Dar desde tu propia esencia: Un mensaje de Jeshua acerca de la vida
Saludos queridos lectores de la Gran Hermandad Blanca, a continuación les traemos un hermoso mensaje de parte de Jeshua, que nos habla de nuestra esencia y nuestra misión aquí en la tierra. Ha sido canalizado por Pamela Kribbe y esperamos que lo disfruten tanto como nosotros:
«Queridos amigos,
Yo soy Jeshua.
Estoy aquí como un amigo de ideas afines, un aliado. Les extiendo mi mano como su igual. No estoy exaltado por encima de ustedes, soy su amigo.
Me arrodillo ante ustedes porque son los pioneros en la Tierra. Están haciendo espacio para que una nueva conciencia descienda a la Tierra, así que deben hacer espacio para sí mismos también.
Tu esencia es poderosa
No tengan miedo de su verdadero ser. Reconozcan su propia magnificencia; llevan dentro de ustedes inmensos recursos del pasado distante. Esta no es la primera vez que están aquí en la Tierra. Han estado aquí muchas veces y también han viajado a otros lugares del universo y allí han ganado experiencia.
Conéctense con la sabiduría que han acumulado en su corazón a partir de todas sus experiencias. El corazón es el lugar donde todas las corrientes fluyen juntas como una y se unen en una luz que es suave y brillante a la vez.
Conéctense ahora con su corazón; desciendan con su conciencia al área de su pecho y sientan la luz que está allí. Es antigua, es eterna, y se hace más fuerte, más viva. Sientan el poder de su luz, a través del miedo y el dolor que está ahí, que también se le permite estar ahí.
Enfrenta tus miedos
Están aquí en la Tierra, en esta vida, para curarse a sí mismos; para ser libres. Ese es el significado más profundo de su vida en la Tierra: hacer un viaje a través del miedo e ir más allá. Para poder saborear la libertad de lo que realmente son, libres del tiempo y del espacio, de sus cuerpos.
Solo pueden adquirir verdaderamente esta libertad si se enfrentan al miedo, si se atreven a pararse en el centro de ese miedo, para permitir que se muestre su amor. Esa es también su tarea en este mundo, que no es huir del miedo, ni del mundo, ni de ustedes, sino permanecer erguidos y presentes desde su corazón en medio del miedo.
El miedo es la raíz de toda la negatividad que ven en este mundo. El miedo genera tensión en las personas y una sensación de amenaza contra la que deben defenderse. De esta forma, las personas se cierran a sí mismas de los demás.
El miedo también conduce a la falta de confianza, por lo que cuando hay una sensación constante de inseguridad dentro de ustedes, no pueden desarrollar su potencial. Construyen cercas, muros, que brindan una sensación de seguridad, pero esta seguridad es una ilusión. Entonces se volverán dependientes de esos muros y vallas, pero tarde o temprano la vida se abrirá paso.
¿Qué significa ser un trabajador de la luz?
La verdadera seguridad proviene de estar conectados a su centro más profundo, su propia divinidad. Ese es el lugar donde saben, se sienten, son libres. Ya no tienen que convertirse en algo, porque ya lo son. Son libres de viajar de una vida a otra. No están atados a una forma, a una personalidad, a una determinada máscara o mecanismo de defensa. Sientan esa libertad en lo más profundo de su ser.
Esto es lo que desean y lo que es bueno y natural para ustedes. Están aquí para lograr esa libertad por sí mismos. Toda persona que hace eso, que viaja a través de sus miedos humanos y permanece fiel al amor, irradia una luz en este mundo que toca los corazones de los demás.
Por eso los llamamos trabajadores de la luz: aquellos que difunden una nueva conciencia, que traen luz a un mundo de miedo con todos los excesos que acompañan a ese miedo.
Pero ser un trabajador de la luz significa que el trabajo esencial está en cada uno de ustedes. Si la luz está en su corazón, si están en llamas de compasión, si pueden mirar su propio miedo, su propia oscuridad, entonces la luz fluye de sus ojos, y a través de las palabras que dicen, hacia el mundo.
Con su forma de hablar y actuar, se convierten en una luz viva. Eso es también de lo que se trata ser un verdadero canal, un vínculo de energías. Se trata de transmitir su esencia, que es independiente de la forma física, del tiempo, del espacio, libre de miedos y desconfianzas.
Entra en contacto con tus guías espirituales
Toda canalización tiene como objetivo liberar esa esencia dentro de ustedes. Todos los guías que están con ustedes quieren cumplir este propósito; que sientan su presencia. Deben sentir a los ángeles o las energías de ayuda que están ahí a su disposición, aquellos que son adecuados para ustedes y quieren trabajar a la par, porque es una asociación entre iguales.
