Siete hábitos que te llevarán a la felicidad
La felicidad no es un golpe de suerte, sino que se consigue a través de nuestra disciplina y nuestros hábitos
Bienvenidos a un artículo más, queridos amigos de la gran comunidad de Hermandad Blanca.
El día de hoy vamos a analizar de manera práctica, 7 de los hábitos que al desarrollarlos realmente pueden ayudarnos a alcanzar la felicidad en la vida, sin importar nuestra edad, profesión o sexo.
Estos hábitos aplican para cualquier persona porque son estrategias muy generales que nos llevan a alcanzar la salud y a concretar las metas que nos hemos impuesto en la vida, estos dos son requisitos indispensables para alcanzar un estado de bienestar mental, emocional y físico. No se trata de descubrir el hilo negro, realmente todos sabemos bien qué es lo que debemos hacer para estar mejor en todos los aspectos y ser más felices, sin embargo, a veces parecen tantas cosas que no sabemos por dónde empezar y simplemente las dejamos de lado y seguimos haciendo todo de la misma manera que lo hemos hecho siempre, y claro, con los mismos resultados que no nos gustan.
Generar hábitos es el primer paso para alcanzar las metas que nos mueven
Pero los hábitos no se generan de la noche a la mañana, tienen un proceso muy particular que responde a la configuración en general de los estímulos, las respuestas, y las motivaciones en las personas, mucho de lo cual es de tipo individual y personal, pero también puede hablarse de algunos detonadores generales que a todos nos funciona para desarrollar hábitos más saludables.
Generar buenos hábitos no es fácil, pero trae grandes beneficios
La principal razón por la cual las personas dejan de lado los hábitos saludables que quieren formarse, es que se desmotivan pues no ven grandes y rotundos resultados en un principio, y justamente esta es la trampa contra la que hay que luchar. La paciencia y la constancia son nuestras mejores aliadas cuando se trata de perseverar para ver resultados y cambios positivos.
Cuando realmente tienes confianza lo que estás haciendo, el hecho de no ver resultados inmediatos no te hace desistir de tu propósito porque sabes que llegarán a su tiempo como resultado de tu esfuerzo.
Para animarte un poco, puedes pensar en todo el tiempo y la cantidad de años que no has seguido estos hábitos y las consecuencias negativas que te ha traído. Aunque el cambio no será tan rápido como quizá quisieras, ten por seguro que a comparación con todos esos años será muchísimo más rápido.
Antes de comenzar con nuestra lista, es importante aclarar que para que todo lo que vamos a expresar en este artículo funcione, debe haber cuando menos un mínimo de voluntad y de disciplina de tu parte, pero si consideras el impacto de los resultados positivos que aparecerán en tu vida, te darás cuenta de que estos pequeños esfuerzos diarios son precios a pagar bastante módicos en comparación con todo lo que estarás obteniendo. Así que sacúdete los pretextos y comienza a formar estos 7 hábitos.
Levántate temprano
Levantarnos a tiempo nos hace más productivos durante todo el día
Levantarnos temprano es algo que la mayoría de nosotros interpretamos como un castigo, o un mal necesario. Muchas personas alrededor del mundo no tienen otra alternativa más que pararse de madrugada para ir a trabajar, y como es una cuestión que hacen por obligación, no la disfrutan en absoluto ni tiene ningún tipo de convicción. Es más, si por ellos fuera, entrarían a trabajar dos horas más tarde aunque tuvieran que salir dos horas más tarde.
Por esa razón, cuando tenemos oportunidad de quedarnos más tiempo en cama, lo aprovechamos todo lo posible. No quiere decir que esto esté mal, pero puede ser una señal de alarma al indicarnos que en nuestra lista de prioridades, quedarnos a en cama a descansar más tiempo puntúa como una de las más altas, lo que significa que nuestras demás actividades no nos parecen lo suficientemente interesantes o realmente no nos gustan.
