Los misterios del Feng Shui

Vamos a conocer cuáles son los misterios del Feng Shui. A continuación, descubriremos qué es, por qué es tan secreto, e incluso qué beneficios te puede aportar. No te marches, arrancamos ya.

El Feng Shui es el sistema filosófico que, basado en el taoísmo, centra su actividad en la armonía del espacio y la ocupación consciente del mismo. Su fin es conseguir una influencia positiva en aquellos que ocupan dicho espacio. De origen chino, su conocimiento oculta todavía miles de misterios.

Conocemos ya los misterios del Feng Shui, una vez hemos descubierto a grandes rasgos en qué consiste. Toma nota.

Dos mundos

Según la filosofía del Feng Shui, existen dos mundos. Uno es la Tierra, el que conocemos, otro el cielo. Son Ken Kai y Yu Kai. Este último es desconocido e invisible, pero estudia los cambios en astros, naturaleza, etc.

Dado que el Feng Shui se centra en la ocupación del espacio, en tiempos imperiales en China era cuestión de estado. Únicamente algunos nobles podían acceder a su conocimiento. De hecho, sus directrices se tenían en cuenta a la hora de realizar sepultura de las personas, principalmente las que ocupaban cargos importantes en la sociedad.

Finalmente, el Feng Shui fue prohibido con la llegada de la república, al igual que otras tradiciones.

No obstante, las utilidades y funcionalidades del Feng Shui se han mantenido. De hecho, su filosofía ha saltado a Occidente, y se usa mucho en diseño de interiores y arquitectura. Para ello, dado que su doctrina asegura la existencia de un aliento vital que fluye modificándose según la disposición de formas y espacios, muchos profesionales lo tienen en cuenta. La orientación, los puntos cardinales, los cambios… Todo se tiene en cuenta.

El Feng Shui estudia las formas, las estructuras, los ríos, la ubicación de las diversas estancias… Ningún espacio del hogar se dispone de forma aleatoria, sino en consonancia con un estudio íntimo y cuidado.

Como es evidente, la disposición de las diversas estancias se ubica según criterios estrictos. Así pues, tendremos en cuenta ciertos aspectos:

• La entrada principal simboliza la boca. Es la primera impresión que se lleva el visitante. Según esta doctrina, todo estará bien arreglado, con una adecuada iluminación, sin nada estropeado o en mal estado. La puerta abrirá no menos de 90 grados, y los colores que se recomiendan son el salmón y tonos suaves.
• El recibidor dice mucho de los habitantes del hogar. Muestra su personalidad, y puede ser un lugar donde leer, conversar, compartir un buen rato con gente querida, etc. Aquí, el orden es fundamental, ya que favorece que haya una correcta circulación de la energía. Se usará mobiliario cómodo y práctico. Habrá sillones y variedad de asientos que inviten a entrar. Es un sitio aceptable para añadir fotos familiares.
• El comedor se asocia al elemento tierra, por lo que recreará una armonía total. Es la unidad familiar, por lo que tendrá una mesa redonda en madera que iguala a todos los miembros, sin jerarquías. Es bueno que se incorporen velas, flores, etc.
• La cocina es un lugar de salud, prosperidad y bienestar. Se dará prioridad a la limpieza, y también al orden. Se deben distanciar los elementos de agua de los de fuego en no menos de 1,20 metros para evitar choques desagradables.
• Los dormitorios y baños promueven el descanso, la recarga de energías positivas y el drenaje de energías negativas. Todo estará en perfecto estado de conservación y funcionamiento.

Ya conoces algunos de los misterios del Feng Shui y su funcionalidad. Ponlos en práctica, verás cómo mejora tu vida.

Visto en HSBnoticias, por Pedro, redactor de la Gran Hermandad Blanca