Estas energías de luz se reúnen en este espacio a su alrededor. Sientan cómo se merecen plenamente su energía, su sabiduría, porque ustedes son traductores, son constructores de puentes. Construyen una conexión entre su vibración y la de la Tierra, y pueden hacerlo porque son sabios.
Entienden la esencia de su mensaje, pero al mismo tiempo están conectados respecto a cómo funciona el mundo humano. Saben cómo piensa y se siente la gente, dónde están sus dudas y sus temores, y por eso son los traductores, los constructores de puentes. Pueden comprender la experiencia de otra persona porque conocen el miedo, la oscuridad y la duda humanos dentro de sí mismos.
Cuando alguien verdaderamente los escucha, pueden sentir que todas las palabras que dicen se entienden realmente. En un espacio que es compartido, que es íntimo, realmente se sienten reconocidos, así es como van a apreciarse más a sí mismos.
Es como si las otras personas los iluminaran y, por lo tanto, todo pudiera ser como es: todo lo verdadero y natural. Esa luz tranquiliza sus mentes y crea esperanza y optimismo en sus corazones.
Sus vidas vuelven a tener sentido; el canal está abierto para que sus almas puedan fluir. Eso sucede en un encuentro sagrado entre dos personas cuando ambos reconocen abiertamente su dolor más profundo, las emociones más pesadas, sus dudas internas, y ambos realmente se escuchan.
No es que deseen que estas emociones desaparezcan de inmediato, y tampoco que deseen ignorarlas o superarlas, sino que realmente deben prestarles atención, así como a los compañeros que charlan con ustedes.
Están aquí en la Tierra, en esta vida, para trabajar juntos con esas partes oscuras dentro de ustedes y viajar hacia la luz.
Es precisamente en el camino a la luz que estas partes oscuras cambian: el miedo, la ira, la resistencia se transforman en las más hermosas joyas, en sabiduría ancestral, en alegría, humor y conocimiento verdadero. Así que honren a esas partes oscuras de su interior.
Cuando logran hacer las paces con esas partes oscuras, sus corazones también son un espacio abierto para otras personas. Ya no están tan inclinados a juzgar lo que otros hacen o no hacen. Miran a los demás y, a veces, sonríen porque todo les resulta muy familiar. Y esta familiaridad crea la capacidad de escuchar y estar ahí como un puente para la otra persona.
Esa es también la relación que tienen con su guía, su maestro, su ángel del otro lado. Su guía quiere ser ese amigo que los escucha, y no de forma pasiva, sino viéndolos activamente como son y enfocándose en ustedes. Eso es lo que los guías les brindan: quieren que sean conscientes de quienes son realmente y de que pueden estar aquí tal como son, con sus talentos únicos. Un guía los hace más grandes, no menos.
Estos guías están a su servicio y quieren ayudarlos a alcanzar su esencia divina. Y mientras lo hacen, su luz se esparcirá por la Tierra, y eso es evidente.
Confía en tu intuición
Finalmente, les pido que ahora estén receptivos y se conecten con un guía o maestro que esté energéticamente presente con ustedes, pero que sea natural y cómodo.
No se esfuercen demasiado en sentir esa conexión; solo miren lo que hay ahí. Siéntanse en paz con ustedes mismos. Están bien como están; no necesitan hacer nada para obtener aprobación. Imaginen que su guía particular quiere decirles lo hermosos que son, y lo puras que son sus intenciones.
Sientan la energía de la aceptación y la contención. Si sus guías quieren regalarles algo, es esto: paz. No tener que juzgar constantemente, ni tener un millón de dudas, sino saber que son buenos como son, así que relájense. Reciban la energía de sus guías. Pueden sentir un nombre, ver una imagen o un color.
Manténganse abiertos a esa posibilidad. No descarten lo que sienten simplemente como imaginación. Atrévanse a confiar en su intuición y en lo que se presenta de inmediato sin pensarlo. Su intuición habla el idioma de sus almas. Vuelvan a confiar en lo que sienten.
Los saludo a todos con respeto y con amor en mi corazón.
Jeshua»
Si quieres ver el artículo en su idioma original, haz click en el siguiente vínculo: https://www.jeshua.net/channelings/mornings-with-jeshua/giving-from-your-essence/
Traductora: Fanny Zapata, redactora y traductora de la Gran Familia de La Hermandad Blanca en hermandadblanca.org
El miedo nos encarcela las religiones crean el miedo al pecado y a la sexualidad así someten diciendo que nos lleva a la muerte y a un sitio que llaman infierno.
Gracias, gracias, gracias.