Aunque dormir es maravilloso, levantarnos tarde y no aprovechar la mañana en realidad sólo nos lleva a ser menos productivos a lo largo del día, a llegar tarde a todos lados, y aunque no lo creas, hará que te sientas más cansado porque el exceso de sueño también puede generar estragos.
Además, no levantarnos temprano suele ser el producto directo de un mal hábito, que es acostarlos demasiado tarde. Así que para comenzar a construir el hábito de levantarse temprano, debes hacerlo de la mano junto con el hábito de acostarte un poco más temprano. Ya sea que tengas que levantarte temprano por obligación como que quieras hacerlo para que tu día sea más productivo y rinda más, media hora de antelación puede hacer grandes diferencias y lograr que tu día comience bien y tranquilo en lugar de comenzar mal y con prisas.
Si quieres comprobarlo por ti mismo, haz un experimento. Levántate temprano un día sí y un día no y anota en una libreta qué tan productivo fuiste a lo largo del día y cómo te sentiste. Te sorprenderás cuando veas los resultados.
Haz ejercicio
Lo del ejercicio parece la misma perorata de siempre. Nunca he sido de las personas especialmente entusiastas del ejercicio, pero puedo decir que aún para quienes amamos quedarnos en casa debajo de las sábanas o en el sillón viendo películas, hacer ejercicio de manera regular con voluntad y disciplina puede cambiar mucho la forma en que vivimos.
El ejercicio no solamente te hace bajar de peso, cosa que nos viene bien a muchos, sino que nos hace liberar hormonas de la felicidad y nos llena de energía a lo largo de todo el día. Parece paradójico que mientras más energía gastamos, mejor nos sentimos, pero es así porque estamos acostumbrando a nuestros cuerpos a mayores niveles de actividad.
Si lo ponemos en perspectiva, en esta sociedad moderna, hacer algo de ejercicio diariamente, aunque sea de forma artificial en un gimnasio, es la única manera que tenemos de acercarnos a la actividad natural para la que nuestro cuerpo estaba diseñado en un principio, y por tanto de mantener su movilidad y su salud musculo esquelética.
De nuevo, si quieres comprobarlo por ti mismo, realiza el siguiente experimento: haz ejercicio dos días sí y 2 días no, y anota en una libreta cómo te sentiste a lo largo de estos días y cómo te sentiste los días que no realizaste ningún tipo de actividad física.
Prepara tus propios alimentos
Preparar nuestros alimentos nos hace personas más saludables
Alimentarse saludablemente parece otro cliché de los hábitos saludables, pero hay una buena razón por la cual te lo repiten hasta el cansancio. Los alimentos que podemos adquirir en la calle o en los restaurantes de comida rápida, o que simplemente tiene que meterse al horno de microondas para estar listos, está diseñados por la industria para ser económicos y saber bien, no para nutrir a las personas y mucho menos para fomentar su salud.
Encontrar el tiempo y la manera de preparar la mayoría de tus alimentos te permitirá asegurarte de que realmente estás comiendo cosas de calidad, alimentos que te nutran y no sólo que te llenen de azúcar, harinas refinadas, sodio, grasas y conservadores, y que te provoquen problemas de obesidad, hipertensión o diabetes a largo plazo.
Las personas que quieren bajar de peso a veces piensan que lo mejor que pueden hacer es evitar tener comida a la mano, pero para bajar de peso debemos hacer todo lo contrario, tenemos que procurar tener cerca los alimentos saludables y nutritivos que necesita nuestro organismo, y comer a nuestras horas para evitar los ataques de hambre que, así estemos a la mitad del desierto, nos llevarán directo por una hamburguesa y unas papas fritas.
Hay muchas formas de generar el hábito de preparar tus propios alimentos. Tampoco necesitas preparar platillos complejos todos los días, mientras tengas recipientes bien proveídos de verdura y fruta picada en el refrigerador, así como carnes magras, quesos frescos, cereales y leguminosas en abundancia, tendrás todo lo que necesitas para prepararte una rápida, nutritiva y deliciosa ensalada en cuestión de minutos.
