Las 7 especies. Diversidad del Ser Uno

Dios es Uno, la deidad está coordinada universalmente. Aquellos que vamos logrando una conciencia incluyente, desarrollamos la habilidad para detectar la unidad básica que subyace en la diversidad creadora y de descubrir la singularidad divina que sobrecoge este entero funcionamiento de la pluralidad. El hombre es divino en su linaje, así como humano en su herencia. Un espíritu divino engendró su alma en evolución.

La humanidad progresa de una realizada integración tras otra; sin embargo la integración básica del hombre se logra en el reino de la conciencia, antes de fusionarse en una unidad con el alma. Podría decirse, hablando superficial y generalmente, que:

1. En la época Lemuriana, la humanidad logró la integración del cuerpo vital o etérico, con el cuerpo físico.
2. En la época Atlante, la humanidad agregó otra parte a la síntesis ya alcanzada, la naturaleza astral, y el hombre síquico vino definitivamente a la existencia. Vivía y al mismo tiempo era sensible y respondía a su medio ambiente en un sentido más amplio y específico.
3. Hoy, en nuestra raza Acuariana, la humanidad está abocada a la tarea de agregar el aspecto  mental.  A las cualidades de vivencia y sensibilidad alcanzadas el hombre va agregando rápidamente la razón, la percepción mental y otras cualidades de la mente y de la vida mental.
4. La humanidad evolucionada aspira fusionar esos tres aspectos divinos en un todo denominado personalidad. Millares de individuos hoy son aspirantes y actúan, sienten y piensan, simultáneamente, convirtiendo estas funciones en una sola actividad, síntesis de la personalidad que  logra el Discípulo, bajo la dirección de la entidad que mora internamente, el hombre espiritual.
5. En su período de Prueba, el aspirante empieza a servir conscientemente a la humanidad aunque lo hace únicamente durante las últimas etapas a través de su personalidad integrada, y de esta manera la conciencia de un todo mayor y más amplio reemplaza gradualmente a su conciencia individual y separatista. Sabe que él es sólo una parte.
6. Para el discípulo el proceso de integrarse al Reino de Dios, el Reino de las Almas, continúa hasta terminar el tercer grado.
7. Ya como Aprendiz, el Maestro empieza a realizarle la transferencia de su sabiduría, para que en el sexto grado tome la decisión de elegir uno de los siete senderos cósmicos.

Así como la especie humana llegará a formar una sola raza, así el universo debe unir las especies para formar una sola: todo se repite en el universo. Unir las especies en una sola es un arduo trabajo que nos espera por delante; no es fácil, debido a los distintos elementos que se fueron transformando para la adaptación. Muchas especies diferentes ya procrearon y unieron sus elementos, dando resultados extraordinarios. Lo importante en el universo es la mente, y todas las especies la poseen. Cuando llegan a la elevación suprema, se unen y forman una sola raza. Lo importante es el pensamiento vibratorio que los une.

Los AYAPLIANOS son los autores de los libros EL SER UNO, los cuales fueron canalizados a través de la telepatía por Franca Canónico, conocimiento que comenzó a ser recibido, en el año 2002. Los Ayaplianos pertenecen a la Octava y Novena Jerarquía de la Realidad Antimateria de Alfa Centauri (Realidad Espiritual). Esta realidad, nosotros la conocemos como mundo espiritual, ellos se denominan SERES ENERGÉTICOS O SERES DE LUZ.

Los Ayaplianos son altos, cuerpos delgados, bien formados y de contextura fina. Cabeza un poco prominente y sin cabellos, tienen ojos grandes y razgados, que pueden ser azules, verdes o castaños clarísimos, de mirada muy dulce y penetrante. Nariz y orejas pequeñísimas. No se puede definir que edad tienen, ni tampoco si son femeninos o masculinos. Cuando se presentan, lo hacen holográficamente, porque ellos no pueden descender o entrar a una dimensión densa como la nuestra. Su comunicación es totalmente telepática, se realiza a través de la vibración y ritmo interior, imágenes de la imaginación y percepción inmediata de lo que están comunicando. Diseminadas en el universo están  infinidad de especies ayaplianas.

