Los Emisarios Pleyadianos de la Luz

¿Quienes son los Pleyadianos? La autora Amorah Quan Yin tuvo su primera comunicación con ellos en 1979, después de pasar por una terapia de regresión, tras una severa enfermedad. Ella escribió varios libros en los que narra sus experiencias con estos seres extraterrestres, y además fundó la escuela Dolphin Star Temple, dedicándose a expandir la Luz.

«Siempre que llegamos al final de un ciclo evolutivo importante, generalmente cada 5200 años o 26,000 años, los Emisarios de Luz Pleyadianos se dan a conocer.

Los Pleyadianos son los guardianes la Tierra y del sistema solar. Fuente: Pxfuel.

Son un grupo colectivo con diversas responsabilidades y roles, incluido el de los guardianes de la Tierra y de este sistema solar.

Como guardianes, vienen a despertarnos a dónde estamos en nuestra evolución y proveer lo que se necesita para dar los siguientes pasos. La información que nos brindan se aplica no solo a nuestro planeta en su conjunto, sino también a las personas que tienen una conexión personal con los Pleyadianos, como yo.

Cuando mis necesidades son genuinas, mis amigos pleyadianos siempre están dispuestos a prestar su ayuda. Ya sea que requiera curación y limpieza personal, información o, a veces, simple tranquilidad, o tal vez para despertar más recuerdos de mi propósito y servicio aquí en la Tierra, los Pleyadianos siempre me ayudan de manera apropiada y significativa.

Hay diferentes tipos de seres, con diferentes funciones dentro del grupo de los Emisarios de Luz Pleyadianos, y ellos se han dedicado a satisfacer una amplia variedad de necesidades a lo largo del camino.

Ra, Ptah, Ma-at y An-Ra: la cuatro Tribus Arcangélicas

Sin embargo, no todos los Pleyadianos son miembros de este grupo. Ra, el ser que siempre me habla instruccional y filosóficamente, es parte de lo que se llama las Tribus Arcangélicas Pleyadianas de la Luz.

Estos arcángeles sirven como guardianes de la Tierra y del sistema solar. Hay cuatro de estas Tribus Arcangélicas, que se definen por el color que emanan: el amarillo dorado, el rojo escarlata, el azul cielo claro y el verde esmeralda suave.

Hay muchos seres de cada color y todos los seres del mismo color comparten el mismo nombre. Todos los miembros de la Tribu Arcangélica Pleyadiana de color amarillo dorado se llaman Ra y son los guardianes de la sabiduría divina, que es el producto de toda la experiencia.

Los seres azules se llaman Ptah y son los protectores y preservadores de la naturaleza eterna de la vida. Ma-at es el título que se les da a los seres rojos que son los guerreros espirituales; tienen la energía del coraje divino, que está más allá del miedo. Hay más seres Ma-at encarnados en la Tierra en este momento, que cualquiera de los otros tres grupos arcangélicos.

Por último, los seres verdes se conocen como An-Ra y tienen la energía de la compasión y la comprensión divinas.

Algunos de los Arcángeles Pleyadianos establecen vínculos conscientes con los seres humanos, como lo ha hecho Ra conmigo. Otros se especializan en comunicaciones interestelares y planetarias, centralizadas en Alcyone, el sol central de las Pléyades.

Aún otros Arcángeles Pleyadianos trabajan con humanos durante nuestro tiempo de sueño, y nos muestran posibilidades más allá de lo que creemos que son limitaciones físicas. En ocasiones, orquestan sueños curativos especiales para ayudarnos a liberar el pasado y seguir creciendo, o para encontrar nuevas formas de expresarnos que sean más acordes con lo que nos estamos convirtiendo.

Ahora están comenzando a facilitar el recuerdo y la enseñanza de antiguas modalidades curativas, como el Trabajo de Luz Pleyadiano.

Otro tipo de intercambio con los humanos y la Tierra ocurrió en el invierno de 1992. Los Emisarios de Luz Pleyadianos lograron hacer viajes espaciales extracorporales casi instantáneos entre la Tierra y el cúmulo pleyadiano, para aquellos de nosotros que experimentamos vidas humanas.

En ese momento hubo una celebración con una gran reunión de trabajadores de la luz humanos y miembros de la Federación Galáctica, incluidos los Emisarios de Luz Pleyadianos, a la que tuve el privilegio de asistir.

