Cuando el miedo está detrás de las noticias
Vivimos en un mundo lleno de noticias sobre amenazas que nos dan muchas razones para tener miedo. Desde la superpoblación del planeta, con su anunciado agotamiento de los recursos, hasta el calentamiento global, pasando por epidemias tales como SIDA, ébola, dengue, o H1N1, por mencionar solo algunas, tal parece que tenemos mucho de qué preocuparnos de acuerdo con las informaciones que circulan a diario por los medios de comunicación y por las redes sociales.
Y si a este panorama noticioso poco alentador le sumamos las continuas amenazas de guerras y conflictos como los de Palestina, Afganistán, Iraq, Libia, Siria y más recientemente Irán, así como las catástrofes naturales entre los que podemos mencionar los terremotos en Puerto Rico y Turquía, y los incendios forestales en el Amazonas y en Australia, es sencillo llegar a la conclusión de que vivimos en un planeta lleno de razones para estar asustados. Y de todo esto nos enteramos gracias a las redes sociales y medios de comunicación, los cuales nos mantienen «bien informados» al respecto.
Si no me creen, basta tan solo con dar una ojeada a los noticieros y a las redes sociales para confirmar lo que estoy diciendo. Pero, este artículo no está dedicado realmente a lo que los medios de comunicación y redes sociales consideran amenazas para la humanidad, sino al manejo que hacemos de las noticias. Y para ello, voy a utilizar como ejemplo una de las amenazas más recientes, la cual aparece en los encabezados de todos los medios de comunicación, así como se menciona en todas las redes sociales. Se trata del «coronavirus«.
Las amenazas generan miedo en el ser humano
Antes de continuar, quiero hacer énfasis en el impacto emocional que una noticia sobre una amenaza generan en el ser humano. Imagina, por ejemplo, que ves en un noticiero la información sobre una enfermedad nueva que es mortal, para la cual no existe cura, y que se esparce a lo largo y ancho del planeta sin ningún tipo de restricción. ¿Cómo te sientes al escuchar una noticia de este tipo? ¿Qué emoción experimentas al escucharla por primera vez? ¿Miedo? Pues sí. Miedo. Considero que el miedo es la emoción primaria que todo ser humano experimenta al escuchar una noticia de esta naturaleza.
El miedo es la causa raíz de todas las emociones negativas. Del miedo se desprende la preocupación, la ansiedad y el estrés, por mencionar solo algunas emociones negativas. Ante una amenaza que nos puede conducir a la muerte o que nos puede causar un daño significativo, la respuesta bioquímica natural es el miedo. Y si sentimos miedo, nos preocupamos, nos estresamos y nos ponemos ansiosos, entre otros efectos.
Así que puedo decir con seguridad que las noticias sobre las amenazas que enfrenta la humanidad, y que circulan a través de las redes sociales y medios de comunicación, contribuyen activamente a generar miedo, lo que incrementa los niveles de ansiedad, preocupación y estrés en los seres humanos. Pero ¿por qué experimentamos miedo?
En otros artículos he mencionado que el miedo y el amor son dos polaridades o extremos de la energía de la creación. El miedo representa el extremos más alejado de La Fuente, mientras que el amor es el más próximo a La Fuente, siendo La Fuente la energía creadora, Dios o como cada quien quiera llamarle. Cuanto más alejados estamos de ella, más desconectados estamos de nuestra esencia divina. Sobre esto hay más información en este artículo. Con esto, lo que pretendo transmitir es que la interpretación que hacemos de las noticias pueden contribuir a alejarnos de La Fuente.
Ahora bien, no pretendo desconocer que hay eventos que están ocurriendo alrededor del planeta que nos afectan de una manera que podríamos catalogar como negativa, en el sentido de que hay seres humanos que pierden la vida, quedan incapacitados o son afectados por enfermedades, catástrofes naturales o guerras. Esos eventos ocurren y tienen un impacto para la humanidad. Eso para mí está muy claro. Por eso quiero abordar el tema desde la perspectiva de cómo los seres humanos interpretamos las noticias que los medios de comunicación y redes sociales nos presentan.
¿Qué nos están diciendo los medios de comunicación y las redes sociales?
Usemos como ejemplo la noticia del coronavirus. Si nos damos un pequeño recorrido por los medios de comunicación y por las redes sociales en relación con las noticias, podemos ver titulares como este: «OMS declara emergencia de salud internacional por coronavirus» (Fuente: CNN / 30-Ene-2.020). Estamos hablando de que la Organización Mundial de la Salud considera al coronavirus una amenaza para la humanidad, lo cual a primera vista parece tener mucho sentido, considerando que es una enfermedad nueva, desconocida y mortal. Pero, si hacemos un análisis un poco más profundo podríamos encontrar algunas incoherencias e inconsistencias en el manejo de la noticia.