Somos la especie ayapliana-humana. Existen otras con rasgos de reptiles, cuya piel es escamosa y verdeada, de ojos rasgados y claros. Ellos son los reptilianos. Otros, de piel blanca pálida, ojos muy claros y cabezas prominentes, altos y delgados, ellos son los orianos, hacen visible o invisible sus cuerpos a su antojo pudiéndolo descomponer en minúsculas partículas y dejarlo depositado en el éter, hasta cuando lo vuelvan a utilizar. Hay aquellos que son bajos, delgados, con ojos claros y cabezas grandes; estos son los andulianos.

Existen también aquellos cuya piel es violeta, con ojos claros, estatura mediana y cabezas pequeñas; ellos son la luz violeta. Otros son muy altos, delgados, manos grandes y ojos rasgados, sin cabellos, y pertenecen a la luz solar. Las especies adquirieron características diferentes debido al medio ambiente en el que se desarrollaron. Todas son especie-ayapliana, con ciertas diferencias. Estas especies están diseminadas en el universo, unas muy evolucionadas y elevadas, otras a medio camino, y otras muy atrasadas. Son muchas las especies en el universo como para nombrarlas a todas; recordemos que el universo es global, infinitos planos lo pueblan, y para que podamos entenderlo, necesitamos primero conocer el entorno que envuelve al planeta Tierra y luego partir a otras realidades distantes.

Los Ayaplianos-Nefilins: Estudian el centro del planeta.

Los Ayaplianos-Humanos: Estudian el exterior de la Tierra.

Los Ayaplianos Interanos: Estudian el Interior de la Tierra.

Los Ayaplianos Elohim: Estudian los Cinco Grados del Electromagnetismo.

Los Ayaplianos Seramitas: Estudian los Cuatro Grados del Magnetismo.

Los Ayaplianos Lemurianos: Estudian los Mares.

Los Ayaplianos Voluntarios de la Naves: Estudian los Polos del planeta.

No aparecen las dos más bajas- grises y grises reptilianos- que son descritas en el segundo libro del Ser Uno.

El segundo libro del  EL SER UNO, fue dictado por los Ayaplianos-Voluntarios de la Octava y Novena Jerarquía de la Realidad Antimateria (Espiritual) de Las Pléyades. Son los voluntarios que llegaron a este planeta para curarlo de una terrible enfermedad llamada: Distorsión.

En la ciudad interna, la energía-pensamiento es enseñada y guiada por los guardianes, quienes se convierten en maestros y transmisores de la sabiduría milenaria.

De los 660 voluntarios, 84 regresaron a las naves y se convirtieron en los guardianes del planeta. En esas naves y sin salir de ellas, continuamos velando por nuestros hermanos que se quedaron atrapados en la densidad de Tera. Nosotros los que estamos contando esta historia, somos los 84 que aún estamos en nuestras naves, en nuestra Ciudad Interna.

Los 84 guardianes que se encuentran en las ciudades-naves deberán albergar en sus burbujas-esferas a toda la descendencia exterior. De esta forma, tanto nosotros como ellos podremos regresar a nuestros planetas de origen. Deberemos entrar a la Ciudad Interna para poder pasar a otra realidad de existencia.

Las 84 Burbujas-esferas de la Ciudad Interna son las naves y el medio que  necesitamos para salir de la Tierra, no hay otra forma. Cada vez que uno de nosotros entra en la Ciudad Interna para pasar por los grados de evolución y elevación que aún le falta, uno de ellos nos dará albergue.