También tuve la suerte de experimentar este viaje «sin tiempo ni espacio», cuando me llevaron a un planeta en uno de los sistemas solares de las Pléyades y viceversa. Ir allí y regresar se llevó a cabo en cuestión de segundos. El planeta al que me llevaron fue increíble. Los Pleyadianos que la habitan han creado el equivalente a un museo planetario, donde aún viven todas las especies que han existido en esta galaxia, incluidas las extintas en la Tierra.

Hay arboledas de especies de árboles que se han extinguido en la Tierra desde tiempos prehistóricos. El cuidado del museo es una de las responsabilidades más preciadas de los habitantes.

Los museos pleyadianos albergan un tesoro de especies ya extintas de toda la galaxia. Fuente: Pxfuel.

La lista de especialidades de las Tribus Arcangélicas Pleyadianas y los Emisarios de Luz Pleyadianos apenas se ha tocado, sin embargo, les he dado una idea general de la amplia gama de su experiencia y dedicación.

Los cirujanos psíquicos y los curanderos son los otros miembros de los Emisarios de Luz Pleyadianos con quienes tengo el privilegio de trabajar. No son Arcángeles Pleyadianos (mi nombre abreviado para las Tribus Angélicas de la Luz Pleyadianas), pero trabajan de cerca con ellos.

Jerarquías pleyadianas

Hablando libremente, los Arcángeles Pleyadianos son sus instructores, que les delegan lo que se debe hacer. Así como en la Tierra tenemos un Consejo Superior de Doce, que supervisa todo en nuestro sistema solar, las Tribus Arcangélicas de la Luz Pleyadianas tienen la misma función en las Pléyades.

De igual modo que nosotros tenemos ángeles, guías, Maestros Ascendidos y maestros que trabajan bajo nuestro Consejo Superior de los Doce, así en las Pléyades hay muchos grupos que sirven a los Arcángeles Pleyadianos.

Estos arcángeles, a su vez, tienen un Ser Supremo de base más amplia al que sirven, tal como lo hace nuestro Consejo Superior.

Tales jerarquías no son de señores y servidores, en el sentido de que algunas son «mejores que» y otras «menos que». La estructura se basa simplemente en la particular naturaleza esencial de todos los seres que, al alcanzar ciertos niveles de evolución, desean profundamente dar y servir a los demás.

Por lo que se me ha dado a entender, este deseo se basa en el Amor Divino que está más allá de la capacidad de comprensión de la mayoría de los humanos. También está motivado por lo mismo que nos mantiene creciendo: el deseo de poner fin a la separación y ser Uno con Dios / Diosa / Todo lo que Es.

Estos seres superiores anhelan volver a ser plenamente Uno con nosotros. Los nombres de la Tribu Arcangélica: Ra, An-Ra, Ma-at y Ptah, pueden sonar familiares, ya que se usaban con frecuencia en el antiguo Egipto, especialmente para la realeza.

La diosa Ma-at. Fuente: Wikimedia Commons.

Los egipcios estaban más avanzados espiritualmente en la antigüedad que en la actualidad. Los Pleyadianos, incluidas las Tribus Arcangélicas, con frecuencia estaban en comunicación con los antiguos egipcios, quienes podían responderles durante su apogeo de avance espiritual.

Los Pleyadianos les enseñaron gran parte de su conocimiento espiritual, prácticas curativas, desarrollo de la percepción sensorial completa y comprensión del propósito de la Tierra dentro del sistema solar, la galaxia y mucho más allá.

Muchos pleyadianos adoptaron cuerpos humanos en el antiguo Egipto, mientras que otros trabajaron en dimensiones superiores con los soñadores, videntes, curanderos, sacerdotes y sacerdotisas, e incluso la realeza.

Sus propósitos comunes eran: la evolución general del planeta y la raza humana, así como reunir suficiente conocimiento superior aquí en la Tierra para que, cuando llegara el momento del Gran Despertar, todo lo necesario estuviese aquí.

Pero, desde luego, Egipto no fue la única civilización que recibió estos preciados dones»

Tomado de: The Pleiadian Workbook, Awakening your divine Ka, por Amorah Quan Yin. Bear&Company.

Visita la página web de la autora: http://www.dolphinstartemple.org/

Traducido por: Fanny Zapata, redactora y traductora en la gran familia de hermandadblanca.org