perdón, en realidad estamos creando paz en las vidas de otros y en nuestro mundo.

Aquí te dejo resumido cómo quitar la ira de tu vida:

Muy raramente suprimas, o no lo hagas nunca Puede que no sepan que estás enojado, pero te sentirás peor por dentro y herirás tus relaciones personales y sociales.

Evita desahogarte. La comunicación es buena, pero la ventilación solo aumentará la ira. Te distraerá de lo realmente fundamental.

La re-valorización es sin duda la mejor opción.  Piensa dentro de ti, «No se trata de mí, deben estar teniendo un mal día «.

A veces alguien se mete debajo de tu piel y la supresión es lo único que puedes hacer para evitar una acusación de homicidio. Y, a veces, la re-evaluación puede hacer que usted tolere las malas situaciones de las que necesita salir.

Dicho es, contarte una historia más compasiva sobre lo que está sucediendo dentro de la cabeza de la otra persona suele ser la mejor manera de hacerlo. Así como el ejemplo que te conté sobre quien te gritó, pero sus causas para hacerlo eran por fallecimiento de un ser querido o por la pérdida de la custodia de sus hijos.

Para darle final a este tema, quiero que te preguntes ¿y cuál es el paso final para deshacerme de esa ira a largo plazo para que pueda mantener buenas relaciones en todo momento?

La respuesta tú la sabes, solo que en ocasiones nos olvidamos. Perdonar es la clave al momento de erradicar la ira para siempre y sostener excelentes relaciones.

Esto no es para ellos, es para ti. El perdón te hace menos enojado y más saludable.

El Perdón: Reflexión final

El perdón es un camino altamente poderoso para lograr la paz. 

Es posible que hayas oído decir que el perdón es algo que «hacemos» por nosotros mismos y no tiene nada que ver con los demás. En parte es cierto. Cuando perdonamos a alguien, sentimos que la carga se levanta de nosotros.

El dolor, el dolor y la angustia nos liberan del control y sentimos que somos libres. Nos sentimos ligeros. Una sensación de paz desciende sobre nosotros. O dicho de otra manera, ascendemos a un estado de paz.

Hay otro elemento para el perdón. Al que perdonas, también lo siente. ¡Sí!, ellos sienten la paz.

Piensa en alguien a quien le pediste perdón y realmente te perdonó. Te diste cuenta que te había perdonado porque lo sentías con energía.

Te sentiste ligero, amado y aceptado por ellos. ¿Puedes recordar un momento así? Un momento en que sentiste una sensación de paz cuando el otro te perdonó.

Entonces, al practicar el perdón, en realidad estamos creando paz en las vidas de otros y en nuestro mundo. Esta es una forma poderosa de crear paz.

También se aplica a perdonar a aquellos que ya han fallecido. El pasado, el presente y el futuro existen simultáneamente y, por lo tanto, cuando perdonas a los que han cruzado el puente del arco iris hacia el mundo de los espíritus, ellos también encontrarán la paz.

El perdón es un músculo espiritual que puedes construir con la práctica y de esta manera, como resultado, contribuir a la paz y al amor en tu vida y en nuestro planeta. 

Como dice el viejo refrán: «aferrarse a la ira es como beber veneno y esperar que la otra persona muera»

Así que recuerda en todo momento: «Sólo están teniendo un mal día».

¿Cómo te pareció este Artículo de cómo quitar la ira de tu vida?, ¿qué sentiste durante el desarrollo de tu lectura?, ¿tú qué crees en relación a este tema? te invito para que participes en nuestro Foro o en la sección de los comentarios. 

Finalmente, quiero invitarte a estar muy pendiente de nuestras próximas publicaciones, excelentes temáticas estamos trabajando para ti y trascendencia y evolución. Te deseamos éxitos y bendiciones abundantes, ¡Un Abrazo de Luz!

Autor: William Hernán Estrada Pérez, Redactor en la Gran Familia de hermandadblanca.org