Todos somos ubicados de acuerdo al grado de vibración, a la intensidad de la luz, a la pureza del tono y a la claridad del color, pues los cuatro tienen un origen electrodinámico. Constituyen básicamente un efecto del impulso que emana del plano mental cósmico y toma forma en el plano físico cósmico.

Ellos ya unieron sus  razas y hoy en día formaron una. Así nosotros formaremos también una y nos  uniremos a ellos que nos están esperando. Sería como unir los cuatro tipos de sangre en una sola. Los diferentes tipos de sangre y el factor negativo y positivo, es la consecuencia de muchas combinaciones que al final terminarán en una sola, regresarán al origen que es el Grupo A.

El quinto libro de EL SER UNO, ha sido dictado por los Ayaplianos-Seramitas, los Ayaplianos-Elohim y los Ayaplianos- Interanos. Estos últimos viven en dos realidades: El Mundo Antimateria y la Ciudad de Atlantis.

Son la unión de las cuatro razas que llegaron al planeta: Tenezia: África, raza negra, tierra; Ebiar: América, raza roja, fuego; Retryón: Asia, raza amarilla, agua; Ambiares: Groenlandia, raza blanca, aire.

Los Hermanos Interanos son muy parecidos a los humanos del exterior. Estatura alta, ojos ligeramente rasgados de color claro, cabello muy claro, tanto que parece platinado o blanco. El hermano Interano tiene su cabello cortito y la hermana Interana, lo usa un poco más largo, a la altura de sus orejas. Visten ropas sueltas y muy cómodas. Ellos son espíritus desencarnados de la Ciudad-Interna-material. Son los encargados de la realidad Antimateria (más allá) y son los que nos reciben cuando nosotros del exterior desencarnamos. Nuestros hermanos Interanos pertenecen a la Ciudad Interna-material del interior del planeta llamada: ATLANTIS.

A partir de los grados: séptimo, octavo y noveno ya tienen rasgos Ayaplianos más definidos. El séptimo grado son altos, muy delgados, sin cabellos, ojos grandes, rasgados y claros, nariz y boca pequeñas, piel blanca e iridiscente (Ayaplianos-Elohim) El Octavo grado son también altos, muy delgados, sin cabellos, ojos grandes y claros, nariz y boca pequeñas, piel ligeramente cobriza (Ayapliano-Seramitas) El Noveno grado son parecidos a los Ayaplianos-Seramitas con ciertas diferencias, tienen el cuerpo más fino y delgado, sin cabellos, ojos grandes rasgados y claros, sin cabellos (Voluntarios de las naves).

La mayoría de los contactos o canalizaciones que se reciben en el exterior, son con el sexto grado de la Ciudad-Interna-Atlantis o sea, de los Interanos-espíritus-desencarnados-antimateria, llamados Maestros Ascendidos.

Ellos nos explican que los pensamientos negativos (electrones), viven en la electricidad descontrolada de los seres o del planeta. Los pensamientos positivos (protones), viven en el magnetismo controlado de los seres o del planeta.

El descontrol químico de los seres del planeta redunda en serias enfermedades psíquicas, algunas de estas enfermedades futuras y graves serán la Depresión y la Bipolaridad. Este descontrol químico se debe a que la persona tiene demasiados electrones en su cerebro y esto se produce por la cantidad de medicinas que ingiere o por la pésima alimentación que tiene. Al producir muchos electrones, estos invaden el centro del núcleo eliminando los protones y es esto lo que causa el desequilibrio químico.

El cuarto libro de EL SER UNO ha sido dictado por los Ayaplianos-Seramitas y los Ayaplianos-Interanos llamados ELOHIM.

Son de tamaño mediano, llegan hasta un 1:80 metro de altura. Su piel es muy clara, tal vez un poco fuera de lo común, se debe a que siempre vivieron en las profundas cavernas y allí se desarrollaron. Son de contextura fina, cabeza prominente, sin cabellos ni pelos, de brazos y piernas alargadas, sus ojos son un poco más desarrollados que los nuestros y de color muy claros, manos con cinco dedos alargados.