Si analizamos la información de la figura anterior, podemos observar que hay cerca de 7.800 casos reportados del virus alrededor del mundo, con un aproximado de 170 muertes causadas al 30 de enero del 2.020. Aunque pueden parecer alarmantes estas cifras, son bastante bajas comparadas con las de la gripe estacional, que es la gripe común, y que según la misma OMS presenta unas estadísticas más que lamentables. Se habla de entre 290.000 y 650.000 muertes por año debido a las epidemias de gripe. Más información al respecto la puedes encontrar en el enlace de la Organización Mundial de la Salud (OMS)
La gripe es una enfermedad viral, que para la OMS tiene 4 variantes, de los cuales sólo al primer tipo (Tipo A) se le atribuyen epidemias y pandemias. A su vez, el virus tipo A tiene subtipos, que dependen de la combinación de dos proteínas en su superficie. Por ejemplo, el virus H1N1 es un subtipo del virus tipo A. Y según información tomada de la página oficial de la OMS, el coronavirus pertenece a «una familia de virus que causan el resfriado común y enfermedades como el MERS y el SARS«.
Mi interpretación de estas informaciones que pueden ser vistas en la página de la OMS, es que el «coronavirus» es una variación de la gripe común, que continuamente está mutando, generando así nuevos tipos de virus. También interpreto que no es el primer coronavirus detectado, y que no es más mortal que todas las otras variaciones de la gripe que se han encontrado hasta ahora. Pero, de la manera en la que están planteadas las noticias, yo llegué a preocuparme, lo que hizo que investigara un poco del tema.
Ahora bien, considerando la información anterior, cabe hacernos las siguientes preguntas: si cada año mueren en el planeta entre 290.000 y 650.000 personas a causa de las diferentes variantes de virus que causan la gripe ¿qué hace tan importante la noticia de esta nueva variación de un coronavirus detectado? ¿o es que acaso hay algún otro interés por detrás de esa noticia? ¿Por qué no se le da la misma cobertura a las otras variantes de la gripe? ¿Y si ya son conocidas las curas para las otras variantes, por qué sigue muriendo gente a causa de ella?
Y aquí cada quien es libre de responder a esas preguntas como quiera. Pero, más allá de la respuesta que cada quien quiera dar a esas preguntas, regreso a las preguntas que hice al inicio de este artículo: ¿Cómo te sientes al escuchar una noticia de este tipo? ¿Qué emoción experimentas al escucharla por primera vez? ¿Miedo?
El miedo como arma de manipulación para crear realidades
Piensa en esto. ¿Te asusta algo que crees que nunca ocurrirá? ¿Te asusta algo que crees que es imposible que ocurra? Con seguridad tu respuesta será un rotundo NO. Porque la imposibilidad de que algo ocurra te genera seguridad. Solo te pueden asustar aquellas cosas que crees que te puedan ocurrir. Es decir, si te asusta contagiarte del coronavirus, es porque crees que eso puede ocurrir. Y es allí donde los medios de comunicación y las redes sociales juegan un papel muy importante.
Más allá de que exista o no un interés oculto en la cobertura y comunicación de esa noticia, es tu interpretación de ella lo que hará que esta forme parte de tu realidad o no. Si te asusta, entonces sientes miedo, ansiedad, preocupación o estrés. Y lo haces porque crees que eso te puede ocurrir a ti. Y si eso crees, te sumas a quienes creen lo mismo, lo que genera una consciencia colectiva que agrupa a quienes están resonando en la misma frecuencia.
Es decir, entras a formar parte de la consciencia colectiva que agrupa a las personas que creen que pueden contraer esa enfermedad. Y esto ocurre en otros planos, los planos mental, emocional y etérico, que es en los que creamos la realidad antes de que esta se materialice en el mundo físico. En otras palabras, estas contribuyendo a la materialización de un evento relacionado con esa noticia. Por ejemplo, una epidemia. Si sientes miedo de contagiarte es porque crees que eso es posible. Y si crees que es posible, lo haces posible…
El miedo es un arma de manipulación muy eficaz para hacer que la humanidad cree realidades alejadas de su propio bienestar. Y los medios de comunicación, así como las redes sociales, resultan ser instrumentos muy útiles para hacer creer a la población que algo es posible. Lo hacen de forma muy sutil, pero terminan generando un miedo contagioso en la población. E independientemente de que la noticia sea verdad o no, el impacto que causa en la población es lo que determina en gran medida la realidad que vamos a experimentar de forma colectiva.
El problema no son los medios de comunicación ni las redes sociales
Podríamos culpar a los dueños de los medios de comunicación y de las redes sociales del problema, pero en realidad no lo son, aunque tengan una participación si se quiere importante en los problemas que enfrentamos como humanidad al querer imponer sus puntos de vista e intereses al comunicar las noticias. Pero, el verdadero problema es la interpretación que hacemos de las noticias. Y la interpretación la hacemos nosotros.