Sigue un cronograma
Hay dos razones principales por las cuales las personas no alcanzan sus metas y no tienen nada que ver con el talento ni con la suerte, se trata más bien de que nos distraemos con otras actividades que no tienen nada que ver con las metas que perseguimos, y de que no aprendemos a organizarnos para sacar todos nuestros pendientes del día.
La mejor manera de aprender a ser productivos y de organizar nuestro tiempo, es admitir que a veces necesitamos un poco de ayuda visual y que nuestra organización mental no siempre va a poder con todo. Por eso, realizar un cronograma donde tengamos claramente indicadas las actividades que tenemos que realizar cada día y en qué tiempo iremos alcanzando nuestras metas, es la mejor forma de que no se nos olvide nada, de obligarnos a terminar todo lo importante antes de pasar a las actividades menos trascendentes, y de mantenernos motivados, pues estamos percibiendo visualmente cómo vamos avanzando poco a poco en nuestros proyectos.
No hay una sola fórmula para hacer un cronograma efectivo, cada persona lo hará de acuerdo a sus requerimientos, gustos, preferencias y actividades. Lo que sí es importante es que aprendas a establecer jerarquías entre las actividades y sigas siempre una línea de tiempo para que ésta te presione un poco y no te permita procrastinar de más.
No critiques
Dejar de criticar libera mucha energía mental que podemos aprovechar en cosas útiles
Criticar y quejarnos de todo es un hábito que muchas personas tienen arraigado hasta el tuétano. Parece inofensivo a primera vista, pero en realidad no lo es. Gastar energía mental criticando a los demás, sintiendo envidia o quejándonos, nos deja virtualmente secos de motivación para dedicarnos a las actividades que de hecho sí nos van a redundar en un beneficio.
Construir el hábito de dejar de criticar, o más bien, deshacernos del hábito de criticar, es difícil porque lo hacemos de una manera tan automática que pasa desapercibido. Por eso es importante que comiences a ponerle más atención a tus pensamientos y a tus palabras y que te frenes a ti mismo en seco siempre que te des cuenta de que estás entrando en el peligroso terreno de criticar sin ningún objetivo a algo o alguien.
Procúrate un orgasmo con frecuencia
No, No estamos bromeando. No importa cuál sea tu edad, tu ocupación, si tienes una pareja o eres soltero, o cuáles son tus métodos preferidos para obtenerlo. El orgasmo es parte fundamental de la paz mental, física y emocional de todos nosotros. debemos dejar de pensar en el placer físico como algo a lo que sólo tienen derecho ciertas personas en ciertas situaciones de vida, para empezar a verlo en el mismo nivel que cualquier otra necesidad biológica que podemos y debemos cubrir con responsabilidad.
Procurarte un orgasmo al menos una vez al día hará que disminuyan tus niveles de estrés, mejorará tu sistema inmunológico, te hará sentir menos ansiedad, te ayudará a combatir el insomnio, y en general te hará más feliz
Limpia una parte de tu casa diariamente
Mente sana, en casa limpia
Hacer limpieza profunda en nuestra casa algo que muchos de nosotros odiamos verdaderamente. Pero vivir en un espacio limpio, pulcro y ordenado, comprobadamente nos hace personas más felices y más productivas.
No tienes que convertirte en un neurótico de la limpieza para este fin, simplemente construye el hábito de limpiar a fondo una pequeña parte de tu casa diariamente, de tal manera que no te lleve más de media hora o a lo mucho una hora, y con el esfuerzo diario siempre mantengas tu hogar en perfecto estado.
Son cosas tan sencillas cómo dedicarle un rato al ordenar el cajón de los calcetines, limpiar el horno de microondas o lavar la alfombra de la sala.
Estos 7 hábitos, son simples de construir si nos permitimos un poco de voluntad, y los resultados que podemos obtener al hacerlo realmente pueden cambiar nuestra vida de una forma radical y para bien.
AUTOR: Kikio, redactora en la gran familia de hermandadblanca.org
PARA SABER MÁS:
Los 8 hábitos de la gente feliz
Los cuatro hábitos de las personas felices