Los Elohim no han podido reproducirse. A través del tiempo se han clonado y encarnan en su clon-genético para continuar viviendo. Luchan al igual que nosotros para regresar a su origen y están trabajando arduamente en ellos mismos, para conseguirlo.

La población de los Elohim-Ayaplianos es pequeña, son exactamente 144 de ellos, los cuales han conservado el 40% de entendimiento sano en su alma (lado derecho del cerebro). Siempre fueron los mismos desde que llegaron al planeta, se han encarnado una y otra vez en sus clones, a diferencia de los seres del exterior.

Los 144 Elohim, han tenido que clonarse, para conservar su subsistencia. En la sociedad de los Elohim, existen los Grises, estos son solamente clones, formados de los que se distorsionaron totalmente, fueron reproducidos a través del clonaje, para el servicio y trabajo en la Ciudad-Nave en que viven. Los grises-servidores no perciben su entorno, están totalmente parametrados y robotizados para el servicio repetitivo. Son ciervos y trabajadores de la sociedad Elohim.

Nos cuentan que el electromagnetismo es un campo de fuerza, elaborado artificialmente por ellos para atraer  los Nimeos-energías agruparlas conforme su frecuencia, vibración, ritmo, formas, colores etc. Es necesario para que sus Nimeos-energías que aún no están elevados, no puedan contaminar a otras realidades elevadas de existencia.

El tercer libro EL SER UNO, fue dictado por los Ayaplianos-Seramitas de la Octava y Novena Jerarquía de la Realidad Antimateria (Espiritual) del Planeta Tierra. Están en la realidad antimateria del planeta Tierra y pertenecen a las energías-pensamientos del lado derecho del cerebro, su sede se encuentra en el Cono-Norte.

El Cono-Norte del planeta se divide en grados y jerarquías, comenzando por el sexto hasta llegar al noveno grado. Al llegar al noveno grado, essa energías-pensamientos se encontrarán listas para que los Ayaplianos-Voluntarios de las naves los alberguen, pasando así al décimo grado. Al albergarlos en sus burbujas-esferas, les estarán dando la oportunidad de continuar su existencia, los llevarán con ellos en sus naves para regresar a sus planetas de origen.

Son LA CIUDAD INTERNA DE LAS ENERGÍAS-PENSAMIENTOS, pertenecen a la realidad Antimateria del Universo Alciático.

Los grados sexto, séptimo, octavo y noveno, ya no están sujetos a reencarnar, se comunican con nosotros a través de la telepatía. se han liberado de reencarnar por su conocimiento, entendimiento, amor, trabajo, esfuerzo, creencia, verdad y libertad que les caracterizó en las vidas materiales que algunos de ellos tuvieron.

En todos los tiempos se han presentado holográficamente ante nosotros, utilizando sus nombres cósmicos de herencia y linaje. Son aquellos que hemos venerado por las enseñanzas que nos transmitieron y este ha sido el  gran problema, los vemos como dioses y no lo son.

Nos cuentan que el magnetismo corresponde a las zonas 6 a 10 del campo electromagnético. Cuando el alma llega a concebir espíritu, es porque su porcentaje de Nimeos superó el 50% de su capacidad de elevación; esto le permite al alma poder continuar su trabajo interno, pero ya no necesitará regresar y encarnar en el exterior, lo hará en la Ciudad Interna, donde continuará su existencia aprendiendo el Conocimiento, Entendimiento y Amor Universal.

El espíritu se albergará en la Ciudad Interna de los Atlantis-Interanos hasta terminar el sexto mes de gestación. Al entrar al séptimo mes de gestación, hará parte del magnetismo, pasará a la Ciudad Interna de Lemur, donde terminará el séptimo, octavo y noveno mes del embarazo espiritual.

