Ineke van Lint – Los 11 hábitos de las personas exitosas
Crea el hábito de ser existoso.
Las personas existosas son personas que tienen hábitos creativos para el éxito. Las personas que no son existosas son personas que tienen hábitos miserables que no atraen ningún tipo de éxito y que los mantienen lejos del mismo sin importar cuánto lo deseen.
Desear el éxito no es suficiente. Tienes que actuar de una manera que coincida con lo que quieres. Querer una cosa y moverte en la dirección opuesta no te acercará al éxito. La diferencia entre las personas que tienen mucho éxito en su vida y las personas que viven una vida monótona y minimalista, se relaciona con sus hábitos.
“Aquellos que son exitosos lo son simplemente porque tienen hábitos exitosos.”
¿Cuáles son estos hábitos?
1. ¡Sé apasionado!
Tienes que encontrar tu pasión, tu razón para vivir. Encuéntrala y aumenta tu nivel de estusiasmo. Motívate con algo. Entra a una actividad que te apasione. El mundo te lo agradecerá, porque necesita que des lo mejor, no lo peor. La monotonía no te dirige al éxito, de hecho, te aleja de tu verdadero ser y de tu meta.
2. Mántente enfocado en el resultado final
Mántente enfocado en tu meta, especialmente si te encuentras enfrentando cosas que no tienes ganas de hacer ahora. Ten presente que si las haces, te acercarán más a tu éxito.
Las personas exitosas se enfocan en los resultados, no en el proceso. Ellas saben que el proceso puede ser a veces difícil, pero mantienen tu atención puesta en el resultado que desean obtener. No se estresan por las tareas que deben completar, sino que conservan la mirada en la “imagen final.”
Cosas como el placer y la satisfacción las sentirás cuando hayas alcanzado tu meta. Piensa en el resultado final. No pienses en el siguiente paso que puede ser trabajoso. Enfócate en lo que ganarás y concéntrate en ello.
3. Aprende cómo manejar tu tiempo
No pierdas el tiempo, úsalo de una manera que te beneficie. Aquí está cómo lo haces:
No solo hagas cualquier cosa. No permitas que te utilice alguien más. No aceptes ser interrumpido sin ninguna razón. Niégate a que las interrupciones frecuentes de tus colegas, tus hijos o tus problemas, consuman toda tu atención. Deja de intentar complacer a todas esas personas que creen que puedes cuidar a cualquiera que te lo pida.
Tu tiempo es valioso. Es tu aliado al éxito. Sé consciente de la forma en la que utilizas tu tiempo. ¿A quién se lo das? ¿Por qué? ¿Para qué actividad? Es una decisión que debes hacer conscientemente.
4. Cada noche, haz una lista de las tareas que debes hacer el día siguiente
Cada noche, antes de dormir, tómate un momento y escribe las tareas (5 o 6 son suficientes) que sin dudas debes hacer el día siguiente, por orden de importancia. El día siguiente, completa la primera, bórrala, luego la segunda, y así sucesivamente. Es un método simple, pero que es muy eficiente para dejar de procrastinar, bajar la velocidad, o posponer.
5. No esperes a ser perfecto para comenzar
Estás entrenado para pensar que tienes que ser perfecto antes de empezar algo. Éste es un gran error. Lo que importan son los actos. El feedback que obtendrás te hará mejorar. Aprendemos con ensayo y error. Así que levántate de tu sofá y ofrece tu producto o servicio al mundo. Inicia. No necesitas ser perfecto. Siempre puedes mejorar tu producto o servicio más adelante. Lo que cuenta es comenzar.
6. Sé perseverante, ¡no renuncies!
Es fácil intentar cosas nuevas, es fácil poner en práctica nuevas ideas. Es fácil ir al gimnasio una vez. Es fácil dejar de fumar. Todo es fácil cuando solo lo haces una vez. Pero el éxito yace en hacer algo constantemente, en continuar y perseverar. De lo contrario, tu meta nunca será alcanzada, tus sueños se ahogarán y te descepcionarás. El éxito yace en seguir adelante. Llegarás a donde quieres estar, si eres consistente con tu esfuerzo.
7. Valórate
Trata de entender cómo el mundo funciona: valor por valor. Cambiamos un valor por otro. Cambiamos un servicio por dinero, por ejemplo. Cuando queremos algo, pagamos por ello o intercambiamos servicios. Deja de proveer servicios sin obtener algo a cambio. Esto no funciona porque las personas se aprovecharán de tu amabilidad. Vende un producto, ofrece una solución a un problema, agrega valor al mercado, y asegúrate ser pagado por ello. No tengas miedo de pedir dinero por lo que vendes u ofreces. Determina el valor de tu servicio o producto y pide el dinero que vale.
8. Dile sí a la vida, dile sí a las oportunidades que se te presenten
Siempre di sí a las oportunidades que se te presenten, incluso si tienes miedo. Al decir sí, avanzas, aprendes, conoces nuevas personas, confirmas tu meta, y progresas en tu camino al éxito. Al decir no, te mantienes prisionero de tu zona de comodidad y no progresas, no creces. Brillar, crecer, y progresar es decirle sí a la vida.
9. Encuentra un ejemplo a seguir
No trates de lograr todo por tu cuenta. Todos necesitamos ayuda. Trata de aprender regularmente de amigos que saben cómo inspirarte y guiarte. Busca especialmente consejo de profesionales que lo han conseguido todo antes, y que saben cómo es desplazarse por el camino del éxito. Un consejero te será útil. Te dará soluciones cuando no puedas verlas. Te guiará en tu viaje hacia el éxito.
10. No lo olvides: la palabra mágica que hace que el mundo gire es la ACCIÓN
Puedes leer miles de libros o asistir a muchos seminarios, pero nada cambiará en tu vida hasta que comiences a realmente moverte. Todo permanecerá igual mientras no actúes. Empieza algo, no esperes a ser perfecto, hazlo ahora. La palabra mágica para el éxito es: ¡acción!
11. Repite, repite, repite
No es haciendo un taller o siguiento un curso cuando tu vida ha cambiado por completo. Es ser perseverante y la aplicación continúa lo que creará la mentalidad adecuada y traerá el cambio y el éxito a tu vida. Como suele decirse: “El éxito no sucede de la noche a la mañana.” El éxito no caerá en tu regazo mientras duermes. Requiere esfuerzo.
¡Debes realmente quererlo y trabajar para lograrlo!
Tienes que regularmente repetir las nuevas ideas y métodos que aprendes. Es como aprender un nuevo idioma: requiere de mucha inversión, práctica, repetición, perseverancia, tiempo y energía.
Mientras aprendes a utilizar un nuevo lenguaje en tu mente, también aprenderás una nueva manera de hacer las cosas: un camino al éxito. El éxito es un hábito. Puedes programarte para seguir el éxito de la misma forma en la que te programas para el fracaso: repitiendo.
Ahora depende de ti. Te mereces el éxito en todo lo que hagas.
Traducido por: Diana Martínez, redactora y traductora en la gran familia hermandadblanca.org
Canalizado por: Ineke van Lint, psicóloga de niños, adolescentes y adultos, con su propia página web para inspirar, motivar y aconsejar a quien lo necesite.
Página original: https://enthousiasme.info/en/information/articles/?article=41