El verdadero problema es que no analizamos. Estamos programados para creer. Hemos sido entrenados para elegir una fuente y creer lo que esta diga. Hemos sido preparados desde pequeños para elegir un bando y jurarle fidelidad, sin importar si ese bando representa o no nuestros verdaderos intereses. Hacemos una única elección y nos quedamos con ella, asumiendo que es correcta, verdadera, fidedigna, sin siquiera cuestionarla, porque eso de estar analizando todo el tiempo es muy difícil. Y a nosotros nos gusta lo fácil. Para eso es que hemos sido entrenados…
Creer es el camino fácil. Y estamos programados para buscar siempre el camino fácil. Creo que ese es nuestro mayor problema. No hemos desarrollado aún la curiosidad de entender algo en lugar de creerlo. Porque, al final, creer es más fácil que entender. Y una de las creencias más dañinas que hemos aceptado como humanidad es que lo más fácil es mejor. Es allí donde creo que se esconde la causa raíz de la manipulación mediática. No queremos saber, no tenemos interés en entender, porque eso requiere de un esfuerzo que no estamos dispuestos a hacer. Entonces, nos conformamos con creer. Y es así que vamos acumulando creencias sobre creencias.
Creemos, por ejemplo, que entender es algo muy difícil, solo reservado para ciertas personas especiales, los iluminados; creemos que alguien superdotado, el hijo de Dios, vendrá a «perdonarnos» todo lo malo que hayamos hecho y así ascenderemos al siguiente nivel de evolución; creemos que todo lo que existe es el mundo físico; creemos que podemos castigar a nuestros cuerpos con todo tipo de excesos y que eso no tendrá consecuencias; creemos que tenemos que competir en lugar de cooperar. En fin, creemos muchas cosas, pero sabemos muy pocas.
Es por eso que nos pueden manipular con tanta facilidad. Porque lo único que deben hacer es sugerir una posibilidad y hacerla viral en los medios de comunicación y en las redes sociales para que nosotros mismos nos encarguemos de materializarla en nuestra realidad. Así que concluyo que el problema no es que los medios de comunicación y las redes sociales estén en las manos equivocadas. El problema es que los seres humanos hemos perdido nuestro deseo de entender. Preferimos creer porque es más fácil. Y es justo eso lo que tenemos que arreglar.
Hay que sacar al miedo de la ecuación
Entonces, entra el miedo. Es justamente por nuestra ignorancia, por la ausencia de curiosidad por descubrir la verdad, que sentimos miedo. Tememos a lo que desconocemos. Pero como no queremos entender, cada vez acumulamos más miedos. Y está justamente en esa dirección la solución que propongo. Tenemos que empezar a ser críticos, analíticos y curiosos. Porque de esa manera, ante una campaña masiva de noticias sobre algún tema específico que represente una amenaza para la humanidad o para un grupo particular de personas, vamos a estar atentos, vamos a analizar y vamos solo a tomar de esta la información que nos sea útil, si es que hay algo, y vamos a descartar lo demás.
Tenemos que desarrollar un sentido analítico, crítico y auto crítico con respecto a cada noticia. Tenemos que tratar de descifrar lo que están tratando de conseguir con la noticia. El motivo ulterior. Y, además, tenemos que entender cómo nos sentimos con respecto a ella. Descubrir qué emoción experimentamos al leerla, verla o escucharla. Y, con esa base, ir más allá. Hacer un análisis personal y realizar la investigación que sea pertinente para establecer una opinión al respecto, si fuera necesario. Así sacamos al miedo y a sus derivados de la ecuación y le damos entrada al entendimiento.
¿Hay intereses ocultos detrás de la masificación de una noticia? En mi opinión, casi siempre los hay. Pero no tengo manera de saberlo, y mucho menos de controlarlo. Lo que sí puedo hacer es evitar que las noticias me afecten emocionalmente. Puedo tratar de entender lo que haya que entender detrás de cada una de ellas para evitar así sintonizar con el miedo y sus derivados. Y solo con eso estaré saliéndome de la agenda oculta de la noticia y estaré dejando de contribuir con aquellos que las generan. Con tan solo esa acción, ya la humanidad está ganando…
Autor: Rafael Bueno, redactor en la gran familia de hermandadblanca.org
Estar atentos y "saber" que ya paso lo de "viene el lobo"…
Nota para el editor: texto con enfoque caduco, de 3D. Estamos en transición hacia 5D, y el enfoque debería ser: "evita caer en el miedo, propagado por medios de comunicación y grupos de poder. Confía en que todo estará bien". Gracias, GHB.