En el sexto libro de EL SER UNO nos hablan de los Lemurianos. De todos los hermanos, son los seres más puros y auténticos que existen en este planeta. Ellos conservaron su pureza intacta, no se distorsionaron ni se enfermaron por influencia de la energía de Satien. Ellos son los más cercanos a nosotros e inclusive cuando desencarnan no van a la Ciudad Interna de Atlantis, ellos ingresan a la Ciudad Interna de Lemur, donde se contactan directamente con  los hermanos-Luz: Los Voluntarios.

Aún no se han unido a nosotros, los hermanos-Luz, comenzarán hacerlo cuando el Alineamiento Cósmico haya comenzado. Están esperando a las energías-pensamientos de Atlantis. Cuando los espíritus de Atlantis se unan a nosotros los hermanos-Luz en este Alineamiento Cósmico, entonces comenzaremos la fusión de energías para prepararnos al regreso. Como ustedes saben pasaremos a Venus, luego Mercurio y saldremos por la Glándula Pineal-Astro Sol. El Alineamiento Cósmico nos ayudará, debido a la cercanía que tendremos a otras realidades de LUZ y AMOR, el pasaje será adecuado para nuestra salida

El primer libro de EL SER UNO, fue dictado por los Ayaplianos-Octava y Novena Jerarquía de la Realidad Antimateria (Espiritual) de Alfa Centauri. Fueron 660 voluntarios los que llegaron al planeta Tierra.

Los Voluntarios nos retiraron  la Memoria Cósmica, esa memoria está almacenada  en la Realidad Lemuriana. Este es el origen donde parten nuestras memorias planetarias. Cuando lleguemos a esta realidad, entonces recuperaremos nuestra Memoria Cósmica y con ello podremos regresar a nuestros orígenes.

Los Voluntarios son nuestro  futuro. Han  unido los cuatro elementos y en estos momentos se encuentran en América del Sur, porque se están uniendo con el elemento éter, para luego salir por el elemento helio.

Cuando se produce un alineamiento, es el centro, el eje, el Principio Único que expande su energía inundando su realidad de un alto contenido de ideas, estas se expanden y nutren al universo. Cada alineamiento tiene el proceso de expandir y retraer el flujo y reflujo del torrente energético, a través del flujo vinimos y a través del reflujo regresaremos.

Nos cuentan que las primeras Ciudades Internas inmateriales o sea Antimateria, que fueron fundadas por ellos  cuando llegaron al planeta, son y siempre serán: LEMUR (Cono-Polo Norte) Y ATLANTIS (Cono-Polo-Sur).

Nuestras almas deben encarnarse en los Interanos, ahí formaremos nuestro Ser Energético (espíritu) para luego encarnarnos en los Elohim, Seramitas y de esta manera pasaremos a los Voluntarios de las naves para ser todos UNO y regresar a nuestros orígenes. Pero no necesitamos encarnarnos en los Lemurianos para llegar al SER UNO.

Para el retorno seguiremos el camino inverso al de la encarnación.

Cuerpo material………………………………….Jesús

Cuerpo astral………………………………………Ra

Cuerpo mental……………………………………Ser-Ra-Mitra

Cuerpo energético………………………………Cristo

Cuerpo universal………………………………..Thoth

Thoth es la marca del linaje universal. Cristo es la marca de su linaje mental, alcanzado como Seramita. Ra es la marca de su herencia planetaria y Joshua Emmanuel es la marca de su trabajo como voluntario.

La imagen de los libros de EL SER UNO representa el prisma, las nueve dimensiones, donde todo lo existente vive y se desarrolla:  las nueve especies. Esta es la Glándula Pineal de EL SER UNO. Somos un holograma reflejado por nuestra mente a través del prisma de la glándula pineal en nuestro cuerpo etéreo.

NOTAS DEL AUTOR

Esté artículo fue proyectado como el séptimo compendio del Ser Uno, que integra la información que sobre las especies aparece en los 6 libros del Ser Uno

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